Por Severo Matías MOTO NSA, periodista
Considerado como un “hecho histórico” por el insigne Abogado de Transparency-Francia, William Bourdon, el juicio celebrado en el Tribunal Correccional de París, contra el hijo del dictador de Guinea Ecuatorial, conocido como Teodorín Nguema Obiang Mangue, ni ha dejado indiferente ni ha defraudado a nadie… todavía.
Desde que Francia se constituyera en el adalid mundial del rechazo de los BMA (Bienes Mal Adquiridos), enfocando su mirada sobre África, y concretamente sobre tres países francófonos: Congo-Brazzaville, Gabón y Guinea Ecuatorial, el cerco a los “ladrones de alto copete” de esos países, se ha ido estrechando y afinando hacia un punto muy concreto y decisivo: Guinea Ecuatorial, su régimen, una familia, una víctima…Teodorin Nguema Obiang
Mangue. Triste suerte la de un hijo (lleno del AND de sus padres) a quien sus padres han sacrificado y entregado a la justicia; mientras ellos se refugian en la inmunidad internacional y en la impunidad de que disfrutan en el país, escondidos tras el parapeto de las armas, la violencia, el terror, los asesinatos y una brutal e imparable delincuencia que se extiende al tráfico de armas, de droga, de órganos humanos, y la ingestión de testículos de rivales; lo que -según ellos- traspasan, al que los ingiere, las virtudes, fuerza y dotes de la víctima, rodeándolos de un halo de miedo y terror frente al resto de ciudadanos.
Esta es, en su más genuina y directa descripción, la realidad del régimen de Obiang Nguema Mbasogo; un régimen centrado en una familia, definida por un alto diplomático americano como “Familia peligrosamente organizada para el crimen”
1.- FRANCIA Y SU JUSTICIA.-
GUINEA ECUATORIAL ES UN PAIS FRANCÓFONO (¿)- En las estadísticas mundiales que hoy se manejan con relación a Guinea Ecuatorial, este país originariamente hispano, hoy consta, en las listas de países africanos, como francófono. No es nuevo que Teodorín, se pasó un largo periodo de su vida en Francia, donde prácticamente inició, como hijo del dictador de Guinea Ecuatorial, su procelosa y descontrolada actividad delictiva, centrada especialmente en vivir inmerso en la riqueza, en el “alcohol, putas y droga” -como lo define su mayordomo francés-
No falta quien afirma que durante este periodo, Teodorín adquirió la nacionalidad francesa; una nacionalidad añadida a la guineana, al igual que lo hace su padre con la nacionalidad española. (¿La pertenencia de Guinea Ecuatorial a la francofonía, es un nuevo elemento de la “Materia Reservada” que pesa sobre ese país, inicialmente afro-hispano?
Francia podría haber pasado de largo por los delitos cometidos por un ciudadano guineano en Guinea Ecuatorial. También, Francia podría haber “protegido” a Teodorín como ciudadano francés, por los delitos cometidos en otro país. La doble nacionalidad… de Teodorín, le ha dejado sin salida ante la acción de Transparencia Internacional Francia, que por esa misma calidad de “Internacional” y por la concreta “red” tendida en Francia contra los Bienes Mal Adquiridos (BMA) robados, vengan de donde vengan, la tiene jurada a los que ella caen.
William BOURDON, Abogado de Transparency-Francia. Voz de la Acusación (PARTE CIVIL) contra Teodorín.
El gigante Abogado de Transparency Francia, Me. William BOURDON, lo ha dejado muy claro cuando, en su última intervención, señaló entre otras cosas, que antes habían pasado por alto, tolerado y minimizado los BMA, en los que, concretamente Teodorin se movía como pez en el agua. Y añadió: Francia no va a seguir siendo un espacio de protección de bienes mal adquiridos y blanqueo de dinero obtenido por la corrupción.
El reconocimiento general de que este juicio a Teodorín (por más diminuto que sea este nombre) es un hecho histórico; no deja dudas de que Francia ha hecho demostración ejemplar de su indiscutible “grandeur”…
Jean Pierre SPITZER, Abogado de la Acusación (PARTE CIVIL) pidió 10 años de cárcel para Teodorin.
Lo dejaba muy claro el Abogado de la acusación, Jean Pierre Spitzer, tras la última sesión del juicio, en la que pidió 10 años de condena contra Teodorin: “Yo no tengo ningún miedo…”
2.- DOSSIER-TEODORIN.-
Teodorín NGUEMA OBIANG MANGUE,-“Alcohol, Putas y Droga”- “eterno ausente” en su juicio, ocupado en estrenar y lucir sus exclusivas adquisiciones de lujo.
