Juan Cuevas. Exilio seis de Septiembre del 2011. Los opositores al régimen de Gadafi, las "ratas", ya han tomado el poder en Libia. La caída del dictador libio nos ha venido a demostrar, que paradógicamente, aquellos que se han declarado enemigos encarnizados de los dictadores, y que durante mucho tiempo han sido fuertemente vilipendiados por estos, hasta relegarlos a la condición de ratas, se han convertido en los auténticos salvadores de la libertad y de la democracia en sus respectivos pueblos.
A este blog de libertad, están llegando testimonios de militantes del Partido del Progreso que en el interior de Guinea Euatorial viven relegados, perseguidos y amedrentados por el régimen de Teodoro Obiang Nguema. Es cierto, desde que el Partido del Progreso prendiera en la sociedad guineana, hasta convertirse en el auténtico horizonte de libertad para aquel pueblo atenazado por la dictadura, el Dictador Obiang no ha cejado en su persecución. En la represión de Obiang sobre su pueblo, este partido se ha llevado la peor parte: asesinatos, como el de Saturnino Mbomio ( torturado en la cárcel en marzo del 2008, por el falso affair de trafico de armas en el que implicaron a D. Severo ), o el de Matías Mba Mba (envenenado con cianuro en 1997), o Santiago Nzsamyo (asesinado a machetazos por un militante del PDGE en Cogo,1994), Germán Ntugu, tirado vivo al mar desde el barco Mangue Elá....... Además, han sido un gran número los militantes del PP encarcelados por Obiang (incluido su Presidente, D. Severo Moto). Y por último, miles de represariados políticos, de este Partido, que han tenido que exiliarse a Gabón, Camerúm, Sudamérica y a España, principalmente.
Mientras que los seguidores de Severo Moto, Faustino Ondó, o de algunos otros partidos, auténticos opositores, han sido tratados como a ratas por Obiang; asesinándoles, torturándoles y encarcelándoles; por el contrario, los integrantes de otros partidos (los llamados de la oposición interior), son ascendidos a ministros, se les sienta en la Cámara de Representantes o se les permite realizar sustanciosos negocios en Guinea Ecuatorial. Estos representan, en definitiva, la oposición "normalizada" por Obiang Nguema, la que necesita para que su dictadura no levante tantas sospechas a nivel internacional.
Muchos opositores guineanos y parte de la opinión pública, bien por ignorancia o por mantener algún tipo de interés, siguen pensando que es el propio régimen el que tiene que propiciar la concurrencia de todos los partidos de la oposición, junto con el PDGE de Obiang, en unas elecciones libres. ¡¡No saben hasta que punto es errónea esta aseveración: Jamás un partido como el PDGE, sustento de un régimen como el guineano, puede ser abanderado de la democracia¡¡. Ya lo permitió en las Municipales del 95, y las perdió frente a la POC; como era de esperar, las declaró nulas. Mientras el PDGE, controle el aparato del poder en Guinea Ecuatorial, no se puede concurrir en unas elecciones junto a ellos, pues por muchos observadores internacionales que controlen los comicios, al final, harán trampa para seguir en el poder.
Para que se den las condiciones de libertad y transparencia en unas elecciones, convocadas en Guinea Ecuatorial, ni Obiang (ni Teodorín), pueden estar presentes en estas, ni el PDGE debe estar ostentando el poder. Sólo desde un Gobierno de Transición (de Concentración), se puede instaurar la democracia en este país.
Y no olvidemos, que igual que en Libia, en Guinea Ecuatorial, serán las "ratas" las que devuelvan la libertad y la democracia al pueblo.
