jueves, 2 de noviembre de 2017

JUICIO A UN LADRÓN -HIJO DE UN DICTADOR AFRICANO- FRANCIA “PONE LA PICA EN FLANDES”














*La figura de la “Parte Civil” en el juicio a Teodorín, ha sido decisiva…
*Parecía imposible; pero Teodorín y su padre se lo han  puesto fácil a Justicia francesa
*La corrupción -al igual que la mentira- tiene los pies muy cortos.
*LA DROGA y su tráfico, la más eficaz “empresa “legal” de Teodorín…
*Teodorin, sus múltiples hermanos, familiares y amigos, no son más que un leve eslabón de la larga cadena de delincuentes  creada por el primer eslabón: Teodoro Obiang Nguema Mbasogo
(Crónica de cercanía)
Por Nkuá Elón. Periodista.

“PARTE CIVIL”
He estado presente, a título de observador, en algunas de las últimas sesiones del largo e interminable proceso y juicio celebrado en el Correccional de París, contra el hijo del dictador  de Guinea Ecuatorial, Teodoro Nguema Obiang Mangue, denunciado, acusado, juzgado y, finalmente, sentenciado por la Justicia Francesa.

Difícilmente hubiera asistido, yo, a las sesiones de juicio, previos al pronunciamiento de la sentencia, del 27 de octubre de este año, 2017 si no me hubiera inscrito en la lista de la llamada “PARTE CIVIL” que se definía como “presencia, en representación, de ese pueblo de Guinea Ecuatorial, al que habían afectado y afectan el robo, blanqueo, ejercicio de corrupción, malversación  de fondos y abuso de confianza y poder, cometidos por el hijo de Obiang Nguema.
Al escuchar los delitos de los que se acusaba a Teodorín, todos ellos reforzados por una profunda carga de pruebas documentales  y avaladas por declaraciones de testigos cualificados, comprendí que la “PARTE CIVIL” de la que formaba parte… tenía un valor, si no jurídico o técnico, sí, vestía el juicio de un profundo valor y fuerza humanos, al representar al PUEBLO GUINEO, víctima final e impotente de los delitos de que se acusaba a Teodorín. El furibundo enfado del régimen dictatorial y sus Abogados defensores, que, por toda defensa, se emperraron en intentar evitar la presencia de la “PARTE CIVIL” encarnada en la Asociación CORED, (de la que decían que convertía el proceso, en “juicio político”). La PARTE CIVIL estuvimos ahí hasta el final; para rabia y enfado desesperados del régimen.
Y, al final, se pronunció la SENTENCIA. Escrita, así, en mayúsculas, para resaltar el valor que la misma encarna y significa.

MAS FACIL, IMPOSIBLE, PARA LA JUSTICIA…

Y es que, mirado con toda la carga de serenidad y análisis que se merece, el juicio en Francia a un acusado de robo al Estado, malversación de fondos, blanqueo de capitales, corrupción, abuso de confianza y de poder; todo probado, y llevado a cabo por el hijo de un DICTADOR africano, es una auténtica innovación en las relaciones África-Europa. Tres eran los países apuntados, de inicio, por TRANSPARENCY  de Francia, en el asunto de Bienes Mal Adquiridos: Gabón, Congo Brazzaville  y Guinea Ecuatorial. No cabe duda de que, puestos los tres países en el mismo disparadero de TRANSPARENCY France, algo ha hecho Guinea Ecuatorial, su régimen, su Gobierno, su presidente, el HIJO de este, para que Transparency de Francia estrenara con tanta eficacia un proceso basado en los Bienes Mal Adquiridos. El régimen, evidentemente se lo han puesto muy fácil a Francia y a su Justicia, al no tener ni el régimen ni sus protagonistas ni sus abogados defensores más argumentos que evitar que el juicio fuera político por la presencia entre los observadores, de Severo Moto y CORED; o que la Justicia francesa no tenía jurisdicción para juzgar la corrupción, la malversación, el blanqueo de dinero, el abuso de confianza y de poder, practicados en territorio francés… (Porque nada de eso era delito en la dictadura de Guinea Ecuatorial) Ningún argumento era capaz de probar que Teodorín no estaba incurso en dichos delitos. Cualquier espectador, como yo, sin ser ni testigo, ni Abogado ni Juez, ni casi nada más que PARTE CIVIL, se hubiera dado cuenta, como yo, de que los abogados defensores “los hombres de capa negra” lo tenían “muy negro” en sus argumentos de defensa. Más fácil no se lo podían poner Teodorín y su padre a los acusadores, a la Juez y a la Justicia francesa.

NO HA FALTADO LA MENTIRA OFICIAL, “EQUATÓ”

No ha faltado, en este juicio, ese elemento, tan tristemente común en el régimen implantado en  Guinea Ecuatorial, como es la MENTIRA. Escuchar a los defensores de Nguema Obiang, empeñados tanto en centrar sus argumentos en denunciar la presencia, en las sala, de la parte civil; y al Embajador de la dictadura equató en Francia, Migue Oyon Ndong Mifum (OLOBOT) intoxicando los pasillos  y medios de comunicación con acusaciones, fuera de sitio, contra  Severo Moto; o trayendo como testigo a un inglés, consejero de Obiang Nguema, llamado SIMON MANN, quien, acusado antes, de haber intentado derrocar a Obiang Nguema en  Zimbabwue, se ha convertido en un consejero, muy bien pagado, del dictador equatorguineano; y que bajo la tortura en las cárceles de Zimbabwue y en Black Beach de Guinea Ecuatorial, declaró lo que, luego, en libertad, desmintió, bajo juramento en un “afidavit” ante la Justicia inglesa. La MENTIRA, ese refugio pueril y desesperado en el que se halla anclado el régimen de Obiang Nguema dejó pringado el ambiente general de este juicio.   

