domingo, 31 de julio de 2011

¡MUCHO CUIDADO CON "TEODORO IIº", (TEODORIN NGUEMA OBIANG MANGUE)!



El Presidente de Guinea Ecuatorial, General de...bueno, no se sabe ya qué; pongamos, de Brigada, a sus 68 años, y durante más de 43, manejando o incidiendo militarmente en el pasado, presente y futuro de Guinea Ecuatorial, tiene como proyecto estrella y colofón o "broche de oro" de su dictadura, poner a uno de sus hijos (no precisamente al más dotado intelectual y humanamente; si es que tiene alguno...) en el podio del poder dictatorial, que él mismo no quiere abandonar; pero que se ve forzado a hacerlo. 
"Habéis puesto a mi hijo; pero yo, como padre, soy el que le manda". Eso dijo un jefe de poblado, guineano, que se vio en la obligación de abandonar la jefatura y cederla a su hijo.
OBIANG NGUEMA Y EL RETORNO AL ATAVISMO
Obiang Nguema Mbasogo, es un auténtico hallazgo colonial, traído, por su padre, Nguema Eneme, de la República Gabonesa. Es un hombre al que hay que analizar siempre desde la retrospectiva ancestral bantú de la gran zona africana en la que se mueve. Puestos a analizar el orden de "valores" que subyacen en la raíz de sus decisiones, se encuentra el fuerte e irrenunciable atavismo a las creencias, prácticas, usos y costumbres de la tribu africana a la que pertenece; donde la brujería, elevada a la quintaesencia de ofrenda y sacrificio de seres humanos (cuanto más familiares y cercanos, mejor) así como la ingestión de pócimas (Obiang Nguema  ha llegado a añadir su propia orina)  y la consumición de "selectas..." partes humanas, constituyen, la raíz y esencia del poder y su continuidad.
Cuando los medios de comunicación de la República de Guinea Ecuatorial de Obiang Nguema salieron  un día en tromba a proclamarle "dios", no fue porque su sabiduría y preparación académica, ni militar ni universitaria lo avalara. No fue porque estuviera dotado, como el Rey Salomón, de Sabiduría, tino y acierto, en la conducción de nuestro pueblo; sino porque se arrogó todas las posibilidades de matar a todos y no ser matado por nadie. Eso no lo consigue nadie en un país africano como Guinea Ecuatorial, por las armas europeas, si previamente no consigue que los atávicos (¡Todavía, a estas horas, los hay muchos en mi país...) se crean que, realmente, más que las armas europeas el poder de Obiang Nguema viene de los ancestros y sus prácticas. 
En esa tesitura, mientras la población se revuelca y se pierde en la tragedia brujesca de Obiang Nguema, como una predestinación insuperable, Occidente se retoza y se regodea en esa miseria ("¡Dejadles con sus costumbres!") para hacer su eterno agosto.
Principal ganador: Obiang Nguema, su régimen y los beneficiarios extranjeros.
EL IMITA-MONOS
Este es, sobre todo, el legado (básicamente genético) que Obiang Nguema se propone y se dispone a entregar a su hijo Nguema Obiang. Al más puro estilo de los “imita-monos”, Obiang Nguema, lo hace todo imitando a los demás presidentes dictadores africanos. Quizás todavía, a un nivel mucho más humilde y rastrero. Todo lo imita. Y sobre todo lo imita poniéndole su especial sello de maldad. Hasta sus más cercanos y familiares aseguran que Obiang Nguema imita a la perfección el carácter furtivo y –dicen- ladrón, de su padre. Imitó la peor de las estrategias que pudo ver y quedarse en la academia militar: liquidar a los enemigos indefensos. Imitó a la República Gabonesa para poner nombre a su partido político (PDGE) Imita el modelo de gobierno de los peores que hay en el mundo: dictadura militar. Le dio por imitar al Rey de España en aquello de “árbitro y moderador” del  cobarde, descafeinado y truncado “proceso de democratización a la equatorguineana”. Y, finalmente está empeñado en imitar a algunos otros presidentes africanos, empujando a su hijo a que cargue con la herencia del poder dictatorial y destructor que ha construido contra Guinea Ecuatorial, en 43 años.
A TEODORIN NO LE QUIERE NI GUINEA NI EL MUNDO.
Este proyecto lleva ya casi décadas fraguándose, sobre una  base falsa y movediza, donde ni los hermanos, ni los hermanastros, ni los demás hijos ni la amalgama de prohombres del régimen, ni la comunidad internacional lo apoyan ni aceptan.
