EL HOSPITAL DE “LA PAZ” ES UN A TRAGEDIA PARA LOS
ENFERMOS GUINEANOS.
-ANÁLISIS-
Estamos esperando contra
toda esperanza, y ya casi desesperados, un informe prometido por un
médico español que parece haber dedicado algunos de sus días y
servicios médicos al Hospital LA PAZ
de Guinea Ecuatorial.
El médico habló, con
los ojos desorbitados, sobre lo que sucede en ese “emblemático”
Hospital, llamado LA PAZ.
Nos pidió que nunca dijéramos su nombre y, al final –quizás por
pudor, elegancia y dignidad profesional ha preferido no poner en
papel lo que ha visto y vivido en el Hospital “LA
PAZ”.
Sin cerrar las puertas a
la recepción de tan revelador y critico informe, en el caso de que
nos llegue, sí estamos en condiciones de publicar lo escaso que
conocemos sobre ese Hospital “LA PAZ”
A modo de ambientación
cabe señalar y recordar que el famoso Hospital, es de propiedad de
una tal KOO, conocida
como Constancia Mangue Okomo de Obiang Nguema, madre de Teodorín
Nguema Obiang Mangue. Apodada “Primera Dama de Obiang Nguema”
(Obiang Nguema tiene, por lo visto más de seis mujeres oficiales)
Esta Primera Dama de Obiang Nguema, que nada tiene que envidiar a esa
larga retahíla de “Primeras damas” de dictadores africanos-
mírese a la primera dama: Simone Gbagbo,
de Costa de Marfil- Koo, en su afán de dominar Guinea Ecuatorial,
desbordando a su marido, Obiang Nguema, al que -por otra parte- le
gustaría tener siempre a su lado para servirle de sostén, se
revuelve por el país, a empellones de su madre OKOMO,
para acapararse de todo lo existente y por existir, en Guinea
Ecuatorial: Terrenos expropiados, viviendas ocupadas, parcelas
construidas o por construir, edificios, complejos y todo lo que tiene
algún interés económico. Hacerse con el país, en todas sus
dimensiones físicas, materiales, crematísticas y rentables, es el
gran programa subliminal de la familia de Obiang Nguema: Tíos,
hermanos, suegras, primeras, segundas, terceras, cuartas... damas,
hijos (43) sobrinos, nietos, amigos, amigotes, lobis y protectores
externos.
Pues entre las posesiones
de la señora KOO de
Obiang Nguema está el, cada vez más tristemente famoso, Hospital
“LA PAZ”
De tantas veces que se ha
comentado publicado y divulgado, nadie ignora que entre las fuentes y
medios que refuerzan el poder de Obiang Nguema Mbasogo, su familia y
todo ese almacén de amigos y protectores, está la BRUJERIA;
que, traducido el término al lenguaje libre y abierto y sincero, no
es ni más ni menos que MATAR.
Matar,
(por los métodos más diversos y múltiples, y sobre todo cuanto más
ocultos y difíciles de verificar o descubrir, mejor) constituye el
sinónimo de BRUJERÍA.
Obiang Nguema y toda su familia y acompañantes conocen, dominan y
practican el binomio MATAR-BRUJERIA
con absoluta maestría. Al acto “brujo” de matar a quien estorba…
o no está, ni quiere estar “dentro del
juego”, Obiang Nguema y su familia –con
la cobertura de los acompañantes- han añadido el macabro juego de
destripar y seccionar partes selectivas (especialmente,
sexuales) de las víctimas del binomio
brujería-matar, para
celebrar banquetes nocturnos, o para llenar, de penes y vulvas, los
elegantes bolsos de la artista camerunesa-guineana FIFI
LA MIRELLE, y enviarlos a vender… por ahí…
(¡¡¡Hay que hacer
dinero, aunque sea con el sexo de los muertos
y muertas de
brujería!!!)
