lunes, 22 de octubre de 2012

OBIANG YA NO NECESITA MATAR, "PRACTICAMENTE".

                                       El arma más eficaz, con la que cuenta Obiang                                      

Por Coltán


Bañado en dinero, Obiang no le hace falta recurrir al asesinato para controlar a su pueblo. Le basta con sobornar a todo aquel que se le acerque para ayudarle a mantenerse en el poder.
En primer lugar tiene que alimentar a un ejército -en el interior- compuesto por allegados,  familiares, cargos políticos y toda la estructura del PDGE: dirigentes del partido, comisarios políticos y militantes, todos ellos al servicio del régimen. Esta elite de privilegiados, que copa los puestos más importantes de del país y controla más del 90% de los recursos, se han convertido en cooperadores necesarios de la dictadura. Ellos se encargan de controlar a la mayoría -a los que no caben, o simplemente rechazan al régimen- para que permanezcan callados ante las arbitrariedades del dictador y puedan ser  "acarreados" a las urnas sin demasiados problemas.

En la  compra de políticos de la "oposición interior", Obiang es un auténtico experto. El sabe que para que su régimen sea creíble internacionalmente, debe de presentar una lista de partidos que participen con este en las elecciones. No basta sólo con los llamados partidos satélites del PDGE, debe contar con algunos más representativos y que sepan mantener una cierta equidistancia, para que nunca se puedan confundir con el partido del régimen. Para esta tarea, todo el mundo sabe que cuenta con el CPDS y UP.

En el exterior, también obra maravillas la monumental fortuna de la que dispone Obiang. Sabemos que con mucho dinero se pueden comprar a los mejores abogados del mundo. Este aspecto  es de suma importancia para el régimen, ya que todo este ejército de letrados va conteniendo los diferentes frentes judiciales que  se le abren a la dictadura. Por otra parte, cuenta con el apoyo de diferentes grupos de poder y de expertos en conseguir decisiones favorables -Government Relations, o lobbys- en las administraciones de diferentes países. También son de inestimable valor para la dictadura, los diferentes políticos extranjeros -en nómina de Obaing- que van conformando favorablemente la política exterior de sus respectivos países, con respecto a Guinea Ecuatorial.

Ultimamente está echando mano de importantes instituciones internacionales (Sullivan, p.e), de personalidades relevantes, del mundo del espectáculo, del deporte y hasta de las ciencias. Esta es la finalidad para la que ha sido construido ese espacio de hoteles lujosos, de villas y de palacios de convenciones y congresos, llamado Sipopo.

La larga mano de Obiang, también llega, en forma de soborno, a algunos dirigentes y militantes de los diferentes partidos de la oposición exiliada. El régimen va mandando diferentes emisarios  con engaños y ofertas tentadoras bajo el brazo, para que algunos incautos o desesperados por el hambre, se presten a traicionar a sus compañeros de lucha.

Como vemos, esta dictadura cuenta con demasiados instrumentos, con los que puede dulcificar su régimen y crear una imagen engañosa de este entre la opinión pública internacional. Pero existe una circunstancia que juega en su contra: y es la sobreexposición ante la opinión pública, o lo que es lo mismo, ese "querer estar siempre en el candelero". Este excesivo exhibicionismo, permite que aparezcan sus vergüenzas con nitidez a plena luz pública. Con lo que, cada vez son más las personas que conocen  la verdadera naturaleza de este dictador.