jueves, 25 de febrero de 2010

Viva Zapata. Asesinato en la Habana


Viva Zapata

Asesinato en la Habana. ¿Tanto vale un dictador? ¿Tan poco un disidente?

Nuestro recuerdo y oraciones para uno más de los mártires que caen ante la esquinada mirada de los dictadores y el silencio, cómplice, de sus blandos comparsas internacionales que, como España, empujan el cadáver con el pie con el ánimo de ocultarlo de nuestra vista.

Viva Zapata y la disidencia cubana, que no entiende por qué el alma de este negro cubano vale menos que la de los muertos en Sudáfrica cuando los gobiernos de los racistas blancos. Los disidentes cubanos valen menos que los presos de las dictaduras argentinas o que los exiliados con Pinochet. ¿Dónde estáis los que gritabais histéricos?... cómo cambia el cuento.

Zapata, Orlando Zapata, ha muerto abandonado y solo en un calabozo. Su resistencia de 85 días y su fortaleza moral ante la dictadura, nos alimenta. Su grito de silencio, que no han escuchado muchos (el Presidente socialista español, entre otros) es una denuncia ante los caprichosos y criminales detentadores del poder en todas las tiranías. Su muerte es el trágico sacrificio humano que exigen los altares de los tiranos.

El Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial, su militancia y simpatizantes, ha rendido un emocionado homenaje a todos los que se juegan la vida por el futuro de las generaciones venideras. Gracias, Orlando Zapata; eras un humilde albañil, un joven negro cubano que no ha dudado en ofrecer su vida, en terrible tránsito, para gritar en silencio: “El pueblo quiere LIBERTAD”.

El Presidente del Gobierno de Guinea Ecuatorial en el exilio, Severo Moto y el Vicepresidente, Armengol Engonga, han participado de un acto de recogimiento y oración por el alma de esta nueva víctima de criminales gobernantes como los que dirigen la dictadura cubana.

Descansa en paz, Orlando Zapata.