MUERTE, BRUJERÍA, SEXO,
PODER
En este ambiente que
predomina y reina en la Guinea Ecuatorial de Obiang Nguema y familia,
reforzados por sus acompañantes de dentro y de fuera, se inscribe el
famoso Hospital llamado “LA PAZ”
, de la KOO.
Por una parte se habla con
profusión de cómo la KOO
utiliza despachos del Hospital LA PAZ
para satisfacer sus ímpetus sexuales, con jóvenes médicos
guineanos llegados de fuera; o con extranjeros atractivos. Esta es
la primera deriva, dimensión o escenario (si no, objetivo…)
del Hospital “LA PAZ” de
la KOO. (Aseguran que
si un médico guineano, joven, recién llegado de fuera, no acepta
las propuestas sexuales de la KOO;
o dimite, o puede acabar ocupando un lugar en el depósito de
cadáveres del Hospital LAPAZ)
A esa dimensión u
objetivo sexual, se añade, exactamente el plan de matar
en brujería, o sea, a escondidas, disimulada
y veladamente; pero matar.
Por otra parte, el
historial clínico de que disfrutan los Hospitales, en general, de
la Guinea Ecuatorial de Obiang Nguema Mbasogo –parece mentira- pero
se distingue precisamente por las muertes, muertes y muertes. Apenas
se escucha nada referido a los Hospitales de Guinea Ecuatorial que no
sea un común, tétrico y patético canto a la muerte.
Los Hospitales públicos
se distinguen por la crónica falta de medicamentos; porque, por lo
visto, los enfermeros, enfermeras y demás trabajadores de las
farmacias adjuntas a los Hospitales, tienen la costumbre de robar los
medicamentos, acumularlos en sus casas para venderlas (No se sabe si
más baratos, por razones humanitarias…) a los enfermos que
presentan recetas farmacéuticas del médico.
(No es este, sitio para
adentrarnos a en el análisis profundo de toda la terrible casuística
que rodea la actividad de los Hospitales públicos guineanos)
Lo cierto es que el famoso
Hospital de LA PAZ,
tiene por fama (al margen de ser un reservado burdel de la “Primera
Dama”, su dueña) ser un lugar a donde nunca van a parar enfermos
selectos. Enfermos familiares de Obiang Nguema y personalidades del
régimen. El signo más tétrico de un enfermo de esa calidad es que
lo lleven a LA PAZ, el
más grande y emblemático Hospital de Guinea Ecuatorial. Para los
Ministros, gerifaltes y familiares del régimen, están los
Hospitales de Madrid; Para el propio Obiang y algunos distinguidos
Ministros y familia, están los Hospitales de España, Francia,
Suiza, Canadá, los Estados Unidos de América… Para ellos están
también reservados los principales brujos, marabúes, santeros y
medicineros del país, de Benín, Nigeria, Camerún, Haití…
quienes les prometen larga vida y permanencia vitalicia en el poder,
a base de matar a los demás, en brujería…
Guineo ecuatoriano que no
pueda viajar a España a curarse de una grave enfermedad, está
condenado a morir, sí o sí.
La peor suerte que le
puede caer a una autoridad del Gobierno de Obiang Nguema es que no le
manden a España; o a Francia; o a Suiza; o a Los Estados Unidos.
LEANDRO MBOMIO: UN
PARADIGMA DE LA CRUELDAD DE OBIANG NUEMA MBASOGO
Nos cuenta el gran portal
de Internet ESPACIOSEUROPEOS,
dirigido por Don Eugenio Pordomingo Pérez, que Leandro
MBOMIO, el famoso escultor equatoguineano,
que acaba de morir en Guinea Ecuatorial, antes de fallecer en el
Hospital de “LA PAZ”,
se había negado a ser llevado a dicho matadero, lo mismo que también
dijo “No” al Hospital de Guadalupe. Nadie le hizo caso. Ni
siquiera Obiang Nguema Mbasogo,
a quien tanto había servido.
La muerte de Leandro
Mbomío en el Hospital “LA
PAZ” está envuelta en el más llamativo
símbolo del llamado “Aviso a Navegantes”.
