Nos remiten, para su publicación, esta entrevista al nuevo embajador español en Guinea Ecuatorial. Una cosa es ser “diplomático” y otra muy distinta, no decir absolutamente nada de interés. El embajador, a buen seguro que hará carrera con el gobierno español.
Respuestas generalistas y sin un atisbo de esperanza para la democratización de Guinea Ecuatorial, por lo menos por lo que se refiere a España.
Al Gobierno socialista le va bien con la tiranía y no será por ellos el que se produzca el más mínimo cambio. Obiang puede estar tranquilo con sus cómplices españoles que, en esta entrevista se ve claramente, está más que satisfecho con el sátrapa y su banda armada.
Los tribunales españoles están, exclusivamente, para meter en cintura a los disidentes con el régimen de terror. Que no molesten al tirano. Una lástima.
Por Alfonso Biahute Chebá
"El nuevo embajador de España en Guinea Ecuatorial entrevistado por LA GACETA DE GUINEA ECUATORIAL ha aclarado los puntos en los que se articulará la diplomacia de su país hacia su única ex colonia del África subsahariana. Gómez –Acebo descarta que el hecho de que ciertos grupos en territorio español se opongan al régimen de Malabo, pueda entorpecer las relaciones Malabo-Madrid, puesto que no están amparados por su gobierno y “en ningún caso hay que darles la importancia que no tienen”, ya que en el interior del país hay partidos legalizados que concurren a las elecciones periódicas.
Saluda la presencia de inversiones españolas como Repsol YPF, Unión Fenosa Gas y alguna empresa canaria de construcciones que acaba de recibir la confianza de iniciar sus obras en Malabo, compitiendo con otros países como China, “que tiene hoy día una pujanza y una agresividad comercial legítima”. En su opinión ello no tiene que ver con condicionamientos en el aspecto de la situación de los derechos humanos, la democracia y la buena gobernabilidad en Guinea Ecuatorial.
Pregunta (P).- ¿Con su reciente presentación de las cartas credenciales, cree que hay paso en las relaciones Malabo-Madrid?
Respuesta (R).- Yo no creo que haya cambios o giros por el simple hecho de que mi persona haya presentado las cartas credenciales ante el presidente de la República. Lo que sí es verdad es un signo de continuidad, por una política que se base en el establecimiento de relaciones de respeto mutuo y de construcción de una confianza cada vez mayor. Del asentamiento de una relación que queremos los dos países, que sea cada vez más intensa, cercana y más variada. Que no sean solo los gobiernos; sino las empresas, el mundo cultural, los artistas y ambas sociedades en general
P.- ¿Actualmente a qué nivel situarías estas relaciones?
R.- Si se refiere al nivel en que se relacionan los dos gobiernos, yo creo que es muy alto. Ha habido una continuidad en los últimos cuatro años de interlocución a alto nivel. Visitas, del jefe de Estado Obiang en el año 2006 [a España], del ministro de Asuntos Exteriores a Guinea. Esto es lo que atestigua la voluntad de la continuidad de una relación más profunda, sobre todo en este acompañamiento.
P.- Hace 4 años el presidente Obiang efectuó una visita a Madrid en la que se es entrevistó con el presidente del gobierno. Se espera que esta visita sea correspondida por parte española. ¿Ahora es posible hablar de una fecha para la llegada de Jose Luis Rodríguez Zapatero a Guinea Ecuatorial?
R.- Ojalá, yo como embajador, me encantaría tener la suerte de poder recibirle durante mi estancia aquí.
P.- A nivel diplomático, ¿qué preparativos existen para ello?
R.- No le puedo decir que hay una fecha. Yo creo que es una posibilidad. Como representación diplomática española, confiamos en que ello se produzca.
P.- Conceptos como la situación de los derechos humanos, la democracia y la buena gobernabilidad han sido la baza de exigencias de España hacia su ex colonia del África subsahariana, como condiciones al establecimiento de serias relaciones diplomáticas. ¿Cree usted que ello ha influido en la deficiente presencia de sus empresas en Guinea Ecuatorial, en comparación con las de otras potencias?
R.- Son dos temas distintos. Guinea Ecuatorial está haciendo grandes esfuerzos por esa modernización en lo económico, social y político. Tiene una presencia en distintos organismos subregionales e internacionales que se dedican sobre los derechos fundamentales, como el reciente ejercicio de repaso de su situación de los derechos humanos. Hay un compromiso público del país en este tema y España en el semestre de la presidencia de la Unión Europea y otros países, le quieren acompañar en este compromiso.