De entre los principales temas sobre los que pivotaba y se centraba el histórico juicio, el Dossier-Teodorín ha constituido- como no podía ser menos- el CENTRO. Para la acusación, el Dossier es tan abultado, tan completo y detallado, tan firme y tan nutrido de detalles sobre la actividad delictiva de Teodorín que, como lo dijera un chino, al llegar a Guinea Ecuatorial: “¡Guinea Ecuatorial, país piquino; polobelema glande!”
Efectivamente para la acusación, Teodorín, pequeño (de nombrecito); pero problema grande (en delitos: Droga, alcohol, putas… dinero robado, desvío de fondos, blanqueo de dinero, corrupción, abuso de poder y de confianza… chulería, prepotencia, desprecios, insultos, descalificaciones a la JUSTICIA francesa, amenazas a Francia…). A todo ese nutrido Dossier-Teodorin se unen las declaraciones directas, personales -sin intermediarios- de TESTIGOS guineanos y extranjeros que han pasado por el juicio y han levantado su mano, en juramento, ante la Juez, para ratificar y acorazar la veracidad del DOSSIER-TEODORIN.
Nadie se cree que Teodorín Nguema Obiang Mangue (centro) pueda ser detenido y conducido a la cárcel; ahora que se ha ido a China para obtener un crédito para pagar las multas del juicio, y dejar endeudado al pueblo guineano…
3.- APLAZAMIENTOS, DILACIONES, EXCUSAS Y… FINALMENTE, PROVOCACIONES
Toda la eficacia de la Defensa de Teodorín descansaba en el adiestrado y muy espabilado Abogado francés, Emmanuel MASIGNI. Aplazar, dilatar el proceso, desacreditar el DOSSIER y espantar a la PARTE CIVIL, eran su eterna cantinela; escuchada por la Juez con increíble paciencia y, a veces, con más de un “¡basta ya!”
Frente a la ACUSACIÓN, sobrada de argumentos, la DEFENSA de Teodorín agotó manuales, teorías, ejemplos, comparaciones, resquicios y rincones o “trampas” legales, vacíos de legislación, “¡falta de pruebas!” para desmentir y descalificar el GRAND DOSSIER-Teodorin, y a los testigos directos contra el hijo del dictador de Guinea Ecuatorial.
Quizás las dos diferencias y distancias que más marcaron todo el proceso del juicio contra Teodorín, es la propia diferencia y distancia de opiniones entre la ACUSACIÓN que se movía con visible comodidad y sobrada de tiempo, ante la contundente evidencia que aportaba, tanto el “DOSSIER-Teodorín”, como la múltiple y variada cadena de testigos y pruebas personales que nutrían la causa; y la DEFENSA de Teodorín, que no paraba de medir la paciencia de la Presidenta del Tribunal, pidiendo, una y otra vez, aplazamientos, dilación del juicio, así como excusas. Alguien aseguró que todo era una forma de probar el carácter “garantista” de la Justicia francesa, evitando así que los Abogados, vacíos de pruebas y argumentos para rebatir el gran “Dossier-Teodorin”, se quejaran de que no les daban tiempo para preparar la defensa. No solo se puso a prueba la gran capacidad de aguante tanto del Juez, como la del Fiscal, o la de la Acusación; sino, sobre todo, la paciencia, aguante y ansiedad de los guineo- ecuatorianos, que hubieran preferido que el juicio durase, eso… unas horas, o como mucho, unos días. A medida que los numerosos aplazamientos se iban produciendo y sucediéndose, sin la más mínima efectividad a favor de Teodorin o de su defensa, se iba alimentando la ideo de que todo se debía a las ingentes cantidades de dinero que cobraban, por hora, los Abogados defensores de Teodorín, cuyos padres-Obiang Nguema y Constancia Mangue- tampoco paraban de esparcir dinero robado por todo el mundo, para comprar voluntades y lograr la paralización o anulación del juicio a Teodorín. Al final cayó sobre el Palacio del Correccional de París la orden del “dictador de normas” de Guinea Ecuatorial, Obiang Nguema Mbasogo, impartida a su Embajador en París, para que provocaran altercados y provocaciones contra los asistentes guineanos que, en calidad de PARTE CIVIL, acudían a las sesiones del juicio histórico. Todo inútil. Ni siquiera el revuelo levantado por un inquieto y descontrolado guineano, de nombre ELA N ZANG, achuchado por el Embajador de Obiang Nguema, consiguió alterar la quietud y serenidad de la Parte Civil que, con atención y cercanía siguió el juicio (CONTINUARÁ)