Pero Obiang Nguema tiene en vilo a todo el mundo con el aberrante proyecto. Nadie, desde luego, tendría el más mínimo derecho a rechazar a Teodorín Nguema Obiang Mangue, si, como todos  estamos exigiendo, su padre, Presidente de Guinea Ecuatorial, achacoso, visiblemente cansado, rechazado por el pueblo guineano y por la comunidad internacional, convocara, incluso, unas elecciones adelantadas, marcadas por la más mínima dignidad, limpieza, libertad y soltura que eso supone… Y Teodorín se presentará, con todas las de la ley y ganara limpiamente tales elecciones. La herencia genética que Obiang Nguema lega a su hijo Nguema Obiang es tan atávica que, del miso modo que el padre tiene miedo a unas elecciones libres y limpias, contagia también a su hijo para  que huya igualmente de eso de “elecciones libres y democráticas”. “¡¡¡Ideas importadas por los extranjeros!!!” –chirría el dictador
UN GOLPE DE ESTADO A LO OBIANG NGUEMA
Descartada la lejana posibilidad de unas elecciones libres y democráticas en Guinea Ecuatorial, es normal que todo el país esté, en estos momentos, viviendo una auténtica sensación de un preludio de nuevo golpe de estado, en Guinea Ecuatorial, protagonizado por Obiang Nguema, gran estratega militar…
1.- Saltándose todas la reglas de normalidad legal, celebró un subterfugio de Congreso de Jóvenes  del Partido Democrático Gabonés (digo) de Guinea Ecuatorial PDGE, situó en la estatutariamente inexistente “Vicepresidencia” del PDGE a Teodorín. Con el solemne enfado débil, pobre, inútil e ineficaz de significados delfines y prohombres del partido, sorprendidos.
2.- La “reforma constitucional recientemente” parida en Annobón, tiene como clave la aceptación de sus reformistas de que Obiang Nguema sitúe, en cualquier  momento en la Vicepresidencia del Gobierno a  su hijo Teodorín. Ello convertiría a este en Presidente de la Republica de Guinea Ecuatorial, tan pronto como su padre Obiang Nguema se quedara plano en una de sus frecuentes caídas
3.- Dicen que algún gobierno occidental europeo (Europa del Sur) vería muy bien este proyecto y no le haría ascuas, siempre que el “único y principal” dirigente del “único y principal” partido de oposición que hay en Guinea Ecuatorial, entrara a ser Primer Ministro del Gobierno de Teodorín.
El 3 de agosto, fecha elegida por Obiang Nguema para dar golpes de estado, podría ser el inicio de la puesta en acción del nuevo golpe de estado llamado “Proyecto Teodorín”. Evidentemente, si ese proyecto es bien recibido, aceptado y apoyado por el referido país sur-europeo, Obiang dará por justificado y seguro su plan. Poco le importará los gritos de protesta (siempre ahogados) del pueblo guineano. 
Muy poco tiempo hay que dedicar a analizar las consecuencias que ese proyecto va a traer a Guinea Ecuatorial. Basta ver los 43 años del padre “dictando” normas a golpes de asesinatos y eliminación de rivales. El hijo no será menos. Sí, podría superar a su padre en voracidad y actuación despiadada.
UN PACTO INTERNO: DOCE PRESIDENTES DE MONGOMO…
Sí, hay que recordar que desde que Macías Nguema Biyogo fuera puesto en la presidencia de una recién nacida República de Guinea Ecuatorial, en 1.968, las más duras y sangrientas batallas que se han producido en el país han nacido de la disputa por el poder entre los familiares (en cualquier caso) oriundos de Mongomo. Un extraño pacto secreto habla del propósito de contabilizar y acapararse  12 presidentes del mismo entorno familiar de Mongomo, antes de que ningún otro oriundo de otro distrito… (Nos llaman “extranjeros”) acceda a dicho poder. La fórmula mágica, es el golpe de estado, cocido desde dentro, como lo hizo Obiang Nguema el 3 de agosto de 1.979, asesinando –a traición- a su tío Macías… Se descartan las elecciones libres y democráticas. Lo ha dejado muy claro Obiang Nguema, en sus 32 años de presidente. No menos importante es constatar que Obiang Nguema, en su más cendrada costumbre traidora, pretende que los 12 presidentes de Mongomo se circunscriban solo a su cerrado entorno familiar. No le importa, para ello, inutilizar, anular y asesinar a los: Eloy Eló, Abeso Mondú, Kona, Mba Oñana, Job Obiang Mba, y un largo etcétera de posibles rivales de Mongomo. Tomar el poder a la fuerza y matar a los rivales y “enemigos” políticos, es la fórmula implantada por Obiang Nguema en Guinea Ecuatorial.
Mucho cuidado con Teodorín Nguema Obiang.