martes, 13 de marzo de 2012

LA UNESCO HA IDO DEMASIADO LEJOS




Por Coltán

En nuestras dos publicaciones, El Confidencial y la página Oficial del Gobierno en el Exilio, nuestros compañeros de redacción, han desgranado uno a uno y de forma magistral , los motivos por los que la UNESCO no ha debido nunca avalar este ignominioso galardón, aceptando un dinero manchado con la sangre de los guineanos.

Queridos compañeros, aunque esta vez la UNESCO haya ido demasiado lejos, el coqueteo y hasta la legitimación de estos dictadores, especialmente con aquellos que se mueven en la izquierda, suele ser norma bastante habitual en esta Orgnización. Mientras el programa STAR (Stolen Asset Recorvery Initiative), impulsado por Naciones Unidas y Banco Mundial , trata de tejer una gran red de países que actué de manera coordinada para identificar y retener fondos obtenidos ilícitamente por dictadores, la UNESCO va por libre y se plantea mantener a toda costa el Premio Internacional Obiang Nguema Mbasogo (con solo cambiar la denominación) y aceptar los 2,45 millones de euros donados por este dictador.

Nunca he entendido a qué juega verdaderamente la UNESCO y si su cacareado compromiso por la libertad de los pueblos oprimidos es sincero. Tampoco he podido entender como en infinidad de ocasiones ha estado en contra de los países democráticos occidentales (especialmente en contra de EEUU) y sí a favor de auténticos tiranos como Gadafi, miembro muy activo de esta organización (recordemos su recibimiento y discurso en la sede de la UNESCO en 2007, en París ) o del activista palestino Yasser Arafat, el amigo del inefable Moratinos.  Ahora esta Organización no tiene el más mínimo pudor en aceptar el dinero de  Obiang, cuando todo el mundo conoce la clase de dictador asesino y ladrón que es. 

Nada me coge por sorpresa, porque conozco muy bien a la UNESCO. A partir de los años 80 comencé a dirigir proyectos de desarrollo comunitario en el medio rural en colaboración con la Maison Familiar Rural  francesa, eran acciones coordinadas por diferentes  grupos de la UNESCO. Confieso que se me hacía prácticamente imposible aceptar la doctrina y la metodología de acción para una persona alejada de la ideología marxista, como era mi caso. Así que decidí desligarme de aquellos grupos. Cancelé la suscripción a su publicación periódica más importante,   El Corro  de la Unesco y esperé a que aquella fiebre se pasara. Terminado el mandato de Amadeu-mahtar M´Bow de Senegal, le correspondió la Dirección General al español Federico Mayor Zaragoza (1987) y las cosas no cambiaron en absoluto, la UNESCO seguía por los mismos derroteros de siempre. 

En pleno siglo XXI,  la UNESCO parece encontrarse  anclada todavía   en el Movimiento de los Países no Alineados (nacido en plena Guerra Fría) y atrapada en una amalgama de regímenes con bastantes carencias democráticas, donde encontramos: a países que profesan aún  un comunismo apenas reciclado, a teocracias islamistas , regímenes dictatoriales (con los hermanos Castro a la cabeza) y gobiernos populistas (Kisner, Dilma Roussef, Hugo Chavez etc). Su  panculturalismo ramplón, es fruto de un eclecticismo simplista, que no encaja en absoluto  en los postulados de la mayoría de las democracias modernas.

Sabemos que las democracias occidentales, con Francia a la cabeza, no están dispuestas a aceptar este premio, aunque haya cambiado de denominación, así se lo han hecho saber a su Directora, Irina Georgieva Bokova, otra comunista reciclada, (para no perder la costumbre), y lo más probable es que al final se retire, sencillamente  la UNESCO ha ido ya demasiado lejos y el mundo occidental no está dispuesto a permitirle esta nueva metedura de pata, porque el régimen de Obiang está ya en la lista de dictaduras a derribar.