Esos grandes potentados guineanos que navegan
juntos, pegados a Obiang Nguema, en el barco de la tragedia guineana.
Muy difícilmente podría
encontrarse entre el entorno que rodea a Obiang Nguema a alguien que,
sin ser de Mongomo,
sin ser siquiera de la tribu Esangui,
y perteneciendo (como se suponía) al mundo de la intelectualidad
guineana, tan odiada y perseguida por el dictador) haya sido tan
explotado, utilizado y manoseado por Obiang Nguema.
En este mismo y fatal
contrasentido se inscribe el afán (no se sabe si del propio Leandro
MBOMIO o del ambicioso y pretendido “brujo”,
Obiang Nguema) de ofrecer al tirano dictador de Guinea Ecuatorial,
el cráneo de MBO OBA,
un icono, emblema, y “sancta sanctorum” de la tribu NSOMO,
enterrado en los montes del Distrito de NSOK-NSOMO.
Un proyecto que rompía, a hachazos, toda la tradición fang de los
NSOMO.
El servicio que Leandro
Mbomio ofreció a Obiang Nguema, y sobre todo
la utilización, uso, abuso y manoseo que este dictador hizo, en
vida, de Leandro Mbomio,
bien hubiera merecido que le facilitaran el acceso a un tratamiento
fuera d Guinea Ecuatorial, como lo disfruta su AMO,
Obiang Nguema, y otros gerifaltes del régimen.
¿Y, TRAS LA MUERTE DE
LEANDRO MBOMIO, LA CEREMONIACON EL CADAVER…?
Adentrándonos al mundo
íntimo del aquelarre
en el que se mueve Obiang Nguema Mbasogo, no es difícil pensar (y
acertar) que el no haber hecho caso a la petición de Leandro
Mbomio de no ser llevado ni a LA PAZ ni al
GUADALUPE, puede deberse, sencillamente, a la necesidad que tenía
Obiang Nguema de que Leandro Mbomío
falleciera en Guinea Ecuatorial, para no tener que reclamarlo y
llevar a cabo los pesados y largos trámites… Y esta es la razón
menos importante.
Leandro Mbomio
(ese famoso de la tribu NSOMO)
es una pieza de enorme importancia para Obiang Nguema.
Recuerdan, los lectores,
las razones del asesinato de Don Pedro MOTÚ
MAMIAGA. Más que por razones políticas,
Pedro Motú fue asesinado porque Obiang Nguema creía que este
valiente militar que participó decisivamente en la detención de
Macías, tenía poderes espirituales (de brujo); que la consumición
de sus partes nobles podía trasladar su poder y fuerza al enclenque,
cobarde y taimado Obiang Nguema.
Quiérase o no se quiera creer, en ese mundo se mueve Obiang Nguema.
¿Llevan cuenta los
lectores del número de cadáveres importantes
que Obiang Nguema Mbasogo ha obligado trasladar, inmediatamente, a
Guinea Ecuatorial; no pocas veces contra la voluntad del muerto y sus
familiares? Obiang Nguema nunca se empeña en curar a nadie. Todo su
empeño se centra en enterrar, vacíos de sus partes nobles, a los
muertos y asesinados importantes de su régimen.
La muerte de Leandro
Mbomío, está rodeada, extrañamente, de un silencio que solo puede
obedecer a un viejo guion. Evitar ruidos de protesta, y pasar por la
terrible, sangrienta e inhumana ceremonia por la que pasó Don Pedro
MOTÚ y tantos otros valores significados de la sociedad guineana y
también del propio mundo y entorno de Obiang Nguema Mbasogo; que son
enterrados, vacíos de sus partes púdicas, para reforzar el poder.
No le basta a Obiang
Nguema Mbasogo con matar, asesinar y esquilmar los valores humanos y
sociales de Guinea Ecuatorial; necesita engullir sus vísceras, para
“reforzar” su poder. Y, NADIE
-de sus grandes y potentes amigos -DICE NADA.