Guinea Ecuatorial es el único país de habla hispana en África.
Por: Ramiro Grau Morancho
Este organismo depende del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación, que dirige, es un decir, el inefable señor Moratinos, y se dedica, en estos tiempos de escasez económica, a despilfarrar el dinero recaudado “manu militari” de nuestros impuestos.
En el Boletín Oficial del Estado del pasado 17 de agosto aparecía una resolución de 28 de julio de 2010 por la que se publicaban las ayudas concedidas –obviamente, a fondo perdido, y tan perdido- para la realización de proyectos de desarrollo.
Mientras en España tenemos alrededor de cinco millones de parados, y se está denegando la prestación de 420 euros mensuales a miles y miles de personas, por carencia de medios económicos, nuestros generosos –con el dinero ajeno- gobernantes se dedican a gastarse –mejor dicho, a tirar- nuestro dinero en asuntos como los siguientes:
- Liga Española de la Educación y Cultura Popular, proyecto “Fortalecidas las estrategias municipales en política de juventud (Yo joven”: 392.065 euros, en EL SALVADOR. (La política de juventud en España se caracteriza por su inexistencia, como no se considere como tal la promoción del aborto).
- Fundación Benito Menni, proyecto “Fortalecimiento del sistema de salud mental en Guinea Ecuatorial”: 899.422 euros, en GUINEA ECUATORIAL. (Mientras a las asociaciones españoles y aragonesas que trabajan en este sector se les están recortando drásticamente las subvenciones).
- Asociación de Investigación y Especialización sobre Temas Iberoamericanos, AIETI, proyecto “Tejiendo acciones de incidencia contra la violencia doméstica y de género en el departamento de Guairá”: 357.733 euros, en PARAGUAY. (Al parecer “el negocio” de la violencia doméstica se está internacionalizando; muchas personas viven estupendamente de este nuevo yacimiento de empleo, la industria de la denuncia y de la destrucción de familias, que en muchas ocasiones podrían continuar unidas, con una buena mediación y proyectos de vida en común).
- Amigos de la Tierra, antes FAT, proyecto “Educación, concienciación ambiental y manejo sostenible de desechos sólidos en las poblaciones de San Lorenzo y Amapala”: 374.552 euros, en HONDURAS. (Aquí también tenemos muchos desechos que recoger, y políticos y liberados sindicales que reciclar a trabajadores normales y corrientes, si es que sirven para algo).
- Fundación Tierra de Hombres España, proyecto “Salud materno infantil y reproductiva, protección de la infancia y empoderamiento comunitario en Santo Domingo de los Sáchalas”: 176.462 euros, en ECUADOR. (¿Se trata de fomentar los asesinatos de los niños en el vientre de sus madres? ¿Alguien sabe que es eso del “empoderamiento comunitario”, además de una patada al diccionario de la Real Academia de la Lengua Española?).
- Fundación World Vision International, proyecto “Prevención y reducción de riesgos por sequía en el Municipio de Machareti, Región del Chaco Boliviano (Fase complementaria al proyecto de 2009): 335.233 euros, en BOLIVIA. (Seguramente con nuestra ayuda a fondo perdido comprarán agua mineral y la echaran desde el Cielo con avionetas, digo yo, pues no entiendo como se puede reducir la sequía. Aquí en España también tenemos mucho problema de sequía).
- Fundación Real Madrid, proyecto: “Programa sociodeportivo y de formación profesional en el centro Don Bosco de Tambacounda”: 110.000 euros, en SENEGAL. (Ahora resulta que la propaganda del Real Madrid en el extranjero tenemos que pagarla los contribuyentes. ¿Es que no pagan millones y millones de euros por los fichajes, y luego no tienen dinero para sus obras de beneficencia? Los donativos, como los vicios, tiene que pagárselos cada uno, de su propio bolsillo…).
En fin, no quiero seguir para no aburrir al amigo lector, aunque la lista de nuestra prodigalidad ocupa nada menos que ocho páginas del Boletín Oficial del Estado, por lo que son centenares los proyectos subvenciones y muchos millones de euros las cantidades gastadas, que no invertidas, en estas subvenciones a fondo perdido.
¿Habría que ir pensando en solicitar la incapacitación del ministro Moratinos, digo desatinos, por su prodigalidad manifiesta, que amenaza con acabar con los escasos fondos que nos quedan…?
Propongo que se cambie el nombre al Ministerio y pase a llamarse “Ministerio de Asuntos y Despilfarros Exteriores”. Seguramente es más apropiado, pues explica mejor la labor que actualmente se realiza.
¿O tendrá razón mi amigo el quiosquero cuándo dice que es un dinero de ida y vuelta? Es decir, que sale como subvención pero una buena parte retorna a los bolsillos de quienes lo conceden, gestionan y administran, así como a los partidos políticos y sindicatos que en muchas ocasiones –casi siempre- están detrás de estas supuestas organizaciones no gubernamentales de desarrollo?
Ramiro Grau Morancho,
Jurista y escritor
Fuente: http://www.aragonliberal.es/noticias/noticia.asp?notid=41557&menu=3
