sábado, 9 de marzo de 2013

UNA NUEVA VISIÓN EN LA POLÍTICA EXTERIOR DE GUINEA ECUATORIAL

                                                     
Por Manuel Bang Mba Okomo, Ministro de Exteriores y Portavoz del Gobierno en el Exilio de Guinea Ecuatorial.


Nuestra Política Exterior debe ser y será, ágil y agresiva. Con dos objetivos pricipales: centrarse en la preservación de la seguridad y la integración de nuestro territorio patrio, y el establecimiento y consolidación de la legitimidad de un régimen que goce de un reconocimiento amplio a nivel interncional. Esos serían los objetivos inmediatos, pero una vez que estos objetivos esten atendidos, debemos seguir ahondando en una politica exterior en base a los siguientes ejes: primero, jugar un papel muy activo dentro de los organismos, panafricanos e internacionales como la UA (Union Africana), La ONU (organizacion de las Naciones Unidas); a continuación, concluir acuerdos bilaterales en los campos Políticos y militares, con países de nuestra región y, que duda cabe, con España, EEUU, Francia, la UE ( union Europea), Rusia, China, Japón, Korea del Sur y el resto de paises del mundo con los que nuestro país tenga algún vínculo o interés de cualquier índole, bien sea en materia comercial, cultural, etc.


Seguidamente nos reuniremos con los organismos económicos internacionales como, la OMC (organización mundial del comercio), el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y cumplir y hacer respetar los "Standars" internacionales en materia Económica y Financiera (Comite de BAle), en materia de solvencia en normas contables, IAS, en las exigencias de lucha contra el blanqueo de dinero o de capitales de dudoso origen...), y qué duda cabe, hablar sobre los actores principales de la política exterior del Gobierno en el Exilio. En primer lugar está la figura del Presidente del Gobierno que personalmente debe ser el  actor principal en materia de política exterior, no solo por ser el artífice del mismo, si no que su aporte personal es y será siempre necesario. Porque la evolución de los acontecimientos en el país, tendran repercusaiones internacionales profundas, bien si se cosechan éxitos o reveses, todo eso afectará de manera especial a nuestra política exterior. El segundo actor y no menos importante, es el ministro de Exteriores, cuyo papel debe ser primordial, ya que actúa como correa de transmisión o trampolín, entre el Gobierno de la Nación y el resto de gobiernos de Africa, la Unión Europea, (España), el Vaticano, Francia, EEUU, y el resto de países amigos del mundo en general. El tercer actor principal es el ministerio de Finanzas , cuyo rol principal es actuar de lazo de unión entre el Gobierno de la Nación, y los organismos económicos internacionales. Y por último, hablar de cómo se debe financiar la política exterior de nuestro país. Dicha política debe dotarse de un presupuesto con partidas específicas destinadas al Ministerio de Exteriores y que desde las mismas se puedan financiar los gastos generales y los de representación, cuyo objetivo primordial no es otro que mejorar la imagen a nivel general del país de cara al exterior. En este caso los funcionarios diplomáticos que ejerzan labores de representación de cara al exterior, deben de contar con los medios económicos y materiales, capaces de mejorar la tan denostada imagen de nuestro país, haciendo frente a los gastos que conlleva el ejercicio de esa labor, de modo digno y honesto.

No cabe duda que el dinero es el nervio fundamental en la politica exterior de cualquier país y sobre todo en el caso del nuestro, que no es una potencia política y militar mundial, ni incluso regional, pero si cuenta con muchos más recursos económico que las demás. Estos recursos económicos, honesta y racionalmente administrados, serán el mejor instrumento para garantizar la seguridad y la estabilidad de nuestro país e irradiar nuestros principios democráticos, nuestra cultura, nuestro comercio y nuestra industrias al resto del mundo.