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Por la información que nos suministra la Página Oficial del Gobierno de Guinea Ecuatorial, Obiang ha recibido al Nobel descubridor del virus del VIH, según cita: "El Presidente Obiang Nguema Mbasogo recibía al profesor y doctor Luc Montagnier, presidente de la Fundación Mundial para la Investigación y Prevención del Sida, con quien ha tratado temas de salud y los que conciernen a la Casa de la Francofonía “Léopold Sédar Senghor”, inaugurada este martes en la ciudad de Bata, capital de la Provincia de Litoral".
En el Día Internacional del Sida, es bueno recordar que esta epidemia se está cebando especialmente con nuestro continente. Según estadísticas recientes, en todo el mundo existen 30 millones de afectados por esta enfermedad y sólo África Subsahariana alberga 15 millones, esto supone el el 50 % de los infectados totales. Esta situación es un auténtico escándalo, ya que en una población de unos 800 millones de habitantes (que cuenta aproximadamente Africa Subsahariana), que es el 11 % de la población mundial (7.046 millones de habitantes), suponga el 50% de los infectados en todo el mundo. Dicho de otra forma, los infectados por el sida en el Africa Subsahariana, suponen cerca del 20 % de la población en estos países.
En la reunión semanal de la Permanente del Gobierno en el Exilio, Severo Moto manifestó a este respecto que había que aprovechar la visita a nuestro país de Luc Montagnier, para plantear un programa serio de lucha contra el sida, que englobe:
1- La creación de un Centro de investigación, bien dotado, para conocer las características particulares, el desarrollo y la difusión de la enfermedad en nuestro país
2- El establecimiento de una red de asistencia a lo largo del territorio nacional, para atender a toda la población afectada.
3- Acometer seriamente un plan nacional de prevención del sida.
Tanto a Severo Moto, como a todo el Gobierno en el Exilio, preocupa seriamente la pandemia de sida que está sufriendo Guinea Ecuatorial, en parte propagada por el propio clan gobernante, que además de no hacer nada serio para curar a los afectados, no es capaz de poner en marcha un mínimo plan para la prevención de esta pandemia.
Por ese motivo queremos recordarle al gobierno de Guinea Ecuatorial (aunque sabemos de antemano que hará oídos sordos), que esta visita puede ser una oportunidad de oro para atajar seriamente este problema. Sabemos que la tragedia del sida está matando todos los días a muchos jóvenes en Guinea Ecuatorial y que no se hace nada para remediarlo. Pedimos que una parte del dinero obtenido del petróleo se dedique a evitar este holocausto y no se tiré en corrupción o en grandes fastos, que sólo sirven para mayor gloria de Obiang Nguema.
