Obiang pacta con Putin que la Armada rusa utilice los puertos de Guinea Ecuatorial
Lunes 05 de octubre de 2015, 14:01h
Teodoro Obiang ha pactado con
Vladimir Putin que la Armada rusa disponga de instalaciones en los puertos de
Malabo y Bata tras la firma de un acuerdo entre los ministerios de Defensa de
ambos países. La presencia militar rusa en el estratégico golfo de Guinea, la
mayor reserva de petróleo del continente africano, se une a la reciente alianza
de cooperación económica entre China y Guinea Ecuatorial.
El acuerdo militar fue anunciado el
viernes 2 de octubre por el portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia para
cuestiones de la Armada, Rango Igor Dygalo, y lleva las firmas del comandante
en jefe de la Armada rusa, almirante Viktor Chirkov, y el ministro de Seguridad
Nacional de Guinea Ecuatorial, Nicolás Obama Nchama.
Las visitas de los buques de guerra a
los puertos ecuatoguineanos y rusos, la realización de ejercicios conjuntos
entre ambas Marinas de guerra y la colaboración en la construcción naval y la
hidrografía, son los principales puntos del documento firmado.
No se descarta que el acuerdo
Obiang-Putin incluya “cláusulas secretas” por las que Rusia se compromete a
garantizar la seguridad del régimen dictatorial de Teodoro Obiang Nguema (73
años) en caso de desestabilización del país o intentos de golpe de Estado,
según supo MIL21 en fuentes de inteligencia europeas.
La Armada rusa se
establece en el golfo de Guinea, la mayor reserva de petróleo de África
El acuerdo de cooperación militar ha
sido acogido con preocupación en las cancillerías europeas y en Washington al
considerar que la presencia rusa en el estratégico Golfo de Guinea es una hábil
jugada del Kremlin para ocupar posiciones permanentes en la mayor reserva de
petróleo del continente africano, según las citadas fuentes.
El crucero “Moskva” en Malabo
El pasado mes de julio un
destacamento naval ruso atracó durante tres días en el puerto de Malabo como
consecuencia de un acuerdo inicial entre ambos Gobiernos que fue firmado la
víspera de la llegada de los buques de guerra por el comandante en jefe de la
Armada rusa, Víctor Chirkov, y el ministro delegado de Defensa Nacional de
Guinea Ecuatorial, Vicente Eya Olomo
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La agrupación estaba formada por uno
de los buques estrella ruso, el crucero lanzamisiles “Moskva”, escoltado por
la fragata “Pitlivi” y dos buques de apoyo logístico, el carguero “Iván
Bubnov” y el remolcador “Shajter”.
Cinco millones de barriles
diarios
La mayoría de los países productores
de petróleo del África subsahariana, con excepción de Chad y Sudán, bordean el
golfo de Guinea: Ghana, Nigeria, Camerún, Guinea Ecuatorial, Gabón, República
del Congo Brazzaville, República Democrática del Congo, Angola y República
Democrática de Santo Tomé y Príncipe.
Entre todos producen más de 5
millones de barriles diarios de petróleo que se exportan a Estados Unidos,
Europa, India y China. Las reservas del golfo de Guinea se estiman en más de
25.000 millones de barriles (5% del total mundial).
Con una producción de 320.000
barriles diarios (tercer productor africano) y unas reservas probadas en torno
a los 1.500 millones de barriles, el petróleo de Guinea Ecuatorial representa
el 90% de los ingresos del Gobierno y el 98% de sus exportaciones. Estados
Unidos es su principal socio con el 31% de las exportaciones, China el 12% y
España el 8%. Las reservas de gas se elevan a 37.000 millones de m3.
Investigados por corrupción
Teodoro Obiang, su clan familiar y
un reducido grupo de altos funcionarios controlan la compañía petrolera
estatal GEPetrol y la empresa nacional del gas SONAGAS. En 2004 una
investigación del Senado norteamericano descubrió 60 cuentas en el Banco Riggs
de Washington cuyos titulares eran el Presidente y su círculo más cercano, con
ingresos de 700 millones de dólares efectuados por las petroleras
norteamericanas Marathon Oil Corporation y Exxon Mobil.
