domingo, 15 de mayo de 2011

RETORNO EN LIBERTAD



Nuestros queridos guineanos exiliados, han formado parte, desde hace algún tiempo del
paisanaje y hasta del paisaje de muchos pueblos y ciudades de España. Y siempre nos ha 
sorprendido, al menos a mí, la gran cantidad de cosas que compartimos con ellos: una misma lengua, la misma cultura  y una forma parecida de ver la vida. De los guineanos siempre hemos admirado, su sencillez, su amabilidad y su gran generosidad. 

A veces la gente se pregunta el motivo por el cual más de la mitad de los habitantes de este país tan rico, Guinea Ecuatorial, han tenido que salir fuera de sus fronteras. Hasta hace poco 
tiempo la respuesta a esta pregunta, desde los círculos, llamémosle oficiales, era  que se trataba de opositores, poco menos que violentos (medio terroristas) al  régimen imperante 
en Guinea Ecuatorial. Por suerte, cada vez va calando más entre los españoles, la verdadera 
realidad de ese exilio: han huido de una dictadura asesina, para preservar su libertad o simplemente, para salvar sus vidas.

He tenido la suerte de entrar en contacto con el exilio guineano a través del Partido del Progreso, y esto me ha permitido conocer, de primera mano, la realidad de esta diáspora. Puedo decir que no se trata de unos exiliados políticos  cualesquiera: son, sois, los más dignos representantes de esa población  guineana que no ha querido ser cómplice, de la opresión que está sufriendo su querido pueblo, a manos de ese tirano coronel que les gobierna. Y ese, y sólo ese, es el motivo por el que han tenido que poner tierra de por medio, 
para no dar con sus huesos en las horrendas cárceles guineanas, o aparecer cualquier día muertos en la cuneta de una carretera perdida.

Es cierto que entre los diferentes partidos existe alguna desunión, y que parte de las grandes 
sumas de dinero con las que el Dictador compra voluntades de propios y ajenos, pudo llegar a los bolsillos de algún opositor. O que, las condiciones durísimas  del exilio han favorecido en algún momento, la deserción de algunos. Pero no es menos cierta, su entrega y su lucha para regresar a su pueblo en libertad e instaurar allí  un gobierno libre y democrático.

Cuando contemplamos el tremendo rechazo del pueblo guineano y el repudio de la
Comunidad Internacional, a la tiranía impuesta por Teodoro Obiang  Nguema, vemos que se va acercando el día del reencuentro, de la libertad; del regreso de todos los exiliados y de la liberación de los presos políticos y represariados por el régimen. Todos los exiliados ya están preparados para ese día, deseosos de participar en la democratización de su país, de aportar sus conocimientos y sus vivencias democráticas para beneficio de su país y de sus conciudadanos.

Seguro que este caudal de conocimientos, de práctica democrática y deseos de
reconciliación, supondrán la mejor palanca para poner en marcha la vida institucional y democrática en la futura Guinea Ecuatorial,  libre y próspera. Pero para conseguir estos objetivos deben de cumplirse, inexorablemente, las siguientes premisas:

1º- Libertad de todos los presos políticos y represariados por el régimen.
2º-Retorno en libertad de todos los exiliados.
3º-Legalización de todos los partidos políticos democráticos.
4º-Gobierno de Transición, o de Unidad Nacional para implantar la democracia.

Tunez, Egipto, Costa de Marfil........ Guinea Ecuatorial: el día de la libertad, del regreso y del 
reencuentro. Nuestros queridos guineanos se lo merecen.

Juan Cuevas