Obiang Nguema, dictador de Guinea Ecuatorial, 1979-20.....?
Redacción El Confidencial
Otra vez a vueltas con el tema, ya recurrente, de las elecciones fraudulentas que convocará Obiang Nguema. Algunos voceros del régimen, o simplemente personas incautas, están enviando
mensajes en Facebook o en otros redes sociales, a fin de calentar el ambiente,
e incluso retar al personal (a los partidos opositores) a que se presenten a esta nueva trampa de convocatoria de elecciones,
que se dispone a llevar a cabo el dictador. También los partidos que
tradicionalmente suelen acompañar a Obiang en sus manipuladas convocatorias,
están manifestando su intención de presentarse de nuevo, quizá para seguir
consiguiendo su único escaño –y algún dinero- con el que Obiang obsequia a los tontos útiles que le suelen
acompañan en su fraude electoral.
Zayn al-Àbidin Ben Ali, dictador tunecino, 1987-2011
Es una farsa validar unas elecciones sin una mínima garantía
democrática, ni por supuesto, sin una amnistía general para todos los presos políticos y
represaliados de la dictadura, tampoco sin favorecer el retorno en libertad de los exiliados, que representan la
genuina oposición a la dictadura. Su postura nos parece una felonía y una traición, que además no va a contribuir a ningún avance sustancial en nuestra lucha en favor de la democracia, mas bien a todo lo contrario.
Este ejemplo puede ilustrar la situación: si accedemos a
jugar un partido de futbol con un
equipo marrullero y abusón, estando convencidos de que con sus trampas nos van
a ganar el partido, y además cuentan con un árbitro casero y comprado, tendríamos claro
que no debemos disputar ese partido, ya que haciéndolo le damos la oportunidad
de contar con una victoria segura y nosotros sufrir una vergonzosa derrota.
En esto también ha acertado Severo Moto, cuando se negó a concurrir en las elecciones presidenciales del 96. Después de consultar con los militantes del
Partido del Progreso, estos le
dieron la siguiente advertencia: “si vas a competir con Obiang en unas
elecciones, procura que sean libres y limpias, entonces las ganarías por mayoría, y eso
lo sabe el dictador. Pero si no
traes la fuerza y el aval internacional, para que Obiang juegue limpio, es
mejor que no te presentes, ya que nos veríamos obligados a votar al dictador,
ya que no aceptaría su derrota, además,
seríamos víctimas de una violenta
represión y tu perderías tu credibilidad".
El pueblo conocía muy bien al dictador, ya que en las
elecciones municipales del 95, que las ganó la POC, no quiso reconocerlas y se
despachó con aquella célebre
frase: “vosotros habéis ganado las elecciones municipales, ¿y ahora quién os va
a entregar los ayuntamientos”?.
Laurent Kudu Gbagbo, dictador de Costa de Marfil, 2000-2011
El Presidente del Partido del Progreso ha seguido pidiendo a
su pueblo que no fuera a votar en cada
una de las elecciones que ha ido convocando Obiang y los militantes han
intentado, en la medida de los posible, hacer caso a esa recomendación, hasta
tal punto que en las elecciones presidenciales del 96, hubo una abstención
cercana al 80%.
Algunos ejemplos, han demostrado que Severo Moto estaba en
lo cierto. No hace mucho tiempo un partido, al que Obiang le permitió salir del
exilio español y volver a Guinea para participar en las elecciones, prometió a sus seguidores que venía avalado por el rey de España
y por los americanos, muchos guineanos pusieron su esperanza en ese político,
cuando se demostró que todo había sido una mentira, y que al final iba a
participar en las mismas elecciones, sin seguridad y sin garantía, la ciudadanía
defraudada, le abandonó.
¿Cuáles son los motivos por los que no debemos participar
en las elecciones fraudulentas que convoca Obiang para ganarlas?:
1- si vamos a
las elecciones con el dictador, éste puede exhibir internacionalmente que su
régimen es homologable a las demás democracias, ya que los partidos opositores
participan en las elecciones. Si le preguntaran el por qué no están todos los
partidos, el dictador daría el argumento de siempre: “los partidos opositores exiliados,
son unos exaltados, violentos y
terroristas”.
2- sería una tomadura
de pelo al pueblo, ya que con la fuerza militar intimidatoria de Obiang, no serían
libres para votar.
3- falsearíamos la realidad y haríamos un gran daño a los
opositores que no pueden volver a Guinea, porque están amenazados de muerte por
el dictador.
4- legitimaríamos internacionalmente la dictadura.
5- cerraríamos en
falso y nunca tendríamos verdadera democracia.
Blaise Compaoré, dictador de Burkina Faso, 1987-2014
Cuando el Partido del Progreso anunció el retorno a Guinea
Ecuatorial, Obiang contestó a Severo que se atreviese pisar Guinea iría directamente a la
cárcel y no solo eso, nos enteramos que tenían preparado un grupo de
mercenarios angoleños, apostados en las inmediaciones del aeropuerto, para organizar un tumulto y asesinarnos. Aun con eso nuestro militantes, que conocían
bien las verdaderas
intenciones del dictador nos suplicaron que no retornáramos a Guinea Ecuatorial,
porque no deseaban vernos muertos.
Obiang Nguema forma parte de la lista de dictadores
africanos más sanguinarios, que además ejerce su poder dictatorial como jefe de
los ejércitos y que cuenta con una inmensa fortuna con la que
lavar su imagen y comprar voluntades, dentro y fuera de Guinea Ecuatorial.
Nosotros entendemos que recibir dinero, o prebendas por concurrir a sus elecciones
fraudulentas, es una de las forma de dejarse comprar por el dictador.
Yahya Jammeh, dictador de Gambia, 1996-2017
Si hacemos un repaso a los dictadores africanos,
coetáneos a Obiang Nguema, veremos
las formas en que han sido apartados del poder:
-Zine El Abidine Ben Alí, dictador de Túnez, echado del poder
en enero del 2011, mediante una revuelta popular.
-Muamar el Gadafi, dictador de Libia, apartado del poder en
2011, por una coalición militar liderada por Francia.
-Laurent Kudu Gbagbo, dictador de Costa de Marfil, detenido
en su búnker en 2011, por una coalición militar liderada por Francia.
-Hosni Mubarak, depuesto en 2011 mediante una rebelión
popular, seguida de golpe militar.
-Blaise Compaoré, dictador de Burkina Faso, depuesto en
2014, mediante un golpe militar.
-Yahya Jammeh, el ínclito huesped de Obiang Nguema, dictador
de Gambia, echado del poder en 2017 por una coalición militar formada por países
de la zona.