sábado, 14 de septiembre de 2013

COMUNICADO PUBLICO -EN DIRECTO-

                                                                   

Por Severo Moto Nsa, Maestro y Periodista guineo.

A las nueve y media de la mañana del viernes día 13 de Septiembre de este año 2013, apenas al despertarme, he recibido una llamada telefónica desde la República Gabonesa. La llamada me llegaba de un viejo amigo y compañero afiliado al Partido del Progreso, que se vio, como tantos otros, arrastrado por la violencia del Partido Democrático de Guinea Ecuatorial (P.D.G.E.) de Obiang Nguema.

La llamada, de carácter urgente, premonitorio y de seria advertencia, me informaba de que el dictador Obiang Nguema Mbasogo, presiente de la República de Guinea Ecuatorial, habría hecho entrega de una cantidad importante de dinero a un viejo e íntimo amigo, español; en otro tiempo importante e influyente autoridad gubernamental española. El objetivo de esa entrega de dinero sería para iniciar, de nuevo, acoso, insidias, tramas y, si fuera necesario, un nuevo atentado contra mi vida, en España.


Según la fuente, Obiang Nguema Mbasogo, cree y comenta insistentemente que su proyecto de heredar y situar en el poder dictador a su hijo Teodorín, tiene un solo escollo y dificultad. Obiang Nguema asegura que mi existencia y presencia, así como mi actividad política y la proyección popular e internacional que el Partido del Progreso, bajo mi dirección, ha adquirido, son los principales problemas con los que se encontraría Teodorín, si recibiera de su padre la “patata caliente” de la dictadura. El plan de entronización de Teodorín como presidente de Guinea Ecuatorial, está previsto para el mes de octubre próximo.

Pero, muy especialmente, mi propósito de retornar en libertad a Guinea Ecuatorial, proyecto que comparto con el resto de guineos ecuatorianos en el exilio, supondría definitivamente, para  el dudoso Obiang Nguema, un traspié para su emblemático plan de auto sucesión en el poder, a través de su hijo…

NO PARA EL ODIO.- De nuevo, y cuando parecía que amainaban las turbulentas aguas de odio, persecución, acoso y derribo, que tan agitadas e hirientes se movían en España (2004-2010) contra mi persona; de pronto, la tormenta vuelve a recrudecerse.
Intento refrescar la memoria de los voluntariamente desmemoriados, recordando que mi exilio en España,  que, con breves interrupciones, ha llenado décadas, obedece al propósito de ponerme a salvo del más que seguro destino de muerte violenta que el régimen de Obiang Nguema me tiene reservado. A nadie debiera parecerle extraño que yo, como tantos otros guineo ecuatorianos, busque refugio y asilo en España. (La vedad es que España me concedió el asilo en 1986, en pleno poder socialista de Don Felipe González y con el Partido Popular en la oposición. Y aunque durante ese período, nuestro partido fue objeto del más fuerte apoyo económico -a pesar de los profundos desencuentros que la diferencia ideológica nos producía; le llegada al poder del Partido Popular –serena fusión de Alianza Popular y PDP), las relaciones y el trato al Partido del Progreso por parte del Partido Popular no merecieron menos nuestra profunda satisfacción y agradecimiento.

UN QUINQUENIO DE MUERTE.- El quinquenio 2004-2009, cuando, como en otras ocasiones intenté retomar mi país y retornar al encuentro de mi pueblo y de mi gente, se desataron, de nuevo, en España todas las más violentas  tormentas del Gobierno español contra mí, con evidentes personas puntales, ni más ni menos que eminentes autoridades que llegaron a -yo diría- saltar todas las líneas rojas del trato a un asilado político: Asesinato -en tentativa- en Croacia/ Desposeimiento del status de asilo/ Reclusión en la Cárcel de Navalcarnero/ Retirada de Documento de Viaje/ Prohibición de salir de España/Persecución  a las amistades poderosas / Reducción a la indigencia/Puertas herméticamente cerradas en la Administración/Negativa a renovar mi carnet de identidad español/Despliegue por todo el mundo de la fama de golpista y terrorista /(¡¡Hubo una vicepresidenta que propuso aplicarme la Ley antiterrorista…!!!)/ Uno de los informes al Gobierno para que me quitaran el asilo aducía que yo era un  “¡¡¡Peligro para la Seguridad de España!!!”

No es difícil pensar que, superados los 5 años de un activo terror persecutorio contra mí… el odio y la malquerencia contra mi persona permanezcan en ciertos corazones. El fracaso del plan emblemático de CROACIA supuso un irrepetible punto final a aquel ANTES y un imparable DESPUES que sigue supurando odio contra mí, en una fina línea apenas perceptible que traspasa sutil, pero eficazmente los nuevos tiempos (nuevo gobierno en España.)

