sábado, 23 de mayo de 2020

CRONICA DESDE MALABO (I)


Buenas tardes¡¡, desde Malabo, queridos guineanos en el exilio, queridos militantes del Partido del Progreso, queridos Directivos, querido y respetado Presidente, Severo Moto: si hoy nos pidiesen un resumen sobre la situación socio - política y económica de Guinea Ecuatorial y digéramos que es un caos, nadie se atrevería a desmentir nuestra afirmación.
En el país las autoridades, encabezadas por Obiang no hacen más que lanzar discursos y dictar órdenes (muchas de estas órdenes son contradictorias). OBIANG y los suyos lanzan discursos sin actuar  en favor del pueblo que malgobiernan, claro fruto de sus desorientados ánimos para evitar este silencio, que muchos preferimos, en lugar de sus desorbitados discursos, órdenes ministeriales y decretos-leyes. Claro ejemplo de este hacer y decir para que no nos acusen de inactivos está presente en las últimas decisiones del ministerio de educación, de sanidad, de agricultura; está presente también en el discurso del señor Obiang Nquema en su última tímida y enfermiza aparición por los medios informativos.

Días atrás, el ministerio de educación aseguró por los medios que íbamos a clausurar el curso como en todos los años. Antes de esta descabellada afirmación-orden, el Ministerio dijo que iban a dar clases telemáticas a los alumnos de preescolar, primaria, ESBA y BACH. A raíz de estas dos decisiones-mandatos, tomadas y ordenadas por el ministerio de educación, muchos centros privados de Malabo empezaron a preparar las clases, formar grupos de whatsAap para dotar a los alumnos de suficiente información y actividades con el único objetivo de mantener al alumnado informado desde casa. Muchos centros, como digo, lo llevaban bien, pero para sorpresa de todos, el jueves, día 21 del presente mes de mayo el Ministro de Educación, a través del Inspector General de Educación, prohibió al personal docente mandar contenidos formativos a los alumnos por WhatsApp alegando que está actitud no ayuda a frenar la expansión de COVID-19 por nuestro territorio.
Otra escusa que da el ministerio es que los centros privados ya quieren lucrarse con ésto.
A propósito de la frase: "los centros privados quieren lucrarse". ¡Señores del desgobierno de Obiang!; ¿vuestros informantes no os han dicho que los centros privados que dan actividades y clases a los niños no cobran a ningún alumno? ¿Cómo uno logra lucrarse preparando las clases, enviándolas por WhatsApp con su saldo de teléfono y sin pedir ni cien francos a sus alumnos?
¿Cómo se va a clausurar el curso si los niños no toman clases ni desde casa?. Descabelladas del ministerio de des Educación.
La pasada semana llegó a Malabo un barco de hortalizas y demás alimentos para "surtir nuestro mercado de tales productos vitales" - según informaron los del Ministerio de Agricultura a la sufrida sociedad malabeña. En la intervención del responsable del ministerio del sector alimenticio le vimos "enfadado" contra las y los vendedores de estos productos; le escuchamos decir que se iba a castigar al que, a la hora de revender dichos productos en el mercado, fuera a abusar de precios.
Después de tanta publicidad por la televisión Guinea y asonga, al pueblo le llegó la vara: Todo lo que dijo el ministro de agricultura no fue más que un lavado de imagen en la prensa.
Actualmente en Malabo una frutita de limón cuesta casi 1 Euro. Hoy se han sumado al grupo de las vendedoras las mujeres, familiares y amantes de los ministros.
"el grupo de las vendedoras en Guinea Ecuatorial es muy potente porque tienen presente en el mismo a la primera vendedora nacional: la primera dama de Obiang Nquema"
El aparentar que se hace para que no les acusen de inactivos en el ministerio de agricultura, es su consigna.
Por otra parte, el Ministerio de Sanidad ya no publica la cantidad de infectados y de víctimas mortales de COVID 19 y, cuando lo hace, acaba ofreciendo al pueblo los datos anteriores, como lo han hecho esta mañana por TV GE. Esta mañana han dicho que ya tenemos 7 víctimas mortales y más de 700 infectados. Miren que la cifra de infectados ya asciende a 903 y la de las víctima mortales ya ha llegado a 10 (datos de OMS). Y nos imaginamos que los reales, debe ser una cifra escandalosa. Malicia descabelladas de Obiang y su gente.
El mismo Obiang en su enfermiza y tímida aparición nos pidió desde su escondite que aprendiéramos a convivir con el COVID-19. Cualquier presidente normal, cualquier ciudadano normal sabe que se espera y se aguanta luchando; se aguanta mejor una mala situación cuando se lucha para superarla.
Aprender a vivir molestos, aquejados por una mala situación o enfermedad es aprender a entregarnos a la muerte. Es decir, Obiang Nquema, el dictador quiere que sólo esperemos nuestro remedio para el COVID 19 en la muerte.