martes, 11 de junio de 2013

LAS CONSECUENCIAS DE UNA GRAN EQUIVOCACIÓN POLÍTICA : ACOMPAÑAR A LA DICTADURA

Ministerio de Información, Prensa y Radio
Respuesta del Portavoz del Gobierno ante las críticas sobre las elecciones

Agustín Nze Nfumu, Ministro de Información, Prensa y Radio y Portavoz del Gobierno de Guinea Ecuatorial, responde a las instituciones y medios occidentales que, una vez más, han enviado críticas infundadas y con total desconocimiento, sobre la celebración de las elecciones del pasado día 26 de mayo. 


11/06/2013
REACCIÓN DEL GOBIERNO DE GUINEA ECUATORIAL, A TRAVÉS DEL MINISTRO PORTAVOZ DEL MISMO, A LAS CRÍTICAS Y TERGIVERSADAS INTERPRETACIONES VERTIDAS POR INSTITUCIONES Y MEDIOS DE COMUNICACIÓN OCCIDENTALES, SOBRE LOS RESULTADOS DE LAS ELECCIONES SENATORIALES, PARLAMENTARIAS Y MUNICIPALES DEL PASADO DÍA 26 DE MAYO DEL 2013.

En respuesta a las manifestaciones realizadas, mediante un Comunicado publicado en su página web, el 31 del pasado mes de mayo, por el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) respecto a las recientemente celebradas Elecciones Legislativas y Municipales, y a los resultados de las mismas; así como a otras reacciones similares hechas por Gobiernos, ONGs y medios de comunicación occidentales, a propósito de dichos comicios, desde el despacho del Ministro Portavoz del Gobierno de Guinea Ecuatorial, se hace públicas las siguientes consideraciones:
1. En opinión de esta Portavocía, es percibido como de una total falta de ética el que el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), formación política española, en violación flagrante del Derecho Internacional, en materia de la soberanía de los Estados y la no injerencia en los asuntos internos de los Estados, con juicios completamente desfasados y erróneos, haya pretendido “exigir” a un Gobierno extranjero, como lo es el de la República de Guinea Ecuatorial, la adopción de una conducta determinada sobre nuestra vida electoral. El estilo enjuiciador y de superioridad que se destila en este comunicado transmite un claro mensaje de derivación colonialista, con un marcado tono de la clásica prepotencia con que algunos círculos españoles abordan las relaciones con Guinea Ecuatorial y sus instituciones.
Dentro de esta misma dinámica de incriminaciones, el Gobierno de Guinea Ecuatorial rechaza la línea de opiniones que se inscriben en varios artículos de prensa y declaraciones de ONGs y Gobiernos, condenando, sin fundamento alguno, la forma en que se desarrollaron las pasadas elecciones, argumentando la existencia de irregularidades que, en manera alguna, pueden demostrar. Todo ello, gracias a una visión subjetiva, guiada por prejuicios acumulados y el interés de agraviar a ultranza al régimen en poder en nuestro País.
Ante la frase emitida por algunas instituciones gubernamentales, y repercutida por medios de comunicación, en el sentido de considerar las elecciones de Guinea Ecuatorial como “una oportunidad perdida para la democracia”, con todo el respeto que se merecen tanto esos países amigos como sus instituciones, el Gobierno de Guinea Ecuatorial considera dicha afirmación dictada por el desconocimiento del derecho del pueblo de Guinea Ecuatorial a decidir libremente su futuro y designar a sus dirigentes; asimismo, va en contra del principio de soberanía del que es detentor dicho pueblo.
Recuerda esta Portavocía que el error de los grandes países ha sido, y será siempre, el de intentar imponer una democracia calcada a los países pequeños, ignorando ostentosamente el derecho de éstos a definir la forma de sociedad que se ajusta a sus costumbres y culturas. Para el pueblo de Guinea Ecuatorial, que se ha pronunciado libre y soberanamente, las elecciones reflejan su voluntad y así lo han reconocido las instituciones emanadas de dicho pueblo. Saben los círculos políticos y de comunicación occidentales que todas sus sociedades no comparten el mismo sistema electoral, pues en algunos se aplica el sufragio indirecto y en otros no; sin embargo, se tienen a todos por buenos, y no ha habido críticas.
Se recuerda que la Democracia, al ser una realidad que afecta y es del consumo de los pueblos, no puede ni importarse, ni deben imponerse sus formas, como siempre se ha pretendido hacer desde ciertos círculos de la Comunidad Internacional. En Occidente sobran ejemplos de democracias vividas y aplicadas de diferentes maneras y según culturas y realidades sociales.
Guinea Ecuatorial considera las elecciones del pasado 26 de mayo un paso más hacia una real consolidación de la democracia ecuatoguineana, y no una ocasión perdida.