OBIANG NGUEMA LOS PAGA...- El hilo de odio y  malquerencia que me acompaña en España, con claros protagonistas y actores visibles e irredentos, tiene como origen y fuente -nadie lo puede negar- a Obiang Nguema Mbasogo, presidente de Guinea Ecuatorial. La proyección y prolongación de este odio y malquerencia que sufro en España, solo es posible -lo sabe todo el mundo- gracias a los amigos, lobbies, asesores, protectores, clubs, M.A.O. y esa gran MAFIA española que ayudó a Obiang a dar el golpe de estado del 3 de agosto de 1979, y siguen ayudándole a dar golpes diarios a los deseos de libertad de Guinea Ecuatorial. Negarme a someterme a las normas de esa “mafia” y, desde luego, no ser uno más en la vorágine de destrucción de mi país, a la que se han sumado tantos otros guineanos, me ha situado en medio de la pinza formada entre Obiang Nguema y sus amigos de la mafia.

“¡España -repite Obiang Nguema- no me puede decir nada; porque les pago yo…!” Una frase contundente, agresiva y desafiante, capaz de asustar, desanimar y desalentar a cualquier guineo ecuatoriano que espere de España, eso… que esperamos los que no formamos parte de los 62 ministros de estado, ministros, ministros delegados, viceministros, secretarios de estado, 99 mas un diputados, decenas de senadores y otros negocios del estado.

No es extraño, a la luz de esta frase, que Obiang Nguema no dude en pedir a un español, una y otra vez  (dos veces, ya) que acabe con Severo Moto…
¿Cómo voy a dudar de la noticia confidencial que me ha llegado de mi compañero, desde Gabón (No puede hacer dicha llamada desde Guinea). Cómo voy a dudar de esta información, sabiendo que se trata de un español, igual que el español que se quedó otros 15 millones de dólares (pagados por Obiang) para el infernal plan de mi asesinato en CROACIA…?
Obiang Nguema –me repiten unos y otros- quiere poner a su hijo en el poder, (posiblemente en octubre, o antes); pero repite insistentemente  que no ve seguro a Teodorín en la presidencia, mientras siga yo en la política y vivo. Cree que Teodorín no va a aguantar mi rivalidad política…

Es de dominio común y de constatación pública el rechazo popular que sufre este plan de evidentes ribetes pueriles, y ese empeño de Obiang Nguema, por moverse como un rey en una República. (Quizás Obiang Nguema se siente monarca parlamentario, en una mimesis alocada y vaga…) No lo sé.

¿HAY UN GATO ENCERRADO…?.- Pero llama la atención el que, mientras, tanto el pueblo global guineano, como la gran comunidad internacional, se niegan a aceptar el plan de Obiang Nguema, su lobby español no parece sentirse  muy alejado de su apoyo. Con Teodorín en la Presidencia de la dictadura, seguro que las cosas se les pondrían muy fáciles para esos lobbies... Sea por la fuerza, o por otras triquiñuelas (¡¡¡nunca por elecciones limpias y democráticas!!!) los socialistas españoles encontrarían fácil acomodo y agujero en la cima de la “nueva” dictadura, para su pieza socialista guineana. ¿Ese es el gato encerrado? Nada tengo que protestar contra ese plan. Yo no tengo capacidad alguna para evitarlo. A no ser que hubiera elecciones limpias y democráticas. El único derecho que tengo y quiero usar es a protestar; porque se me informa que ese plan pasa por liquidar y quitar de en medio a Severo Moto; que soy yo.

Por eso, no he tardado ningún segundo en aparecer, ese viernes, día 13 de Septiembre de 2013, en la Comisaría de Policía de mi lugar, (como me tienen aconsejado) para denunciar -no que Obiang haya dado dinero a un español, como siempre- sino que se lo ha dado, otra vez, para asesinarme y quitarme de en medio.

UNA PINZA MORTAL.- Dije un día, en España, con todos mis respetos, que no soy socialista; dije otro día en Guinea Ecuatorial que no soy dictador; y quedé atrapado en una pinza.

Tengo una salida muy difícil, de esa pinza. Busco mi solución en la resistencia y en la tozuda búsqueda del camino hacia el encuentro con mi pueblo y mi país.

A nadie le debería parecer anormal que para conseguir tan noble objetivo guarde mis esperanzas en los cambios que se han producido en España.

Severo-Matías MOTO NSA.