Por Samuel Mba Mombe, médico y activista político de la oposición (en Radio Macuto 28-12-2013).
Guinea Ecuatorial está atravesando una crisis de valores sin precedentes en su historia. Si a esta crisis añadimos la institucional, nos encontramos sumergidos en un caos también sin precedentes.
Este caos es el que se vive con la aparición de las redes sociales donde algunos guineanos sin formación e información son capaces de insultar, descalificar, ningunear a personas de solvencia moral y profesional probada. Personas con dilatada experiencia tanto en lo político, social, económico y cultural son vilipendiadas por unos principiantes e incluso me atrevería a decir analfabetos sólo porque en la red todos creemos ser iguales o se nos puede igualar con cualquier mequetrefe que ni siquiera es capaz de utilizar correctamente las teclas de un ordenador. “La ignorancia es atrevida” y aquí vivimos un día sí y otro también esta ignorancia tan atrevida que miedo me da a enfrentarla.
Cuando para mí las redes sociales y los foros de debate sirven para aprender de los demás, algunos han irrumpido en ellas sólo con el afán de lucirse de lo que no son o que todavía no son y se olvidan de que para medirse con alguien que te supera en todo: edad, experiencia de vida, conocimientos, uno tiene que trabajar duro para alcanzar el mismo nivel y no dando saltos en el vacío.
Cuando yo hacía el tercer curso de Bachillerato hacia los años 1972, en Malabo, Severo Moto ya era periodista así como otros profesionales que ya conocimos en aquella época. El sueño de cada uno de mis condiscípulos era querer ser como ellos. Cuando él y Alfonso Nsue Mokuy venían a casa de mi tutor el fallecido Don Eduardo Nsue quien fue profesor de francés en el INEM Rey Malabo, sus conversaciones me hicieron comprender muchas cosas. Siempre fueron críticos al régimen de Macías y decían cosas que en aquella época significaban pena de muerte. Cuando el ex presidente de Somalia, Siad Bare vino a Guinea en su calidad de Presidente en ejercicio de la OUA, fueSantiago Nsobeya quien tradujo su discurso en el aeropuerto de Malabo. Pues yo no tenía conocimiento de inglés y pensaba que la traducción era de puta madre. Es a través de Don Eduardo que supe que Nsobeya no traducía lo que decía el presidente somalí. Con esto quiero decir que a pesar de la dictadura de Macías la gente formada ya hacían críticas al régimen cuando hoy en día los que se dicen “intelectuales y formados” son los primeros aduladores de la actual dictadura.
Yo no digo que no se le puede criticar a Severo o a quien sea pero los insultos y descalificaciones que reparten algunos contra las personas no es más que fruto de la ignorancia y brutalidad del “nuevo hombre” que ha fabricado Obiang. Esos no respetan a nadie ni a nada. Se creen guapos insultando, difamando. En ellos prima el dicho que: “si hay fuerza, la inteligencia es obsoleta”. Esta es la sarta de inmoralidad que se vive actualmente en Guinea Ecuatorial y que escandaliza a propios y extraños. Los autores no se preocupan de la situación creada y se creen más machos de lo que en realidad son ni las consecuencias que ello genera en un futuro no muy lejano. Los que percibimos el peligro intentamos gritar, pero nuestros gritos se ahogan como si los hiciéramos en el desierto.
El anciano y sabio Hampâté Bà, declaraba recordando su África auténtica: “…lo que caracterizaba a un hombre eran su valor intrínseco, su nacimiento y su moralidad. Por desgracia, con la invasión del dinero, sólo la riqueza se ha vuelto para muchos signo de fuerza y nobleza…El deseo de poseer borra poco a poco el sentido tradicional del reparto…”. Estas palabras extrapoladas al caso de Guinea Ecuatorial, vemos que hoy en día la referencia de muchos jóvenes es el dinero o los que lo tienen sin preguntarse cómo lo han conseguido. El ladrón, el asesino en serie, los torturadores sin escrúpulos, etc. Son hoy la referencia de muchos jóvenes de nuestro país y uno de los éxitos de Obiang Nguema Mbasogo. Los que tienen estudios son ninguneados, marginados burlados en la Guinea Ecuatorial de Obiang. Los ladrones campan a sus anchas en los grandes despachos situados en los edificios faraónicos que se levantan anárquicamente doquier a lo largo y ancho de las ciudades fantasmas como SIPOPO y OYALA. Este es el desarrollo que conoce según ellos la República de Guinea Ecuatorial bajo las “sabias orientaciones” del Todopoderoso, Obiang Nguema Mbasogo.
Un país donde los jóvenes sólo piensan en el dinero fácil, de ocupar puestos de responsabilidad sin haber ido a la escuela, éste está abocado al fracaso. No se puede garantizar el futuro de un país sin gente formada, sin referencias, sin moral y sobre todo ninguneando a todo el mundo que a pesar de su formación y experiencia, puede contribuir al levantamiento del mismo.
Guinea Ecuatorial cuenta con un potencial intelectual que pudo y puede hacer que nuestro país camine hacia los senderos de desarrollo sostenible y no dando saltos acrobáticos hacia un horizonte incierto en el año 2020.
