miércoles, 1 de octubre de 2008

Guinea Ecuatorial y un delicuente como presidente



Todos los organismos internacionales reconocen que Guinea Ecuatorial es una plataforma para el crimen organizado.


Los observatorios de Derechos Humanos y de calidad de vida sitúan a nuestra República entre las más corruptas, despóticas, siniestras y arbitrarias de las tiranías mundiales.
Un sátrapa analfabeto y cruel es el dueño de la vida y hacienda de los habitantes del territorio. Guinea Ecuatorial cuenta con algo más de 600 mil habitantes y un número similar de expulsados o exiliados que han tenido que huir de su propio país.


La delincuencia, la corrupción y los abyectos caprichos del tirano y su banda armada, campan impunemente por la zona imponiendo su modelo de terror y violencia a un pueblo desarmado, iletrado, atemorizado y maltratado sin que nadie sea capaz de alzar la voz, como para no molestar al estúpido dictadorzuelo.


Todo en Guinea Ecuatorial es de “atrezzo”, de cartón piedra; un esperpento de escenario que camufla la más vil y repugnante de las dictaduras. La Iglesia oficial del régimen es una comparsa cómplice del dictador, su jerarquía son los cargos que reparte el sátrapa entre sus secuaces y esbirros, lo mismo pasa con la Cruz Roja, la Justicia o cualquier otro “organismo” o entidad.


Ponen el nombre a la puerta pero ni ese señor es un obispo ni ese otro es un representante de una organización humanitaria. Los misioneros y misioneras, curas y monjas de órdenes religiosas, trabajan en silencio para no ser expulsados del territorio , dejando en el peor de los desamparos a los cientos de miles de inocentes seres desheredados que padecen la esquizofrenia de este violador de los derechos humanos llamado Teodoro Obiang Nguema.


En Méjico se han llevado las manos a la cabeza cuando han descubierto que su país, Méjico, está entre los países con mayor índice de delincuencia del mundo pero, por lo menos hay políticos que lo denuncian y que se avergüenzan de que Méjico esté en el pelotón de cabeza de los más violentos y obscenos estados de la Tierra.


En Guinea Ecuatorial nadie dirá nada y es porque los delincuentes, los criminales y violadores se sientan en los sillones del poder y someten a un pueblo indefenso y desnortado que no tiene quien le ampare.


La oposición no existe, no hay medios de comunicación críticos u organismos independientes y cuando alguno levanta la voz se le calla a golpe de monedero o a golpe de torturas, crímenes, arrestos o extorsiones de todo tipo. No hay justicia y no existe la paz.



En España, resiste como puede una peleona y dura oposición al siniestro dictador guineano, encabezada por el irreductible Severo Moto, que también tiene que luchar contra la desidia complaciente y perezosa de las democracias que no tienen tiempo de discutir con el sátrapa.
Bastante hacen que ya no le reciben y ni le agasajan, algo es algo.


A continuación la noticia de Méjico como sexto en el listado de países tomados por la delincuencia.
No se olviden de que en Guinea Ecuatorial el delincuente, el jefe de la banda, se hace llamar Presidente y atiende por el nombre de: Teodoro Obiang Nguema.
México, 29 de septiembre.-
La Secretaria de la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados, Violeta del Pilar Lagunes Viveros, dijo que, de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), México ocupa el sexto lugar entre los países con mayor presencia de crimen organizado, sólo por debajo de Afganistán, Irak, Paquistán, Nigeria y Guinea Ecuatorial.

En entrevista, dijo que la delincuencia organizada radica, en algunos casos, en las alianzas y vínculos que han logrado establecer con funcionarios públicos de todos los niveles de gobierno, desde mandos policiales hasta esferas políticas.

Lagunes Viveros propuso una reforma el artículo 22 de la Constitución, con el propósito de establecer como pena la prisión vitalicia en los casos de delitos de delincuencia organizada, cuando éstos hayan sido cometidos por un funcionario público o éste hubiera participado durante el tiempo en que dura su mandato.

Destacó que la actual estrategia del gobierno para combatir al crimen organizado no será eficiente si antes no se rompen las redes financieras y los nexos con el poder político.
Alude que si bien la pena de prisión vitalicia podría ser cuestionable ante los principios constitucionales establecidos en torno a la pena, es necesario señalar que la propia Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ha determinado su viabilidad.

Agregó que la posibilidad de que la pena pudiera exceder de 60 años (tiempo máximo que el propio ordenamiento legal prevé) no implica que sea inhumana, cruel o infamante; por el contrario, cumple con los objetivos constitucionales de que sea ejemplar, intimidatoria, correctiva, eliminatoria y justa.

La legisladora plantea que diversos grupos delictivos han logrado relacionarse con la clase política, particularmente de ámbito municipal; se calcula que entre 50 y 60 por ciento de las alcaldías del país podrían tener algún vínculo con grupos del narcotráfico.

Detalló que respecto a la problemática de los municipios, ante la corrupción imperante, los funcionarios públicos han sido "capturados" por delincuentes, principalmente vía sobornos, amenazas, extorsiones, nexos de amistad o familiares.

Asimismo, Lagunes Viveros subrayó que a pesar de que cada entidad federativa ha expedido el correspondiente marco legal que atribuye facultades a sus autoridades para actuar en esta importante labor, aún no se refleja una disminución en actividades relacionadas con la delincuencia organizada. (Con información de Edgar Amigón/Finsat/RSC)