jueves, 6 de julio de 2017

El JUICIO EN PARIS CONTRA TEODORÍN HA QUEDADO VISTO PARA SENTENCIA

Tras la última sesión del juicio que se venía celebrando en el Tribunal Correccional de París, contra Teodorín  Nguema Obiang Mangue, la Pare Civil ha posado  Frente al solemne edificio del Palacio de Justicia francesa, con la bandera Guinea ecuatoriana desplegada y signos de triunfo y victoria

París, 6 de Junio de 2017.- Cumpliendo puntualmente con  el calendario establecido, el Tribunal Correccional de París ha celebrado la última sesión del juicio que se venía desarrollando contra el hijo del dictdor de Guinea Ecuatorial, Obiang Nguema, conocido con el nombre de Teodorín Nguema Obiang.

Tras la vibrante sesión del día anterior, la  parte de la Acusación dejó plasmadas sus conclusiones definitivas, selladas con la petición del Fiscal de penas de 3 años de prisión contra Teodirín,  de 30 millones de euros y la incautación de todos los bienes robados por el hijo de Obiang Nguema. 

La primera sesión del 6 de Junio se inició con las intervenciones de lo Abogado a de la Defensa. La intervención del principal Abogado defensor de Teodorín, Martigny, se retrasó unos minutos. MOTIVO:  Por los pasillos del Tribunal saltó la noticia de que Obiang Nguema Mbasogo había dado a sus hermanos militantes del PDGE, la fulminante orden de quemar la Embajada de Francia en Malabo, si resultaba condenado Teodorín. El primer Abogado de la defensa hizo esperar a la Juez, mientras se apresuran a desmentir la noticia por los pasillos del Palacio. 

Tres abogados de la defensa de Teodorín vaciaron las casi cinco horas concedidas por la paciente Juez, para intentar, con los mismos argumentos de siempre, desmontar el pesado y argumentado Dossier contra Teodorin: La inconstitucionalidad del proceso; la incómoda presencia de la temida PARTE CIVIL y sus erguidos  componentes mirados con "extraño respeto e impotencia por la Defensa de Teodorín, etc.

Los argumentos de la defensa no han variado, siguen con la  eternamente aludida "falta de pruebas" así como el recurso a las leyes de otros paises para lograr deslegitimar el juicio, en París, a Teodorin. 

Otro argumento recurrente, ha silo la constante desacreditación o intento de invalidar, no sólo los argumentos del Dossier, sino también el testimonio de los Testigos directos personados en el juicio. 

No faltó, para desencanto de los numerosos asistentes llevados de la Embajada de Obiang Nguema en Paris, la intervecion del Abogado guineano de Teodorín, Sergio Tomo, que, en eterna actitud genuflexa ante la Juez, pedía, tocaba y "exigía" perdón para Teodorin, porque sus graves delitos de robo, desvío de fondos, blanqueo de dinero, corrupción, abuso de poder y de confianza, extorsión, etc. Etc.., no son delito ni se juzgan en Guinea  Ecuatorial; porque ahí no hay más ley que las que dejaron los españoles...y las reformas de la Constitución  de Obiang Nguema.

Las tres intervenciones durante cinco largas horas, acabaron mojadas por la lectura, por parte de la Juez Presidenta, de un  documento hecho llegar al Tribunal por uno de los testigos, el italiano Roberto Berardy; lectura que fue seguida por la Defensa de Teodorín con  el ceño fruncido y el semblante entristecido.

Finalmente, la Juez anunció la ultima sesión de este largo juicio dejándolo VISTO PARA SENTENCIA, hasta el próximo 27 de octubre

A SEÑALAR: 
1. Tras la sesión anterior en la que anunciaba la posibilidad de incidentes provocados por la turba de la Embajada  de Obiang en París contra la PARTE CIVIL, la sesión de este día  ha estado visiblemente asistida por la presencia de miembros de Seguridad francesa.

2.- Un cordial estrechar de manos y una  breve y distendida  charla entre el Embajador de Obiang Nguema, Muguel Oyon Ndong Mifum y Severo Moto, marcó un llamativo signo de protocolo en las cívicas relaciones entre las dos  partes.
Para mayor  sorpresa, las cámaras de la Televisión de Guinea Ecuatorial se han acercado, por primera vez en este juicio, a los líderes de la PARTE CIVIL para recibir sus impresionesones.
A la espera de que dichas entrevistas sean vistas por el paciente pueblo Guineo, cerramos nuestra crónicas desde Paris