domingo, 15 de noviembre de 2020

PROPICIAR EL RETORNO DE “TODOS LOS EXILIADOS” PARA DEMOCRATIZAR GUINEA ECUATORIAL


Exilio del Partido del Progreso forzado en España, 15 de Noviembre de 2020.- A estas alturas sabemos que Obiang y su clan dominante está utilizando todo el aparato del estado como auténtico poder de represión y violencia contra los guineanos, un poder que solo puede ser desbaratado con el retorno masivo a nuestro país del grueso de disidentes que luchan en el exilio contra esta dictadura. Por ello creemos que es muy aventurado e injusto afirmar, como lo hacen algunos, que la oposición a Obiang, especialmente la exiliada, no ha conseguido grandes frutos en su dilatada lucha contra la dictadura de nuestro país.
Esta afirmación, que en el fondo viene a defender los intereses de la dictadura, niega una realidad que no podemos esconder  y es que, junto a la lucha ya tradicional de los partidos políticos, multitud de guineanos exiliados ya han levantado su voz contra Obiang, bien de forma individual a modo de activistas, bien en diferentes grupos, y medios como: periódicos digitales, emisoras online, grupos de whatsApp, audistas, grupos da Facebook, canales de You Tube, etc.
Todo este conglomerado de exiliados, luchadores en favor de la libertad de nuestro pueblo, han levantado sus voces para denunciar ante el mundo entero los abusos que está cometiendo la dictadura contra nuestro pueblo. Y hay que reconocer que sus protestas y sus denuncias están calando en la opinión publica internacional, hasta tal punto que Obiang, su familia y su clan, están siendo rechazados de forma unánime por la mayor parte de dicha opinión pública.     

Siempre hemos sostenido que los cientos de miles de guineanos exilados serán la fuerza que rompa los diques que ha creado la dictadura para aislar y recluir al conjunto de guineanos que se encuentran dentro del país. Toda la fuerza de la oposición (mas eficaz si va unida), junto con la ayuda de la comunidad internacional, es la que puede abrir las compuertas a la pluralidad y a la democracia en Guinea Ecuatorial.

Este convencimiento  ha sido el que ha animado al Partido del Progreso y especialmente a Armengol Engonga, antes como Vicepresidente y ahora como Presidente, a fraguar alianzas con otros partido de la oposición, para hacer llegar nuestras voces a las instituciones defensoras de los derechos democráticos y a los grandes países con intereses en Guinea Ecuatorial, para que nos ayuden a poder retornar todos los exiliados a Guinea Ecuatorial, para construir un nuevo estado democrático y de derecho.


Sabemos que aquí no caben las acciones individuales. Ya sabemos como ha terminado el retorno pactado de algún líder político en los últimos años: con la  cárcel, la represión y la muerte de muchos de sus seguidores y con la "neutralización" de su cabecilla. 

Aquí solo existen dos opciones: o vamos todos con la fuerza suficiente para echar a Obiang del poder y si retornamos de forma individual, terminaremos en la cárcel, en la tumba o, en la situación menos noble; comiendo en la "cosina" con Obiang.  

Hemos comprobado como la parálisis que ha provocado la pandemia de la Covid-19, ha sido aprovechada por muchos  gobiernos, que se llaman democráticos, para limitar las libertades y socavar las instituciones de sus respectivos países. Pero han sido los dictadores, especialmente Obiang, el que la ha aprovechado para consolidarse, el y su familia, en el poder, dar una nueva vuelta de tuerca a la represión e incumplir sus compromisos de avanzar en la apertura democrática de nuestro país.