Esa cuestión yo no la ligaría o condicionaría con el tema de las empresas o en aspectos económicos. El desarrollo económico de Guinea Ecuatorial es evidente a cualquiera que visita por primera vez este país y aún más, para el que lo visitó antes para establecer este punto de comparación. Aquí hay empresas españolas, pequeñas y medianas. Están aquí desde hace mucho tiempo. Ahora hay un proceso de mayor atención y mayor frecuentación e interés de acercarse a Guinea Ecuatorial y conocerla por parte de otras muchas empresas.
P.- ¿Ello ha tenido que ver con la situación económico-empresarial de España en los últimos años?
R.- La sociedad española en su tejido empresarial está compuesta en su más de ochenta a noventa por ciento, por pequeñas o medianas empresas. Sus multinacionales están en sectores muy punteros, pero es un fenómeno relativamente reciente, así como lo ve la propia internacionalización de la economía española.
En todo caso, tiene una concesión en el sector principal de Guinea Ecuatorial, como es el caso de Unión Fenosa Gas y Resol. Hay más empresas interesadas y muy punteras; en otros sectores y áreas, sobre todo, después de la visita del ministro Moratinos. Hace poco, recibíamos la noticia de que una importante empresa canaria de construcciones acaba de recibir la confianza de iniciar sus obras en el entorno urbano de Malabo, compitiendo con otros países como China, que tiene hoy día una pujanza y una agresividad comercial legítima.
P.- ¿Qué nos dice acerca de la prensa de su país, denunciada constantemente por Malabo de entorpecer las relaciones con Madrid?
R.- En cualquier caso debemos reconocer que el mundo de la prensa es completamente libre en España y no oficial, no pertenece al gobierno. Ni siquiera la radio televisión española, que tiene un estatuto especialmente independiente. En el ámbito de los tribunales estamos en el mismo mundo. No obedecen a ninguna de las directrices del gobierno.
P.- ¿Qué dice España acerca de los grupos de oposición al régimen de Malabo cobijados en su territorio; incluso, con la formación de un gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio?
R.- Este gobierno en el exilio entre comillas, que se autoproclama como tal, lo primero es que no está amparado por el gobierno español, ni muchísimo menos. Se trata de personas que están allí residiendo y llevando a cabo una actividad que en tanto o cuanto sea ilegal se actúa. En el último caso ha habido cuando ha habido una actuación que iba contra la ley española los tribunales han procedido contra las personas que estaban actuando de esta manera.
Otra cosa es que ejercer una actividad de opinión determinada, ahí ya no se puede entrar a prohibir sus actividades. En el momento en que sea pertinente, el propio gobierno español actúa; en algún caso ya tuvo la iniciativa de variar la condición en la que estaban determinadas personas, porque no se estaban comportando de acuerdo al estatuto que tenían reconocido.
A estas personas, mientras no infrinjan las leyes españolas no se les puede tampoco expulsar. Además, creo que no hay que darles la importancia política de la no puedan tener. Eso depende de los propios guineanos. Aquí hay partidos de oposición legalizados que concurren a las elecciones, hacen campaña, etc.
P.- ¿Y cuál es la opinión de España acerca del último proceso electoral y el nuevo gobierno ecuatoguineano?
R.- Respetamos los procesos políticos de los demás países, y por lo tanto, no hay ninguna expresión de valoración de si está bien, mal o regular. Tanto el rey Juan Carlos como el presidente Zapatero, ya felicitaron al presidente Obiang Nguema Mbasogo por su investidura a raíz de su victoria. Tenemos un gobierno de interlocutor con el que vamos a trabajar en los próximos 7 años. Es un gobierno que como lo dijo el propio presidente Obiang, asegura una continuidad activa, lo cual es una continuidad de sus mismos ministros y unas metas concretas.
P.- El nuevo Plan Marco de Cooperación suscrito tras la última Comisión Mixta, ¿qué nuevos aspectos cree que presenta para las relaciones Madrid-Malabo?
R.- La Comisión Mixta de Cooperación es el un marco general en el cual los dos países se ponen de acuerdo para identificar las prioridades en los distintos sectores en los que van a cooperar institucionalmente. Es autónomo de las empresas. Para Guinea Ecuatorial las prioridades son la educación, la salud y la modernización institucional, de la gobernabilidad; todos son tradicionales, a parte de la promoción de jueces.
En la educación España está en los últimos años colaborando con Guinea Ecuatorial para modernizar y adecuar los curricula y los sistemas de enseñanza en primaria; secundaria, bachillerato y últimamente, la formación profesional.
España tiene un programa de 100 becas de grado para estudiantes ecuatoguineanos que en ninguna ocasión lo ha tenido con algún país del mundo, incluida Latinoamérica. Se estudia para el curso siguiente en relación a los chicos y chicas guineanos que han superado el curso de acceso a la universidad española o la correspondiente selectividad. Es una cosa excepcional".
Fuente:La Gaceta de Guinea Ecuatorial.