lunes, 11 de marzo de 2013

GUINEA ECUATORIAL: “HAY ESPERANZAS”

Por Amalio Alfredo Buaki Botuy, Presidente de la Diáspora del Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial.
Después de la horrorosas y despreciables respuestas en la entrevista realizada por Stepehen Sacker, periodista de la BBC de Londres, al Presidente Obiang, donde en el transcurso de la misma, solo pude avergonzarme del trato despectivo que este dictador -que parece ajeno al sufrimiento del pueblo de Guinea Ecuatorial-, daba a los guineanos. Su inseguridad ante las cámaras, su nerviosismo y, no digamos, su lejanía con la realidad y verdad de Guinea Ecuatorial, con la que nunca ha contado, sobre todo, desde su Golpe de Estado, solo me queda la esperanza y satisfacción de que estamos ante un ciclo agotado.

Tras el bochorno internacional provocado por el Presidente Obiang ante las cámaras de la BBC de Londres, me encuentro con un artículo en Internet, firmado por un joven llamado Fernando Abaga; artículo muy largo, pero sin desperdicio alguno. A medida que se iba alargando, yo seguía leyéndolo con mas entusiasmo, porque la exposición me atraía y, lejos de desanimarme por la lectura, me animaba a llegar hasta el final. Es como cuando leemos una novela best seller. Cada vez quería continuar para ver donde llegaba este pensamiento de Fernando Abaga que,  a medida que avanzaba, me parecía más profundo y bien articulado.
Fernando, para mí este artículo tuyo y nuestro, me da esperanzas de que,.. “ we can…”. Tu relativa juventud y tu pensamiento profundo, me ayudan a pensar  que no toda la juventud de Guinea Ecuatorial está perdida.  Está claro que tenemos pueblo porque, cuando hay jóvenes que piensan como tú, es que el pueblo no está muerto todavía: nuestro pueblo, el de Guinea Ecuatorial,  aun vive. 
Sr. Abaga, su artículo ha reforzado mis viejas esperanzas de llegar a la tierra prometida y me ha ayudado a darme cuenta de que tenemos recambios, que contamos con gente preparada, vigilantes y testigos de todo lo que está ocurriendo; que se dan cuenta de quienes trabajan para redimir la desastrosa situación del pueblo de Guinea y quiénes no. Muchos de vosotros, igual que nosotros, los que peinamos canas, por vuestro propio esfuerzo y tenacidad, os habéis salvado de vuestro fatal destino: de las garras del malévolo Obiang, esto es loable.  
No cejaremos en el empeño de denunciar a nuestro verdugo ante la opinión pública internacional, por los atropellos que está perpetrando día a día contra el noble y desarmado pueblo de Guinea Ecuatorial. Un verdugo apenas entrenado en las artes de la guerra, que desperdició la oportunidad de hacerlo en la Academia Militar de Zaragoza (España), donde solo aprendió a maltratar a su propio pueblo, si es que en realidad este es su  pueblo; porque existen dudas razonable de que lo sea. A sus actos de brutalidad y barbarie contra este, me remito.
Como colofón de este artículo, quiero decir, que el día 24 de febrero del año en curso, en el acto de celebración del 30º Aniversario del Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial, tuve una agradable conversación de pasillo con un joven guineano cuya severidad con el tratamiento de la situación política de nuestro país, aún aumentaba más mis esperanzas de acabar con la dictadura: ¡¡¡ sí podemos ¡¡¡
A los compañeros sexagenarios les digo, "hagamos bien el trabajo, que la sucesión está garantizada", cosa que no puede decir el usurpador. Él no tiene garantizada su sucesión, pero sí el pueblo de Guinea.
Ahora  solo me queda decir: ¡¡¡Presidente Obiang, se honesto aunque sea por un solo día de su vida y RETIRESE ¡¡¡...¡¡¡ VAYASE Y DEJE EN PAZ A LOS GUINEANOS, QUE NI TE QUIEREN, NI TE HAN QUERIDO ¡¡¡. TU SABES QUE ESTÁS AHÍ POR LA FUERZA DE LAS PODRIDAS ARMAS.