domingo, 1 de febrero de 2009

DON ARMENGOL –RAUL- ONDO-CASTRO- NGUEMA- RUZ.


Visión en prospectiva del “Post Obiang”

Una de las preguntas que más se hacen los analistas, extranjeros, de la situación de Guinea Ecuatorial proyectada en el “post Obiang”, es: “Qué pasaría si, de pronto, Obiang Nguema cayera fulminado de muerte por su larga enfermedad”?

La respuesta, para cualquier guineo ecuatoriano, es más que clara; (aunque no por ello menos preocupante y dolorosa). Automáticamente, su hermano Armengol Ondo Nguema, “asumiría” (verbo muy usado entre los gerifaltes de la tiranía) el poder, y heredaría de inmediato, el mando.

Armengol Ondo Nguema, hermano de Obiang Nguema, es un hombre rudo, del mismo carácter taimado y silencioso (le llaman “el mudo”) que su hermano Obiang Nguema. Toda su formación se ha forjado en la universidad natural de la selva; metido en la despiadada y desesperante persecución de antílopes, puercoespines, marmotas y ratas silvestres, para alimentarse y sobrevivir en un Distrito (Mongomo) señalado por la hambruna

Embadurnado con la suciedad y el olor de los harapos de caza (indumentaria imprescindible para un cazador silvestre de lanza y machete), Armengol Ondo Nguema se hallaba todavía depositando una última marmota traída de la selva, cuando le comunicaron que su hermano Obiang Nguema había asesinado al presidente Macías, de un golpe de estado y que él era reclamado por su hermano (nuevo Presidente) para ser Director General de Seguridad de la República de Guinea Ecuatorial. Alguien asegura que Armengol hizo un primer amago natural y sincero de negarse a aceptar la oferta. (Algún concepto de respeto y casi miedo tendría a eso de gobernar un país…) Pero la llamada de su hermano, al final acabó convirtiéndose en un mandato que Armengol Ondo Nguema tenía que obedecer “¡arrrrajatablemente!”- como lo suele decir su “ilustrado” hermano Obiang Nguema Mbasogo-

“Amiguito: Si Obiang Nguema mete a alguien en la cárcel, lo libero yo; pero si yo meto a alguien en la cárcel, ¿quién lo va a liberar?” Esta es una frase clásica de Armengol Ondo Nguema; reveladora del tremendo peso que tiene dentro del régimen, hasta el grado de ser capaz de tomar decisiones por encima del Presidente.

Para eludir debates y diálogos; en sus momentos de enfado, o cuando quiere corregir o amenazar a alguna víctima, Armengol Ondo Nguema siempre le pregunta con el puño amenazante: “Amiguito: ¿Has visto a un inculto enfadado?” Es simple y llanamente su reafirmación en que, para él, el poder se ejerce sobre los guineanos, lo mismo que se ejerce -lanza y machete en mano- sobre los “ground beef” (ratas silvestres) o “chucu-chucus” (puercoespines) o quizás el “Anty Lope” (Antílope)…

Son de público conocimiento las luchas abiertas que se han producido ya en el seno familiar y que han llegado hasta convertirse en amagos de golpe de estado urdidos por Armengol Ondo Nguema; quien, rodeado de su grupo interno de militares de apoyo, ha exigido a su hermano que, si ya no puede con la oposición, que le deje el poder, para “¡acabar con todo eso!”



GUINEA ECUATORIAL Y CUBA

Enfundados en el miedo a ser detenidos por la Policía española, como nos sucediera en la concentración que los guineo ecuatorianos llevamos a cabo frente a la “guarida” (dicen que Embajada) de Guinea Ecuatorial, donde fuimos fichados, y enlistados, y detenidos, y encarcelados, y castigados, y, finalmente, denunciados ante el tirano Obiang Nguema, los guineo ecuatorianos -al menos algunos- hemos preferido seguir, a través de la cadena de Radio COPE el desarrollo de la multitudinaria concentración llevada a cabo por cubanos y españoles en la Puerta del Sol (1 de Febrero de 2009)

A algunos guineanos todavía nos queda alguna duda sobre las semejanzas y la identidad existente entre el régimen cubano de Fidel, y el ecuatoguineano de Teodoro. Después de escuchar las intervenciones de la concentración, hemos abandonado nuestras dudas.

Se marcharon los españoles de Guinea Ecuatorial (siempre queda un reducto… por si… “el agosto”…); el país fue abandonad a las manos de los comunistas soviéticos (los rusos) Los cubanos de Fidel con su peculiar habla española, se convirtieron en la mejor correa de transmisión del “comunismo- pobreza” que chinos, aleman- democráticos, norcoreanos, libios y el mundo comunista en general, venían a implantar en la recién nacida, insegura, abandonada y desprotegida República de Guinea Ecuatorial.

La sociedad guineana, reventada en dos irreconciliables trozos, exactamente igual que Cuba (dictadura poderosa e hiriente -y- pueblo abatido y obediente) quedó herida de muerte, igual que en Cuba. Resultaría casi insultante y fuera de lugar que los guineos ecuatorianos (los abatidos y obedientes) hablemos de solidaridad con Cuba, como si se tratase de un gesto de comprensión o compasión desde alguna otra orilla diferente. Lo que cabe es, simplemente, unir nuestros gritos de protesta, denuncia y rechazo a la tragedia que la tiranía ha impuesto en los dos países (50 años en Cuba, 40 años en Guinea Ecuatorial)

Un paso nada despreciable es que cuando se manifiestan los cubanos; ¡aunque todavía aparecen caras cubanas tapadas por miedo a las represalias contra sus familiares en Cuba, (los guineo ecuatorianos habremos de aprender la fórmula…) los cubanos se ven rodeados y arropados por españoles. ¡Santa y agradable envidia!

Armengol-Raúl-Ondo-Castro-Nguema-Ruz, el extravagante titulo que preside este análisis en prospectiva del “post Obiang” no tiene ni más ni menos explicación que demostrar la identidad de situaciones que se dan entre lo que sufre Guinea Ecuatorial y lo que sufre su predecesor, Cuba.

Armengol Ondo Nguema (lanza y machete en mano, rudo y silvestre) se prepara, mudo y taimado, a tomar el poder en cuanto su hermano Obiang “deje la cuchara” (Expresión acuñada en la Guinea Ecuatorial de Macías y Obiang Nguema, para referirse a la muerte de algún mandatario de la tiranía…) En realidad, Armengol Ondo Nguema ya ejerce, desde el 12 de octubre de 2008, el papel idéntico de Raúl Castro. Hay un evidente hilo conductor (mejor, dos evidentes hilos conductores) que marcan y aparean a los dos países: Abandono de España, y ocupación ruso-comunista. Si de lo uno esos dos pueblos (abatidos y obedientes) solo pueden sentir nostalgia o, decepción; de lo segundo, simple y llanamente, no saben, no pueden salir por sí solos.