Exilio forzado en España 16 de Octubre de 2015.-La dictadura se ha apresurado a negar, en su página oficial, que no ha matado a 310 guineanos, según manifestaron los partidos opositores en París. Quizá quería decir que en realidad son muchos mas. Ante la acusación de asesinatos de opositores e intelectuales, Obiang siempre suele espetar "que presenten las pruebas", porque bien sabe él que se ha encargado de eliminarlas todas. No solo con los asesinados, sino también con los encarcelados: todos los que han estado encarcelados, que son miles, suelen manifestar que no existe ningún tipo de registro de encarcelamientos: todo ha quedado borrado. Lo que no ha quedado borrado es la memoria de los miles de familiares que han perdido a los suyos y todos los cientos de testigos que lo pueden corroborar.
Aunque hay por ahí cierto embajador de Obiang, que ha manifestado que no son 310 los asesinados, son según él, 307. Porque según explica 3 de los 4 guineanos que fueron secuestrados en Benin y asesinados en Guinea están vivos.
Obiang puede tener seguro, que cuando llegue la hora de rendir cuentas ante la justicia, ante su pueblo y ante la historia, todos podrán contar, "con pelos y señales", lo que realmente ocurrió.
El Presidente del Partido del Progreso, Severo Moto, ha dedicado muchos artículos a estos negros episodios de los que ha sido protagonista Obiang Nguema, no solamente durante su mandato, sino que ya como jefe de prisiones era la auténtica mano ejecutora de los asesinatos. Tenemos documentados todos los asesinatos, que son muchos, de miembros del Partido del Progreso, también de muchos intelectuales, políticos y algunos otros hombres valerosos, que han sido cobardemente asesinados, sencillamente porque a este inculto e impresentable dictador le ponían en evidencia.
Muchos de los escritos y testimonios del Presidente del Partido del Progreso, los pueden encontrar en este Blog. A continuación reproducimos la lista -lista de la vergüenza- de los 310 asesinatos que hemos presentado a las cancillerías y ante la opinión pública internacional. Seguro que faltan muchos, pero con el tiempo se irá ampliando la lista hasta completarla. De lo que estamos seguros, es que por mucho que Obaing asegure que no existen pruebas, esas muertes le perseguirán siempre.