En los últimos años los
colaboradores y testaferros de Obiang han sido objeto de investigaciones de la
Policía Judicial y el Banco de España por blanqueo de dinero y corrupción
política, según publicó el diario El País en abril de 2012.
En el informe de Transparencia Internacional
de ese mismo año sobre la percepción del nivel de corrupción en los gobiernos
y clase política del mundo, Guinea Ecuatorial ocupaba el puesto 163 de 174
países.
Desde 2005 el PIB de Guinea
Ecuatorial se ha duplicado hasta llegar a los 10.700 millones de euros en
2014. Sin embargo, sus 757.000 habitantes no se benefician de tan enorme
riqueza dado que el 75% de la población vive con dos dólares diarios.
Se extiende el yihadismo
En los últimos años el yihadismo se
ha extendido al golfo de Guinea con núcleos islamistas asentados en barrios
musulmanes que crecen en torno a mezquitas financiadas principalmente por
Arabia Saudí.
Estos grupos, junto a una piratería
creciente, amenazan la fragilidad política de los Estados de la región, como
es el caso del grupo terrorista Boko Haram en Nigeria, que se ha unido al
Estado islámico y se autodenominan la “Wilayat GharbI friquiya” o Provincia de
África Occidental.
Allí donde hay yihadistas es muy
probable encontrar islamistas de Chechenia, Daguestán e Ingushetia, enemigos
acérrimos de Rusia. En este contexto es predecible el interés de Putin de
desplegar fuerzas militares cerca de los focos de actividad yihadista ante la
pasividad, en muchos casos, de Estados Unidos.
Obiang también pacta con China
En esta mezcla explosiva de
yihadismo, petróleo y Estados inestables cobra sentido el acuerdo del
dirigente ruso con Obiang. Moscú pone un pie militar en Guinea Ecuatorial
-epicentro del golfo de Guinea- al obtener “facilidades portuarias” para sus
buques de guerra, como de una forma similar ha ocurrido con la base
siria de Tartus.
En paralelo, el dictador
ecuatoguineano, que lleva 36 años en el poder, ha dado un giro en su política
para blindarse con China a costa de su amistad y negocios con Estados Unidos.
El pasado mes de abril firmó en
Pekín con el presidente Xi Jinping un ambicioso acuerdo de cooperación por el
que China se compromete a construir infraestructuras, hospitales, impulsar los
intercambios comerciales y dar apoyo tecnológico a Guinea Ecuatorial con una
inversión inicial de 2.500 millones de dólares.
La ayuda de Pekín para sacar del
atraso endémico a Guinea Ecuatorial tiene su precio: que Obiang permita a la
empresas chinas acceder al petróleo, uranio y oro ecuatoguineano.
A la presencia económica china se
han unido, pues, los intereses estratégicos rusos. Moscú no necesita el
petróleo ni el uranio de Guinea Ecuatorial, pero sí que sus buques de guerra
tengan una base para efectuar escalas y reparaciones en la fachada atlántica
del continente africano en sus tránsitos hacia y desde el cabo de Buena
Esperanza, el estrecho de Gibraltar y las costas latinoamericanas. Y ha
encontrado esas facilidades en la antigua colonia española.
Primera fragata
Para hacer viable la colaboración
naval en una Marina que solo cuenta con media docena de patrulleras, Putin le
ha vendido a Obiang una fragata de última generación a través de Bulgaria, en
una operación con empresas radicadas en Panamá y las Comoras.
La fragata “Wele Nzas” de 2.500 toneladas, diseñada en
Ucrania, construida en Bulgaria y armada en Guinea Ecuatorial por una empresa
israelí, monta dos lanzacohetes múltiples MS 227,dos montajes de 76,2 mm
AK-176 a proa y popa, y dos cañones de 30 mm AK-630M, equipos de guerra
electrónica y helipuerto. Una potente arma disuasoria ante la piratería y sus
francófonos vecinos Camerún y Gabón.