sábado, 12 de enero de 2013

EL CANDIDATO DE LA RECONCILIACION NACIONAL Y DE LA ESPERANZA

  
Por Estudiante guineano en España                                               
"Contra el odio, la miseria y la discriminación... vota la candidato de la reconciliación nacional y de la esperanza". Así rezaba la pancarta del Partido del Progreso, en la campaña electoral de 1996 en Guinea Ecuatorial. Han transcurrido más de diecisiete años de aquel fiasco de "ensayo democrático a la ecuatorguineana" con el que Obiang quiso engañar a su pueblo y a la comunidad internacional y, el Partido del Progreso, con su candidato Severo Moto, sigue siendo la única alternativa en condiciones de reconciliar a los guineanos y conseguir que TODOS se apliquen a construir en Guinea un estado democrático y de derecho. Obiang Nguema es el mismo dictador de siempre, mucho más envilecido con el paso del tiempo, más mentiroso, más ladrón y más asesino que antes. El Partido del Progreso y su Presidente, siguen siendo su verdadera oposición, a los que la dilatada lucha contra su dictadura, el padecimiento y la tortura del exilio, solo han hecho acrecentar sus virtudes y afianzar aún más sus principios y convicciones democráticas.

Después de tanto tiempo, todos los militantes del Partido del Progreso siguen aún proscritos en el interior de GE. Ninguno puede dar a conocer públicamente su militancia a este partido, ni poner en marcha cualquier tipo de empresa, o negocio por pequeño que este sea, tampoco pueden trabajar en la administración pública. Sobre el PP, todavía pesan una serie de tabús que hay que observar  "arrajatablamente" -que diría Obiang-; por ello, el nombre de Severo no se le debe poner a ningún guineano recién nacido y por supuesto, es un nombre que no se debe pronunciar. Ninguna empresa, extranjera o nacional, (aunque parezca ridículo) puede llevar las iniciales "PP", se le cerrarían todas las puertas. Los miembros de nuestro partido se ven obligados a ocultar su militancia (el mismo Severo les descargó su responsabilidad sugiriéndoles "que llevaran el Partido en el corazón") o a afiliarse a otros partidos para poder así escapar a la represión. Pero todas soben -también el propio Obiang- que el PP es ese gran submarino, que solo espera el momento oportuno  para emerger a la superficie y que además, a su Presidente es al único que esperan en Guinea Ecuatorial.
Nadie nos puede engañar con falsos eufemismos o pretender hacer ver a la opinión pública, que en el interior de Guinea es posible hacer oposición al régimen. Solo se puede coexistir políticamente con la dictadura si se modera el mensaje a base de adulterar su contenido, procurando no colisionar bruscamente con los  postulados e intereses del régimen. También sabemos que cualquier iniciativa económica o proyecto de empresa debe contar con el plácet  del establishment político existente. Nada es posible con la dictadura de Obaing, ni construir una sociedad democrática, ni rescatar de la marginación a esa mayoría silenciosa a los que la dictadura ha querido  relegar a la miseria económica y a la exclusión social. Por ello, la propia existencia del régimen sustentado por Obiang o por alguno de su familia o de su grupo, llevará siempre de forma consustancial a este, la falta absoluta de democracia, la pobreza y la marginación social. 
Tanto el Partido del Progreso, como su Presidente, Severo Moto, se han enfrentado directamente a Obiang y han llevado su oposición a la dictadura hasta sus últimas consecuencias, asumiendo el coste que para ellos esto suponía. Hay que reconocer que intentar derribar al régimen del mal y acabar con toda su perversa estructura  de extorsión, robos y engaños, en la que están implicadas un numero importante de personas, tanto del interior de GE, como de otros países, es una tarea bastante difícil y peligrosa. ¿Os imagináis una sentada cordial, con risas incluidas, de Severo Moto y Obiang Nguema?. No creo que al dictador le iba agradar escuchar lo que nuestro Presidente tenía que decirle. Pero el coste de esta osada resistencia ha sido muy alto. Precisamente a través de la publicación en El Confidencial del álbum de "canciones contra la dictadura", de nuestro cantautor, Santos de Dios, se están denunciando las injusticias de este régimen y relatando algunos de los nombres de compañeros nuestros del Partido del Progreso que han pagado con su vida la fidelidad a los principios de libertad, democracia, dignidad y justicia, a los que nunca quisieron renunciar. 
Ni los militantes del Partido del Progreso, ni el resto de guineanos pedimos un imposible. Solo deseamos volver en libertad a nuestro país y aspirar, como los demás ciudadanos del mundo, a poder elegir libremente a nuestros gobernantes e instaurar un gobierno democrático y justo, que mire por los intereses de todos. Esto es por lo que hemos luchado siempre. ¿Son quizá injustos o deshonestos nuestros deseos?.....¡ ¿por qué tanta tragedia.....¡ por qué tanto sufrimiento?