sábado, 26 de octubre de 2019

OBIANG ESTÁ DISPUESTO A TODO CON TAL DE MANTENERSE EN EL PODER


Redacción El Confidencial

La perversidad de Obiang Nguema no tiene límites. No le ha parecido suficiente con haber estado 51 (incluidos los 11 años con Macías) encarcelando, torturando, asesinando y acaparando, para él y para su clan, todos los recursos de los  guineanos, sino que también está dispuesto a acabar con nuestro  futuro y el de nuestros hijos, incluso cuando él se haya ido a la tumba. 
A pesar de que la  fortuna personal de nuestro dictador le sitúa entre los mandatarios mas ricos del mundo, ha tenido que recurrir a prestamos milmillonarios procedentes del gobierno chino, prestamos que se va a tardar años en devolver y que pueden hipotecar el futuro de los guineanos. No conforme con esto, intenta ahora conseguir otro nuevo préstamo del FMI.
Esta semana ha vuelto a dar una nueva y peligroso vuelta de tuerca, echándose en los brazos de la Rusia de Putin, quizá para intentar salir de la difícil situación que se le está viniendo encima. Situación que viene provocada, en primer lugar,  por la fuerte oposición que está ejerciendo el exilio, a través de los partidos políticos, los activistas, los autistas y los guineanos de pie, que con sus constantes denuncias, están consiguiendo una gran resonancia ante la opinión publica internacional, poniendo al dictador contra las cuerdas. 


Por otra parte, los grandes países democráticos de occidente, con intereses en Guinea Ecuatorial, no están dispuestos a seguir sosteniendo, ni a mantener como socio comercial  a un auténtico sátrapa,  que roba, encarcela, tortura y mata a su pueblo. 
Existe una circunstancia interna que desasosiega al dictador, que es la disputa abierta por el poder que ha iniciado su clan familiar. Son varios los bandos, a cual mas pernicioso para Guinea, con intereses contrapuestos, dispuestos a perpetuar la dictadura  en nuestro país y seguir con la represión, el encarcelamiento de disidentes, los robos y las muertes de guineanos inocentes. 
Obiang Nguema que conoce perfectamente como se las gastan en su familia, comenzando por las intrigas de Dña. Constancia y terminando por la perversión de sus disolutos retoños, está convencido que en esta situación él pude ser la primera víctima.  
Es muy duro para los que hemos sufrido en nuestras propias carnes la dura represión del dictador y conocemos la gran tragedia que está padeciendo en estos momentos nuestro pueblo, oír de la boca de Obiang una mentira tras otra, siempre las mismas.
Ahora ante Putin, abjura de los países  que durante mucho tiempo le han estado protegiendo y les acusa incluso de haber participado en algún que otro intento de golpe de estado contra su régimen. Obiang sigue repitiendo su viejo mantra de que esos mismos países quieren acapararse de los  recursos de Guinea o acabar con la "paz reinante" en en el  país, cuando él y su familia han sido los auténticos depredadores de todos nuestros recursos y su dictadura es la única que está violentando a nuestro pueblo.



Obiang quiere también que Rusia le proteja de sus opositores, los "detractores" como nos llama, a los que también nos denomina la oposición violenta. 
Este ultimo intento de meterse en la órbita de los países herederos del comunismo, encierra un autentico peligro para el futuro democrático de nuestro pueblo.  Ya conocemos los pocos escrúpulos, que cuando se trata de intereses económicos, tienen estos países. Conocemos la situación de Venezuela y como este pueblo hermano no se puede desembarazar de Maduro, debido a la presencia de mas de 22.000 asesores militares cubanos (muchos   de ellos camuflados de médicos). Además del compromiso de  Cuba con  el mantenimiento de la revolución bolivariana, Rusia y China ejercen además un control -imperialista- sobre la economía del país. El resultado es que el pueblo venezolano muere de hambre, muere por falta de medicinas y por la violencia de la policía política de Maduro. Ya ha advertido Rusia que no tolera una "injerencia" en los asuntos de Venezuela.
Esta situación es la que busca exactamente Obiang para Guinea al acudir solícito a la protección de Rusia, ya que en palabras del propio dictador "mi gobierno tiene fuertes vínculos por Cuba..." y una "especial relación con la Venezuela", la Venezuela de Maduro. A Obiang no le basta con mantener en Guinea a mas de 6000 mercenarios extranjeros, que van reemplazando al propio ejercito guineano. Según hemos sabido esta semana Obiang ha vuelto a expulsar de sus fuerzas armadas a 200 oficiales. 
Lo que hace Obiang es una huida suicida hacia adelante, a sabiendas de que con ella está condenando a su pueblo a la represión y a la miseria eterna. Pero Obiang ha demostrado no importarle su pueblo, mas aún lo ha despreciado públicamente en numerosas ocasiones, hasta llegar a llamarnos "pobres mentales". 
Parece que el dictador está dispuesto a hacer exactamente lo que en una ocasión dijo: "cuando yo me vaya no va a quedar en Guinea Ecuatorial ni la hierba". 
Según un dicho castellano, "la pelota está en nuestro tejado", a nosotros y también a los grandes países que defienden la democracia, nos toca responder.