Por este motivo, desde esta redacción vemos conveniente expresar nuestra opinión sobre este tema.
Redacción El Confidencial
Va creciendo el número de partidos dispuestos a presentarse a las elecciones fraudulentas y tramposas que va a llevar a cabo la dictadura. ¡Que manía esta la de los partidos del interior, eso de poner una vela a Dios y otra al diablo¡. Está claro que algunos han caído en una verdadera esquizofrenia, en la que por una parte dicen que combaten la dictadura y por otra desconvocan las manifestaciones que tenían organizadas en contra del régimen, para a continuación aceptar ir a las fraudulentas elecciones que convoca Obiang, siempre para ganarlas.
No podemos aceptar las
reglas de juego de un dictador, porque siempre van en su beneficio. Si quiere convocar elecciones que sean creíbles
y aceptadas por todos los
partidos, los de dentro y los exiliados. Para ello, Obiang debe dictar primero una amnistía
para todos los condenados por oponerse a su dictadura, tanto los que
están en la cárcel en Guinea -presos como: Cipriano, Ticino....- como los que ha expulsado al exilio. Después,
establecer un censo electoral limpio, llevado a cabo junto a observadores internacionales imparciales -y no
comprados-. A continuación ley de partidos, rehabilitación del Partido del
Progreso y legalización de todos los partidos que lo soliciten. Y por ultimo, elecciones
monitorizadas y con la presencia de una fuerza internacional de interposición.
El Presidente del Partido del Progreso, Severo Moto, ha recomendado siempre
a su pueblo que sin libertad no acuda a votar
Todos sabemos que Obiang no está dispuesto a aceptar estas condiciones, porque ya lo ha dicho: “aquel que quiera el poder lo tendrá que obtener como yo lo hice el 3 de agosto de 1979”. Su idea del poder es patrimonial, exclusiva, totalitaria, dictatorial y ejercida mediante la fuerza militar y paramilitar. Si esta realidad es de todos conocida, ¿a qué están jugando algunos?.
Cada partido es libre para ir a las elecciones o para boicotearlas. También nosotros somos libres y estamos legitimados para
manifestar que lo correcto es boicotearlas, porque si participamos en esa macabra fiesta, le estamos dando una
nueva oportunidad a Obiang para que permanezca en el poder otra legislatura más, condenando a nuestro pueblo a
una perpetua esclavitud.
Si algunos creen que van a tomar el pelo al pueblo guineo,
están muy equivocados. Bien saben los guineanos que estos comportamientos obedecen mas bien a los pactos que, explícitamente, han suscrito con el dictador. Pactos
que la gente conoce –son un secreto a voces- y que los condenan.
No queremos que esta imagen se vuelva a repetir nunca mas
Al final todos quedan retratados, los que desconvocan manifestaciones a cambio de acompañar a Obiang en sus falsas y fraudulentas elecciones, y los que prefieren oír los discursos -las mentiras- de Obiang, que atender una entrevista televisiva de un valiente activista guineano.
No tenemos empacho en manifestar que aquellos que pactan con Obiang ir a sus elecciones, traiciona al pueblo y a la mayoría de los partidos que están condenados al exilio perpetuo, a los que Obiang les llama violentos y terroristas, porque ellos si luchan en serio contra la dictadura y trabajan para llevar la democracia a nuestro pueblo.
