miércoles, 2 de febrero de 2011

EL MUNDO MILITAR GUINEO ECUATORIANO, Y LA DEMOCRACIA.


Sesión fotográfica en Madrid, de Severo Moto, para una revista norteamericana
                                                                      

  Severo-Matías MOTO NSA, Presidente del Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial

Como inevitable seguidor atento de los movimientos que, a modo de  tsunami social y político, remueven los cimientos de regímenes dictatoriales, del África-Norte, con evidente proyección hacia el África llamada subsahariana, no puedo por menos de rebobinar mi trayectoria política como Presidente del Partido del Progreso, y recordar el pasado.

EL RETORNO EN LIBERTAD  DE LÍDERES EXILIADOS

El día 21 de Junio de 1988, cuatro años después de la fundación, en el exilio, del Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial, decidimos trasladar el Partido a su verdadero y genuino propietario y destinatario: Guinea Ecuatorial. Sin proponérnoslo ni saberlo, nos convertimos en auténticos pioneros, para África, de lo que se ha conocido, después, como “Retorno en Libertad” del exilio. 

En efecto, en el año1.9 89, sucedía el mismo acontecimiento en la República Gabonesa, con la llegada del exilio del, entonces, consagrado líder de la oposición política a Omar Bongó, exiliado en París. Si bien, es cierto que la solemne acogida y abrazo  con que Omar Bongó recibió a Pierre Mba Abesolo, distaba,  años luz, del desprecio, desatención y rabia con que me miraron, me trataron y rechazaron Obiang Nguema y su régimen dictatorial.

Retomado el exilio, y  profundamente  consciente de que mi destino como político y líder del Partid del Progreso de Guinea Ecuatorial, era mi país; a pesar de la conciencia, también plena, de que el régimen tiránico de Obiang Nguema se sentía intensamente molesto y preocupado por mi presencia y mi empecinado afán de estar en el país y legalizar el Partido del Progreso, decidimos reemprender el viaje de “Retorno en Libertad” a Guinea Ecuatorial, el 2 de Mayo de 1.992.

-          No es fácil que te mate; lo que quiere Obiang  Nguema es que te vayas del país. Eres molesto, por el apoyo que tienen en la población.

Esto me dijo un ilustre Embajador norteamericano; expulsado de Guinea Ecuatorial, por constituirse en imparable y activa “voz de los sin voz” en Guinea Ecuatorial. 

¿MILITARES DEMOCRÁTICOS EN GUINEA ECUATORIAL?

Antes de dar nuevamente el paso de volver, por segunda vez, a Guinea Ecuatorial, para solicitar, de nuevo, la legalización del Partido del Progreso, entre las medidas de cuidado, protección y precaución que mis asesores y estrategas políticos me aconsejaron, tuvo muy especial importancia, la petición que hice a mis conexiones interiores en Guinea Ecuatorial (Don Pablo Ndong Ensema; todo un Comisario de Policía del régimen;  convertido, después,  en alma profunda y protectora del Partido del Partido en Guinea Ecuatorial, y hoy exiliado en España, junto a mí)…

Le pedí a Pablo Ndong Ensema que sondeara entre el mundo militar, si estaban dispuestos a aceptar, e incluso apoyar mi propósito de reclamar un proceso de democratización pacífica de Guinea Ecuatorial. Pues el proyecto, aunque pacífico, podía ser aplastado, de forma sangrienta, si no estaban dispuestos los militares  a aceptar y apoyarlo.

-          Hay un alto militar que, en el Congreso del PDGE ha declarado no estar dispuestos, los militares guineanos, a seguir apuntando con sus armas a la ciudadanía…

Es la respuesta que recibí de Don Pablo Ndong Ensema. Un Comisario de Policía que respiraba, ya desde su delicado y duro puesto, aires de libertad y democracia. 

MI VIDA EN MANOS DE LOS MILITARES…

Lo cierto es que, a mi llegada a Malabo, fui testigo del gozo y admiración, reflejados en sus ojos, con que me recibieron aquellos militares formados en dos hileras -no sé porqué- desde la escalerilla del avión hasta el edificio de llegada. Fui obligado a pasar por en medio de las dos hileras (¡!) Uno de ellos se atrevió a  señalarme la puerta por donde había que entrar… Luego me comunicaron, al día siguiente, que  ese militar había sido cesado  y llevado a la cárcel de Black Beach.

 No puedo dejar de reconocer los múltiples gestos, acciones y mensajes de apoyo y la disposición  de tantos militares a sumarse al proyecto del Partido del Progreso; incluso tuvimos que frenar y reprimir sus deseos de protagonizar -si tuvieran medios- la acción de mi acceso a la dirección del país. Reconozco y rindo mi sincero  honor y respeto a los militares guineanos, que, por salvar a Guinea Ecuatorial cayeron en la triste trampa de elevar al cruel Obiang Nguema al poder, por un golpe de estado militar... El apoyo de los  militares al proyecto del Partido del Progreso, no solo obedecía a su estado de abandono y desprecio por parte de su Comandante en Jefe, Obiang Nguema (incluso alivié el hambre de los militares que  me  vigilaban, en Black Beach); su apoyo obedecía al ansia de libertad, derechos humanos y democracia en el que se mueve todo el pueblo guineano. Los militares guineanos saben que son más dignos y respetados en democracia que en dictadura.

ME ADVIRTIERON DE LOS ATENTADOS DE MUERTE

Sería absolutamente imposible reflejar aquí los numerosos gestos de simpatía que recibí del mundo militar; un mundo por el que, yo, por otra parte, sentía solo grima miedo y  pavor (La imagen del fatídico “Guardia colonial” de otros tiempos, tan reflejada y reproducida en la figura y actuación de Obiang Nguema contra el pueblo guineano, me aterraba).