2. Volviendo al Comunicado del PSOE, cuyo contenido se basa claramente en erróneas informaciones remitidas por el partido opositor ecuatoguineano Convergencia para la Democracia Social (CPDS): los intereses que unen a ambas formaciones desde hace años dejan completamente claro la falta de neutralidad y objetividad del PSOE al hacer público el Comunicado en cuestión. No obstante, desde el Gobierno se recuerda que los integrantes de CPDS trabajaron conjuntamente con la Junta Electoral en todos los pasos preparatorios y de organización de las pasadas elecciones que son ahora objeto de crítica por el PSOE.  
Entre las supuestas “irregularidades” resaltadas por el PSOE figura “el hecho de votar en dos elecciones distintas, generales y municipales, con una sola papeleta”. Entiende esta Portavocía que, cegados por el interés de acusar y denigrar al Gobierno de Guinea Ecuatorial, los miembros del PSOE emitieron un juicio precipitado, sin pararse a reflexionar; dado que las cuestiones de organización y eficacia en el desarrollo de los comicios dejan la opción, en todo el mundo, a la adopción de mecanismos y diseños que tienden a facilitar su desarrollo (ejemplo: el sistema de elección por sufragio indirecto, sistema de “grandes electores”, etc.), en contraposición del clásico sufragio universal, aplicados ambos en las que se consideran grandes democracias del mundo.
La fórmula aplicada en las elecciones del 26 de mayo se debió a la necesidad de simplificar y facilitar las opciones para la distribución de las mismas. Esta fórmula no ofrece ni más ni mejores opciones a ninguna de las formaciones que se presentaron a los comicios y fue consensuada, como el resto de la organización, por todos los partidos políticos, incluyendo al CPDS (se adjunta copia de la papeleta para las elecciones en Malabo firmada, como autorización, por la representante del CPDS en la Junta Electoral Nacional).
3. Se recuerda también a la opinión que las elecciones recientemente celebradas en nuestro país han sido validadas por diferentes instituciones internacionales; entre ellas, la Unión Africana (UA) y el Grupo ACP (África, Caribe, Pacífico), además de los embajadores de todos los países acreditados en Guinea Ecuatorial, quienes han aceptado por completo la validez de las mismas y los resultados obtenidos; si bien, y de manera objetiva, hicieron sugerencias de mejoras para los próximos comicios.
4. La ceguera intervencionista del PSOE le ha llevado a tragarse el anzuelo de la incongruencia que le ha vendido su filial ecuatoguineana, el CPDS, pretendiendo que “poseen datos propios del escrutinio”; algo claramente imposible, por la lógica de que los escrutinios únicos se llevaban a cabo, de forma conjunta, en la mesa electoral, tras concluirse el voto, y en presencia de todos los interventores y comisión electoral; todo ello consignado en un Acta que era firmada por todos (incluidos los representantes del CPDS), que se cerraba y lacraba en presencia de todos y que se remitía, con escolta, a la sede de la Junta Electoral Nacional.  
Es opinión de esta Portavocía que el PSOE debería instar a sus pupilos del CPDS (o lo poco que queda de él) a la reflexión sobre su trayectoria política última en Guinea ecuatorial, cuyos derroteros no pueden sino constituir la principal causa de su fracaso político: escisiones, personalismos exacerbados, abandono de sus filas por afiliados, etc..., siendo estos casos peor lo que se vivió en estas elecciones. Y eso, en ninguna manera, es culpa ni del Gobierno ni del PDGE.
Huelga y suena vacío el llamamiento del Gobierno al diálogo con los partidos políticos de la oposición, cuando se tiene en cuenta que diez de los trece partidos se presentaron en coalición con el PDGE en las pasadas elecciones, y que solo dos lo hicieron por separado (CPDS y APG). Y que, entre esos dos, APG dialoga con el Gobierno siempre que hace falta. Además, siempre que el CPDS lo ha solicitado, se ha sentado, no solo con las autoridades del Gobierno y responsables del PDGE, sino con el Jefe de Estado y Presidente Fundador del PDGE.   
5. Por último, se invita, en primer lugar, al PSOE a realizar una cura de humildad, reconociendo, primero, su gestión desastrosa de la política económica de su País, durante su ejercicio del poder de Gobierno, y que es el origen de la actual crisis que tiene de rodillas al pueblo español; en segundo lugar, abstenga intentar dar lecciones, pues no es el más indicado para ello en lo que concierne a la política interior de Guinea Ecuatorial, dejando, para ello, de juzgar y descalificar de forma claramente interesada y partidaria, y sin siquiera poseer argumentos mínimamente válidos. Hasta el momento de presentarse por el Tribunal Constitucional la validación de los resultados de las elecciones del 26 de mayo, el pasado lunes, 3 de junio, en el Palacio de Conferencias de la Ciudad de Sipopo, en una ceremonia pública, ningún Partido político participante en las mismas había presentado queja o impugnación alguna. O para el CPDS son las oficinas del PSOE la Instancia a la que debe dirigirse en este caso.