viernes, 26 de octubre de 2012

OBIANG INAUGURA UNA NUEVA ERA DE TERROR

                                                
Exilio en España, 26 de Octubre del 2012. Ayer irrumpió con gran fuerza entre los medios guineanos, la notica de la detención y tortura -hasta quedar en coma- de un cabo primero del el ejército guineano, por habérsele encontrado una pistola no reglamentaria. Al parecer y citamos textualmente la nota de los medios, "le están presionando para que diga que compró el arma para preparar un golpe de Estado organizado por Severo Moto". De nuevo el viejo y pérfido dictador utiliza la misma  táctica de siempre: acusar de trafico de armas e intento de golpe de estado a  su  temido  y  más  consistente rival político, Don Severo Moto.

El último infundio de tráfico de armas contra Don Severo, -el hallazgo de dos pistolas y un CETME inservible- metidos "por no sabemos quién" en el maletero de un choche desguazado en el puerto de Sagunto, con destino a Saturnino Mbomío Nkono, un chatarrero del Parido del Progreso- Obiang contó con la ayuda inestimable de sus muchos apoyos españoles y este episodio se saldó con la tortura y muerte de nuestro compañero Saturnino a manos de la policía del régimen, con la detención y encarcelamiento en Black Beach de varios militantes del Partido del Progreso y finalmente, con la reclusión en la cárcel de Navalcarnero de Don Severo Moto, durante cuatro meses y cuatro días, una fianza de 10.000 € y la retira e su pasaporte. 

El aparato de la dictadura, totalmente dividido por el asunto Teodorín e incapaz de contener la presión a la que está siendo sometido por las grandes potencias occidentales, ha decidido iniciar una peligrosa y sangrienta huida hacia adelante. En esta desesperada ofensiva, está multiplicando las detenciones y torturas de todos aquellos, que de alguna forma se han enfrentado a la ditadura. Para ello no está dudando en poner en marcha la detención arbitraria y la tortura -hasta la muerte- de inocentes para obligarles a pronunciar las palabras inculpatorias sobre sus enemigos, que Obiang desea oír. Está bastante claro, a estas alturas, que Don Severo Moto ha sido el único rival al que no ha podido doblegar y por ese motivo, destruirle  se ha convertido para el en una auténtica obsesión. 

Estamos convencidos que con esta nueva acción incriminatoria contra el líder del Partido del Progreso, Obiang no va a poder cosechar los frutos deseados, porque el mundo entero está conociendo la auténtica condición de asesino y ladrón de este dictador. Por otro parte, la gente ya no se cree los infundios contra Don Severo Moto, por muchos apoyos  -bien pagados- con los que cuente el dictador. Todos hemos sido testigos de la trayectoria de lucha y de resistencia contra este régimen que Don Severo Moto ha venido protagonizando. También somos conscientes del precio que ha tenido que pagar con ello: toda una vida en el exilio, soportando duras circunstancias económicas, perseguido permanentemente por el dictador y por los que se aprovechan de el. 

En la época en la que Obiang y su régimen recibían todo tipo de bendiciones entre las cancillerías y contaba con grandes apoyos en España -prensa incluida- Don Severo Moto era considerado como el golpista y Obiang como el amigo y hombre de estado. Un mundo al revés, en el que los villanos son considerados héroes y los héroes villanos. Afortunadamente las cosas han ido a su sitio y al Presidente del Partido del Progreso le ha sido reconocida su trayectoria de lucha democrática contra el régimen y considerado como el único capaz de llevar la libertad y la democracia al pueblo guineano.