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El dictador Obiang Nguema ordenó el miércoles 29 la ejecución de cuatro personas entre los que se hallaba tres nacionales y uno de nacionalidad maliense.
Al ejecutado súbdito de Mali,de profesión camionero,se le acusaba del asesinato de un otro empleado de la firma egipcia Arab Contractor. Los dos empleados procedían del banco llevando sesenta millones de francos cefas y el conductor maliense en vez de dirigir hacia la sede de la sociedad, condujo al egipcio a las a fueras de la ciudad donde fue maniatado, golpeado hasta morir. El mismo acudió a la sede en calzoncillos ensangrentado manifestando haber sido victima de un ataque de parte de unos desconocidos. Esta información como era de esperar no convenció a nadie; más tarde relataría su iter criminis, confesando los hechos.
Los juicios que han llevado a las ejecuciones de los tres guineanos nunca tuvieron lugar;se los relacionan a soldados descontentos quienes en privado no aceptan el liderazgo del Tonto Nacional,Nguema,al frente del ejercito y cuerpos de seguridad del Estado. Desde el día de la Ejecuciones, no ha habido un comunicado oficial del gobierno acerca de la ejecuciones.
Van ya ocho personas ejecutadas oficialmente por orden expresa del Dictador Obiang en los últimos tres años, si hacemos memoria de las que llevó acabo el 2010 con los secuestrados exiliados políticos en África del Oeste. Círculos cercanos al dictador señalan que estas tienden a amedrentar a la población y asegurar la transición a la entronización de su hijo Teodorin evitando cualquier atisbo de oposición.
