jueves, 24 de marzo de 2011

OBIANG NGUEMA Y SU RÉGIMEN, ¡¡¡ FUERA!!!



OBIANG NGUEMA Y SU RÉGIMEN, ¡¡¡ FUERA!!!

Severo-Matías MOTO NSA, Presidente del Partido del Progreso y Gobierno en el exilio de Guinea Ecuatorial.


La noticia nos llega así de simple,  y de terceras manos: “Obiang Nguema habría pedido a la Administración Obama, una negociación…”

(¿El gran artículo de nuestro colaborador, Juan Cuevas: “Las barbas de tu vecino…” empieza a hacer efecto?)


La primerísima pregunta, es con  quién quiere entablar negociaciones, ahora, el dictador de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang Nguema:

1.- ¿Con su familia y con el Gobierno español, para que le permitan y apoyen la entronización en el poder a su hijo Teodorín  Nguema Mangue; o a su mujer Constancia; o quizás a cualquier miembro del clan familiar y tribal, que  asegure que, si Obiang Nguema se muere o se escapa y o le echan, sobreviva la dictadura con todos  sus bienes robados al pueblo guineano, así como, evidentemente, los intereses españoles? (Dicen que Miguel Ángel Moratinos acaba de aparecer por Guinea Ecuatorial, a dar un nuevo abrazo a Obiang Nguema ¡¡¡Qué terror!!!

2.- ¿Con el Gobierno y la Administración de Obama, de España y de Francia, para que, a cambio de petróleo y de otros intereses, así como  de la  cada vez más ciega inyección, en sus bolsillos, de dinero robado al pueblo guineano, para que estas potencias occidentales  no hagan con el tirano guineano lo que está sucediendo con Gadafi? (Se sabe que el dictador Obiang Nguema llama diariamente a Gadafi, animándole a no ceder en la matanza a su pueblo, y le financia y envía mercenarios para ello)

3.- ¿Quizás, Obiang Nguema, factótum de las maldades y tragedias de nuestro pueblo, estaría ahora dispuesto a aceptar lo que tantas veces ha propuesto la Administración norteamericana de Obama: Liberar a todos los presos políticos y de conciencia que atestan las cárceles pudrideros de Black-Beach;  “Modelo”, de Bata; Evínayong  y otros Distritos del país. Permitir el retorno en libertad (para ser libres en su país) de tantos guineanos exiliados, huidos, escapados y perdidos fuera de Guinea Ecuatorial, por miedo a ser sacrificados por su disidencia y descontento con el régimen de Obiang Nguema. Permitir que la riqueza, la abundante riqueza de nuestro país, no solo sea “INTERESES” de extranjeros, protegidos por Obiang Nguema a cambio de sacrificar a los propios guineanos, sino que podamos disfrutar de ella de manera equitativa. (Es conocido el miedo que tiene Obiang Nguema a que España acepte y se una a las exigencias internacionales que pesan sobre el tirano Obiang Nguema.)

4.- Obiang Nguema está dispuesto a aceptar y admitir, en sus negociaciones, los Estados Unidos, la ONU, países de acendrado carácter de inequívoca vocación democrática, monitoricen y controlen unas elecciones presidenciales en Guinea Ecuatorial, ya; admitir su pérdida limpia y justa y pedir a España que se lo lleven a donde quieran, menos seguir protegiendo su dictadura en Guinea? (“No le tengo miedo a Severo Moto, si no a España, que está detrás de él” Eso repetía Obiang Nguema en otros tiempos, antes de lograr que se aceptara la prohibición del Partido del Progreso, en Guinea Ecuatorial, y se me encorsetara, como ahora, en España)

Y 5.- Si los dos últimos puntos expuestos anteriormente son excesivos y presuntuosos para un pueblo esquilmado y destruido como Guinea Ecuatorial, será cuestión de dejar al pueblo guineano para que, sin pedir permiso a nadie, salga ya a la calle y grite, hasta desgañitarse, por sus libertades, y  lograr que Obiang Nguema   y su gente vuelvan   a esconderse bajo sus camas ó a refugiarse en los establecimientos petrolíferos de los Americanos; de donde, seguro, esta vez se irán a otra parte.

Obiang Nguema pide a los Estados Unidos  negociaciones, con -dicen- la oposición guineana. ¿No hubiera sido más sincero y más valiente pedirlo directamente a la propia oposición? Pobre y barata trampa saducea.
Todos los dictadores africanos, cuidadores de los intereses occidentales, y no de los valores de sus pueblos,  son iguales. Y la mentira constituye su principal nexo de unión y similitud. El grito más legítimo y genuino que debe salir de los pechos, gargantas y labios del pueblo guineano entero (empezando por nuestros militares) es el de: OBIANG NGUEMA Y SU REGIMEN, ¡¡¡FUERA!!! Después, ya negociaremos el camino de nuestras libertades, derechos humanos, democracia, elecciones libres, desarrollo y bienestar.