LA DROGA, EL TESORO NACIONAL Y LA CORRUPCION; PRINCIPALES “EMPRESAS” DE TEODORIN

No ha dejado de llamar la atención el empecinamiento de los defensores de Teodorín en imitar y tomar la línea argumental de defensa, sugerida por el padre de Teodorín y el Embajador de la dictadura, en Francia, al intentar blanquear los robos y desmadres económicos de Teodorín, diciendo que todo se debe a sus empresas privadas, ya desde antes de ocupar puestos de gobierno. Fue impresionante, a la vez que casi traicionero, aquel recuento de empresas, ganancias y centenares de miles de millones que uno de los Abogados defensores de Teodorín presentó para probar la legitimidad y legalidad de su procedencia; cifras que a la vez que parecían alabar a su defendido, más parecían demostrar que era imposible que tanto dinero naciera de fuentes dignas, legítimas, elegantes y limpias…
En efecto, un mínimo buceo por entre las turbias aguas por las que se mueve el vástago primogénito del dictador de Guinea Ecuatorial; una simple y breve conversación (secreta) con alguien escapado del entorno de Teodorin, descubre que el imperio económico del Vicepresidente del Gobierno de Obiang Nguema, tiene hundidas sus profundas raíces en el BANGA; término de lengua fang, traducido genéricamente al español como DROGA.
Sin caer fácilmente en una denuncia o imputación vacía, basada solo en lo que significa el consumo excesivo (de cuyas consecuencias se asegura que acaba de ser desintoxicado el Vicepresidente de Guinea Ecuatorial en un país lusófono); de lo que se trata es de algo tan vulgar y tan común en el régimen como el trasiego, tráfico o negocio de DROGA, tan ejercido y “normal” en el mundo de la dictadura de Guinea Ecuatorial, y en cuyas redes han caído, uno tras otro, siempre tan sordos e irredentos, numerosos embajadores del régimen; con la extraña suerte de que una vez  pillados en las fronteras del mundo, son rescatados por el “JEFE”,  en las puertas de las cárceles y elevados automáticamente a cargos de alto nivel gubernamental o institucional en Guinea Ecuatorial.
Una frase muy reveladora, esbozada, a voz en sorna, por nuestros confidentes que aseguran:
“Pocos Vicepresidentes en el mundo, viajan tanto, extra oficialmente; con tantos acompañantes y tantos maletines y carga; pertrechados y protegidos con tantos pasaportes diplomáticos y de servicio, como el Vicepresidente de la República de Guinea Ecuatorial, Don Teodorín Nguema Obiang Mangue”
Es, por otra parte, de público conocimiento de todos, que la Tesorería General de la República de Guinea Ecuatorial, es un auténtico POZO SIN FONDO, donde pescan libre -a veces, violentamente- los hombres fuertes del régimen. Da, efectivamente, la sensación de que el poder económico de Teodorín Nguema Obiang Mangue no cace, ni tanto ni solo de sus empresas antes de sus altos cargos de Gobierno, sino de otras fuentes donde solo la violencia, el delito y también el poder pueden actuar.
Parece, en este caso, que la más grande empresa de Teodorin, para manejar tanto dinero y gastarlo en Francia, es la droga, la libre entrada en el pozo sin fondo de la tesorería y la corrupción.

EL JUICIO A TEODORIN: LA PEQUEÑA PUNTA DE UN INMENSO ICEBERG

Mi crónica de cercanía no puede sino acabar con absoluta normalidad y coincidencia con la opinión global, tanto de los medios de comunicación internacionales como de los prohombres de Transparency Internacional de Francia. Este ha sido un primer juicio sobre Bienes Mal Adquiridos, a la vez ejemplar y ejemplarizante; ajeno a altas presiones fáciles, y un rotundo aviso a navegantes: “Francia no puede seguir mirando a otra parte, viendo cómo desde África, los poderosos ladrones vacían a sus pueblos pobres para enriquecer a sus colonizadores ricos…”-Aseguraba el gran Abogado de Transparency Francia.
Y en el caso concreto de Guinea Ecuatorial, el mensaje queda muy claro y transparente: El juicio y condena de Teodorin, tiene relativa importancia en cuanto se trata de la simple punta de un gigante  iceberg que debe ser pulverizado. TEODORIN Nguema Obiang Mangue, con sus hermanos, parientes, amigos y colaboradores, son simples brotes y ramas engordadas de un gran tronco: TEODORO Obiang Nguema Mbasogo, acorazado en la impunidad, la inmunidad, la violencia, mientras dicta “sabias orientaciones” a tantos otros “teodorines”.

COLOFÓN.

Tres años de cárcel; 30 millones de Euros de multa, incautación de todo lo robado y depositado por Teodorin, en Francia; incluido el suntuoso y polémico edificio de la Avda. Foch de París.
Es legítimo pensar que este ha sido el gran trofeo jurídico y el obsequio que, recibido de manos de la Justicias Francesa, la PARTE CIVIL podemos ofrecer a nuestro pueblo.
A la Juez del Correccional de París, a los Abogados, al Gobierno francés les toca, a mi manera de pensar, marcar las modalidades de la aplicación de la modélica, ejemplarizante e innovadora SENTENCIA contra Teodorín.