viernes, 20 de noviembre de 2009

El cese de Teodorín




¡¡¡ OBIANG NGUEMA: CESA –POR CRRUPTO- A TU HIJO TEODORIN, COMO LO HICISTE CON RICARDO MANGUE!!!


Todos los medios informativos del mundo, incluidos los medios españoles, se han hecho eco puntual y han rebotado, con comentarios y aportado más detalles, el famoso artículo de “The New York Times” del pasado 17 de Noviembre, poniendo a la luz la vida de infecta corrupción en la que se revuelca tu hijo, Teodoro Nguema Obiang, en la más trepidante y ciega imitación de su padre. Dice un refrán fang: “El hijo que imita, siempre supera…”

A bombo y platillo anunciaste que Ricardo Mangue Obam Mfubea, tu predilecto Primer Ministro, presidía el gobierno más corrupto; y de manera fulminante lo echaste de tu lado y lo condenaste al ostracismo en su pueblo.

Algún día nos enteraremos de los detalles que hicieron de Ricardo Mangue, el Primer Ministro más corrupto de todos los que has nombrado. Y compararemos tales detalles con los que están saliendo a la luz en relación a tu hijo Teodoro Nguema Obiang. Muy difícilmente Ricardo habría superado a Teodoro Jr., en la carrera hacia la cumbre más alta de la corrupción.

“Teodorín”(diminutivo que no significa que se trate de un niño, un joven o simplemente un menor de edad”) es, de entre otros “eternos ministros de familia de la tiranía, el encargado de bosque y agricultura. Los ministerios eternos, son un regalo vitalicio que ofreces a tus íntimos, para que se olviden de ti y se ceben con el cargo. The New York Times, no habla simplemente de casos de corrupción descubiertos, como lo pudo hacer la Comisión de Investigación del Senado Americano sobre la pocilga de corrupción que animaste en el seno de la Banca Riggs. The New York Times, prestigioso de entre los prestigiosos del mundo, publica documentos del Departamento de Justicia norteamericano. Ya no se trata de un simple informe, se podría estar tratando de todo un dossier, de un alegato, de una denuncia en manos de la Justicia americana y hecha pública, para mayor conocimiento, a través de los medios de comunicación.

No vamos a entrar en detalles. Esperamos que o lees o te leen la prensa y te advierten de los durísimos cargos que desde Suráfrica, pasando por España, saltando por Francia, aterrizando en Inglaterra y golpeando las puertas de la Mansión de Malibú, en California -USA- están acorralando a tu hijo Teodoro Nguema Obiang.

Ni Ricardo Mangue Obam Mfubea podría superar a “Teodorín” –tan mayor de edad que está a punto de superar a su padre en delincuencia-; ni “Teodorín” logrará superar los 6 billones de dólares que su padre tiene acumulados ya, mientras las empresas petroleras americanas, las empresas pesqueras de nuestros mares, los empresas madereras que esquilman nuestros bosques, siguen vertiendo en otra cuentas particulares y de tu familia, el dinero robado al pueblo guineano.

(Por cierto, Obiang Nguema, es verdad que la población guineana sigue asistiendo atónica a las caravanas fúnebres que cruzan las ciudades y pueblos de Río Muni, trasladando ataúdes repletos de dinero, para sepultarlo en tu pueblo de KO-ETÉ? ¿Qué delito es ese? En su día se lo preguntaremos al Fiscal General, Don Carlos MANGUE ELUNKU…)

Antes, mucho antes de que se consuma el abyecto proceso de elecciones presidenciales, bajo el que te quieres esconder para no ser detenido, juzgado y condenado; antes de que te echen, como sabemos prefieres y esperas, debes destituir de su cargo de Ministro de Agricultura y Bosques a tu hijo Teodoro Nguema Obiang. Por una razón simple, y si quieres, humana: Para que no siga engrosando el dossier delictivo que, como una boa americana constrictora, está rodeando su cuerpo cuadragenario.

Tú, en cualquier caso, te refugiarás, de nuevo, por otros siete años escondido tras el blindaje de “Presidente” de esos que los gaboneses llaman “EQUATÓ-LA”; pero tus hijos, ya que no lo remedias, han comenzado a conocer (bajo tu sombra y contagio) el camino irreversible hacia los tribunales.

Este es el gran reto, Teodoro Obiang Nguema Mbasogo: si tienes lo que hay que tener y eres tan celoso contra la corrupción, esperamos que ceses -por corrupción- de su cargo a tu hijo Teodoro Nguema Obiang Mangue como -por lo mismo- hiciste con Ricardo Mangue Obam Mfubea; antes de que vuelvas a esconderte bajo las alfombras infectas de tu “Presidencia”

Esperamos, atentos, la respuesta a este reto. Bien es cierto que la JUSTICIA -ciega- ya no tiene freno…