La Mesa de Diálogo de Obiang: Mucho lujo, pero pocas nueces
Guinea Ecuatorial
Abaha (20/7/2018)
La llamada Mesa de Diálogo Nacional que se reúne estos días en el lujoso Palacio de Sipopo en Malabo –ya van seis Mesas-, convocada por el Presidente-Dictador, Teodoro Obiang Nguema, lleva el mismo camino que las anteriores. Ni chicha ni limoná. Algo parecido a la Amnistía Política, que no se ha podido llevar a efecto, entre otras cosas, porque parece ser que no aparecen algunos presos –no se sabe si han desaparecido o les han “desaparecido”-, además de que a la primera dama, Constancia Mangue de Obiang, no le parece bien que salga a la calle los que, supuestamente, quieren desalojarla del poder. ¡Estaría bueno!
Abaha (20/7/2018)
La llamada Mesa de Diálogo Nacional que se reúne estos días en el lujoso Palacio de Sipopo en Malabo –ya van seis Mesas-, convocada por el Presidente-Dictador, Teodoro Obiang Nguema, lleva el mismo camino que las anteriores. Ni chicha ni limoná. Algo parecido a la Amnistía Política, que no se ha podido llevar a efecto, entre otras cosas, porque parece ser que no aparecen algunos presos –no se sabe si han desaparecido o les han “desaparecido”-, además de que a la primera dama, Constancia Mangue de Obiang, no le parece bien que salga a la calle los que, supuestamente, quieren desalojarla del poder. ¡Estaría bueno!
Llevan ya cuatro sesudos días de intensos debates y, que sepamos, hasta ahora, no han hecho más que lucir lujosos trajes recién comprados para la ocasión y verborrea hueca, sin contenido. Comentan, parlotean, pero no más lejos de lo establecido. Sabemos que a algunos se les hace cuesta arriba estar allí, pero… Se dice que la mayoría de los asistentes han recibido un peculio extraordinario en forma de Francos CFAS y promesas de cargo si se avienen a los dictados del que manda.
La prensa internacional no ha hecho ni caso del asunto, y la española un poco, pero sin seriedad. En España hace mucho tiempo que los grandes medios de comunicación no se estrujan el cerebro haciendo análisis, simplemente cortan y pegan de acuerdo con las conveniencias, el rumor o vaya usted a saber. El caso, es que una mayoría del pueblo español ni recuerda ni sabe que Guinea Ecuatorial ha sido colonia española y después provincia. ¡Sí, provincia! En consecuencia, el tema les interesa poco, lamentablemente.
De momento, unas pinceladas sobre lo acontecido en tan magno y lujoso evento. Tiempo tenemos para ahondar.
Mucha ponencia, mucho título rimbombante, participaciones ante micrófonos –a algunos les entregaron el papel para que lo leyeran- y algunos “pasillos” a semejanza de las dos cámaras españolas.
Una larga lista de siglas ha sido hecha pública por el Gobierno de la República de Guinea Ecuatorial. La lista la encabeza el partido gubernamental, PDGE, seguida por el CPDS, partido político que la mayoría de los medios de comunicación españoles consideran erróneamente que es el único opositor. En su momento, es cierto, fue junto con el Partido del Progreso, las dos formaciones políticas con más arraigo, pero ciertas decisiones –tomadas desde Madrid por el PSOE- llevaron al CPDS a “entrar” en la Cámara de Representantes del Pueblo de Guinea Ecuatorial. Ese partido llegó a tener dos diputados en esa cámara, uno de ellos Plácido Micó, otrora uno de los Vicepresidentes de la Internacional Socialista e íntimo amigo del exministro socialista, Miguel Ángel Moratinos.
Casi una veintena de siglas se dan cita en esa Mesa de Diálogo, aparte de algunos “activistas”, como es el caso del bubi Humberto Riochi, que no se ha atrevido en esta ocasión a decir que representa al MAIB (Movimiento para la Autodeterminación de la Isla de Bioko), cuyo coordinador general es Weja Chicampo, a pesar de que la diputada de Podemos, Rita Gertrudis Bosaho Gori, se empeñe en lo contrario.
Esta Mesa de Diálogo, como las anteriores, es ya un fracaso anunciado. Un fiasco. No va a llegar a ninguna parte por mucho que se empeñen el Gobierno de Guinea Ecuatorial y el español y el lobby de Obiang en España.
Sin duda, urge una Transición en ese país africano, pero para llevarla a cabo se debe contar con la participación de todos los partidos políticos, sin excepción alguna, y una Amnistía Política de verdad. Después, como casi siempre, el que más corra capador.
Si España y la UE demoran ese cambio, las consecuencias pueden ser funestas. Recuérdenlo.