miércoles, 29 de octubre de 2008

Dirigentes clandestinos se reunen con Moto en Madrid




Severo Moto ha comenzado la semana despachando con un grupo de dirigentes del Partido del Progreso que habrían salido del país hacia destinos diferentes de España con el fin de mantener un encuentro, discreto, al más alto nivel con la cúpula del Gobierno en el exilio.

La clandestinidad a la que ha sometido la dictadura las actividades del Partido del Progreso ha generado unos mecanismos de defensa que hacen indetectables a los actuales dirigentes al tiempo que se ha perfeccionado un sofisticado protocolo de seguridad interna. De esta manera, el lunes y el martes, en reuniones separadas, han tenido lugar los encuentros con los responsables del área continental y el insular.

Tanto Severo Moto como su Vicepresidente, Armengol Engonga, han escuchado los informes que han traído estos dirigentes desde Guinea Ecuatorial.

En Guinea Ecuatorial se ha generado un “apagón informativo” ya no sobre la salud del dictador sino de todo lo concerniente a Teodoro Obiang Nguema. Nadie puede hablar del tirano y una mala palabra o un comentario fuera de los círculos de confianza pueden generar un serio problema.

El Partido del Progreso está actualmente ilegalizado en el país y sus dirigentes sufren persecución y cárcel y algunos de ellos han muerto a manos de los sicarios del dictador.

Severo Moto ha escuchado de primera mano cuales son los problemas más graves a los que se enfrenta su gente en el país y han analizado los acontecimientos que se están viviendo estos días. Moto y Engonga han perfeccionado las rutas por las que se envía ayuda a los grupos de la resistencia interior y han entregado unos ordenadores portátiles y teléfonos móviles para poder estar mejor comunicados.

Severo Moto les ha dicho que están intentando cerrar un acuerdo para poder enviarles más y mejor material así como hacerles llegar algo del poco dinero que se recauda en el exilio para que puedan financiarse, al menos, los viajes, los desplazamientos y el trabajo político que desarrollan.

Como siempre, Severo Moto se ha mostrado muy emocionado con la visita de estos compatriotas y le ha costado despedirse de ellos. Moto dice que “la resistencia interna es un ejemplo que nos alimenta y nos da fuerza para seguir luchando por un mundo mejor. Ver a estos hombres y mujeres que no tiran la toalla a pesar del dolor y las atrocidades que cometen los animales de la dictadura, me llena de fuerza y me reafirma en mi compromiso de llevar a Guinea Ecuatorial a la órbita de los países civilizados y democráticos”.