Sin embargo, podría asegurar, sin ninguna duda, que mi vida en Guinea Ecuatorial, especialmente durante los cuatro años del llamado “Ensayo democrático a la equatorguineana…” de Obiang Nguema, mi vida se debió especialmente a los militares “democráticos”, como aquel Ministro de Defensa que se negó a obedecer la orden de mi  asesinato recibida de Obiang Nguema; o quizás las múltiples notas de advertencia que nos llegaban al buzón situado a la entrada de la sede del Partido, anunciándonos los planes perversos de Obiang Nguema. De esas filas militares nos llegó el aviso, dos días antes, de la invasión y saqueo policial de la sede central del Partido del Progreso, en Malabo.

EL PAPEL DE LOS MILITARES EN LAS REVOLUCIONES DE ÁFRICA, HOY

Hoy que África resucita al toque de la libertad con las trompetas que resuenan en el África-blanca del Norte, recibo con incontenible nostalgia y añoranza, el decisivo papel que los militares (Jefes de Estados Mayor) desempeñan en Tunez, en Egipto… sumándose a los gritos de libertad que lanzan sus pueblos oprimidos y colocando en sus tanques y fusiles flores en vez de bayonetas.

-          ¡¡¡Marchate!!! –dicen que le gritó el jefe del Estado Mayor del Ejercito tunecino, al dictador Ben Alí, cuando este le pidió que aplastara a la población levantada, en busca de libertad.

Irresistible la tentación que sufre uno; la misma que San Pablo, cuando exclamó: “Cupio disolvi et esse cum Christo…” (“Deseo deshacerme y estar con Cristo”)…  

                              Yo deseo, como antes, desatarme  de las cadenas y las cárceles del exilio y salir al encuentro de mi pueblo, como lo están haciendo ahora otros líderes africanos.

EL IMPRESCINDIBLE PAPEL DEL PUEBLO GUINEANO

No es legítima una ayuda exterior, ni del todo,  acertada y eficaz la ayuda y apoyo del exilio, si desde el propio país no se escuchan voces de reclamo, hechas comprimidos fáciles,  rápidos, claros y contundentes: Por ejemplo:¡¡¡ FUERA - OBIANG - NGUEMA!!!  y aquella tan plástica de : ¡¡¡ TE-O-DORO-/- AL -IN- O-DORO!!!

No parece muy usual, invocar, a renglón seguido, a la persona, o personas de dentro o fuera (en el exilio) en quienes el pueblo tiene depositadas las esperanzas de libertad, democracia y elecciones libres. Este grito no está tampoco prohibido; pues a veces el nombre de la persona resulta obvio y fácil de conocer por propios y extraños…

Nadie, y menos, desde lejos, tiene derecho a poner en peligro al humilde y abatido pueblo guineano (incluidos los militares, normalmente desarmados, o sin munición) proponiendo la imitación de acciones violentas, fáciles en un pueblo capaz de irrumpir y superar, por su número, a las fuerzas represoras de la dictadura. Pero nadie puede, por ello, pedir que Guinea Ecuatorial no reaccione, grite y reclame pacíficamente por sus libertades, derechos humanos y democracia. Nadie puede prohibir a los guineanos llenar las paredes de pintadas revolucionarias contra la cruel dictadura de Obiang Nguema.  (La democracia ya se encargará de limpiar las paredes después de la tiranía...) Una de las frases emblemáticas que engalanaban las paredes de las Aulas Democráticas del Partido del Progreso en Guinea Ecuatorial era: “LA LIBERTAD NO SE REGALA, SE CONQUISTA”.

Cuánto tiempo resistiría el dictador Obiang Nguema a una puesta en marcha de una DESOBEDIEN CIA CIVIL. No sé cómo reaccionaría la dictadura de Obiang Nguema, si, de pronto un día los trabajadores del petróleo, del gas, de las tiendas (factorías o abacerías) de las oficinas (¡que no hacen nada!)  del mercado etc.etc., decidieran lanzar, solo un día, el grito de libertad quedándose en casa, para reclamar un sueldo digno, acorde a la abundante riqueza y  dinero del petróleo, gas, madera, pesca, oro, tráfico de droga, tráfico de armas,  que Obiang Nguema roba y esconde fuera del país. Solo eso, reclamar un sueldo digno y acorde a esos 35 mil dólares anuales que le corresponde a cada guineano por el petróleo que se explota en el país.
No sé cuánto tiempo duraría mi exilio, si mi pueblo se pusiera, un día, de pié, pacíficamente, sin armas (porque no las tiene) para reclamar su libertad y sus derechos humanos y la democracia.

El enfado de los pueblos de Túnez, de Egipto, de ese tsunami que revienta los cimientos dictatoriales del Magreb y del mundo fundamentalista, solo tiene razón en un grito sencillo: ¡¡¡HAMBRE - DE CO-MIDA -/- SED - DE - LIBERTAD!!!

Luego: ¡¡¡FUERA - DICTADURA –/-  QUEREMOS - DEMO-CRACIA!!!

Quizás (o seguro)la reacción de la aberrante y ciega dictadura de Obiang Nguema, responderá a este grito sencillo con tanques, carros de combate, armas sofisticadas y petición de apoyo a los de fuera. A esta reacción dictatorial, solo cabe una respuesta, tan conocida, por otra parte: “!!!EL PUEBLO – UNIDO - JAMAS SERÁ VENCIDO¡¡¡
En breve nos veremos en Facebook y en Twiter… Y, con un poco de suerte, en Guinea Ecuatorial…