Redacción.
Se ha
clausurado, en Guinea Ecuatorial, el III Congreso Extraordinario del Partido
del dictador, Teodoro Obiang Nguema. La verdad es que hay que hacer un tremendo
esfuerzo para asimilar tanta estulticia e incapacidad o ver como estos incompetentes
y analfabetos detentadores del poder intentan auto convencerse de que
pertenecen a algún tipo de clase política en vez de a una vulgar e infame banda
de salteadores de caminos.
El sátrapa
Obiang Nguema habla como un papagayo y articula fonéticamente las palabras que
algún iluminado le ha escrito en un papel ¿Quién es el encargado de escribirle
los discursos a este personaje?
¡Bastante
que sabe leer! me dice un compañero periodista que también sigue esta farsa de
pronunciamiento político y de elección del candidato de siempre para
representar al partido PDGE en la elecciones presidenciales de 2016.
¿Se
imaginan ustedes a quién han elegido para que se presente a Presidente del país
por el PDGE? Pues bien, tras tres días de debates, mesas de trabajo, equipos de
estudios sociales y políticos, asambleas, exposición de proyectos y votaciones
se ha llegado a una conclusión y es que no hay nadie mejor que el señor Obiang
Nguema para el progreso de Guinea Ecuatorial. De chiste si no fuera tan
desagradable la realidad.
Un
disidente guineano me decía que Obiang hace ruido con la boca en vez de hablar
pues sus palabras no significan nada y escuchando el discurso de clausura uno
se pregunta cómo es posible que semejante homínido sea el conductor de los
destinos de todo un pueblo, una Nación, como Guinea Ecuatorial.
La estética
de estos dirigentes en el escenario es digna de un estudio sociológico pues más
que un congreso político parece que estamos ante una convención de promotores
de apartamentos de playa. La puesta en escena no tiene precio y ya no digamos
las camisas, gorritas y demás parafernalia. Como novedad y signo de modernidad
y renovación, los asistentes han votado a quién les va a representar en las
próximas elecciones. Una nueva consulta electoral para elegir al mismo de
siempre y que dicho sea de paso, ya ha anunciado que las va a ganar: Sí o Sí. A
ver, solo se presenta él y además es el más listo de todos así que, no me quiero imaginar cómo serán los que hacen
de comparsa de este maleante. ¡Qué cara más dura gasta este Obiang Nguema, por
favor¡.
Ante la
falta de novedad, el mismo candidato, con la misma camisa de turista pueblerino,
con su gorrita de hincha de un equipo de tercera regional y como si fuera la
primera vez que lee el discurso que algún indocumentado le escribe, va y dice: "Como dije en el discurso de apertura, la
Guinea Ecuatorial de hoy ya no corresponde con la del 3 de Agosto de 1979” ...
¿en serio? ¿de verdad que ya no estamos
en el 3 de agosto del 79? pues quién lo diría pues esa cara me suena y no es
para menos pues habrá cambiado todo en el mundo menos este tipejo que maneja
las vidas y haciendas de miles de guineo ecuatorianos. Qué poca vergüenza tiene
el tirano.
El Congreso
"EXTRAORDINARIO" ha servido para lo de siempre y que no es otra cosa
que gritarle al mundo que: "Guinea Ecuatorial es mía y hago con ella (y
con vosotros) lo que me sale de la gorra" en palabras de Obiang Nguema.
Habrá
nuevas elecciones pero será para elegir al mismo de siempre. Llenarán un salón
pero no saben ni poner una pancarta. Desde el 3 de agosto de 1979 solo ha
pasado el tiempo y aún así siguen repitiendo los mismos "mantras" y
las mismas tonterías del primer día. Parece mentira que cuenten con tanto
dinero y solo sean listos para gastárselo en joyas, coches de lujo, vida de
ostentación hortera y abusos de todo tipo.
Ya se ha
clausurado el III Congreso y como en el II y en el I TODO SIGUE IGUAL y sin que
se vislumbre ni un ápice de sentido de la responsabilidad y el decoro. Nada.
Mientras,
en el exilio, un grupo de hombres y mujeres se reúnen y hacen de tripas corazón
para seguir combatiendo la tiranía. Hace uno días dejamos la capital francesa
para volver a España y lanzamos un mensaje a nuestros compatriotas pero también
al mundo. Queremos vivir en paz y armonía con nuestro entorno. Hoy más que nunca,
reivindicamos la cordura, la educación y el sentido de la responsabilidad. No
se puede dejar naciones enteras en manos de bandas de delincuentes.
Hace unos
días paseamos por las calles de la bella capital francesa. Hoy nos duele la
sangre derramada y nos unimos en la tristeza de los franceses y de toda Europa.
No queremos que estas experiencias golpeen las ciudades y ataquen a hombres y
mujeres que aspiran a vivir en paz y libertad.
Mientras en
Guinea Ecuatorial un tirano se parapeta tras una mascarada y una simulación de
actividad política; el pueblo reivindica valores universales como la paz, el
respeto y la dignidad.
Hoy, una
vez más, estamos de luto y lamentamos tanta muerte gratuita pero la tristeza no
debe empañar la esperanza de una vida mejor y por eso seguimos luchando.