UGT y CCOO han solicitado en sendas cartas dirigidas a la ministra de Asuntos Exteriores, 1, y a la ministra de Sanidad, 2, la intervención del 3 ante el Régimen de Obiang en Guinea Ecuatorial, con el fin de evitar que se sigan produciendo en la prisión de Black Beach los abusos inhumanos que se vienen conociendo con la totalidad de la población presa, y la impunidad deleznable con la que se trata, específicamente, a las mujeres presas.


CCOO y UGT exigen la salida inmediata de las mujeres presas en esta prisión y su traslado a instalaciones penitenciarias independientes, destinadas a población presa femenina, asegurando así el cumplimiento del respeto de los derechos humanos, la eliminación de cualquier forma de discriminación contra las mujeres presas y la protección de su dignidad personal y su seguridad durante su estancia en prisión.

Ambos sindicatos recogen, en las cartas remitidas a las Ministras, el relato de los hechos que viene denunciando la oposición democrática a la dictadura de Obiang sobre la situación de las mujeres presas en dicha prisión, donde se encuentran conviviendo con el resto de la población reclusa en el mismo espacio.

El penal de Black Beach, situado en la zona costera de Malabo y construido bajo dominio español en los años cuarenta, alberga población reclusa mezclada, con independencia de su sexo, condición y clasificación penitenciaria. Los informes elaborados por los Relatores de Derechos Humanos de las Naciones Unidas para Guinea Ecuatorial alertan reiteradamente sobre las pésimas condiciones de la prisión, la existencia de torturas y asesinatos en su interior y sobre su calificación, ya que está reconocida como una de las peores cárceles del mundo y es la que tiene peor reputación en el continente africano.

En su reciente y último Informe Anual, 4, en la parte dedicada a la situación de este país, resume: “Guinea Ecuatorial sigue sumida en la corrupción, la pobreza y la represión bajo el liderazgo de Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, que ha presidido el país durante más de 30 años. Los enormes ingresos procedentes del petróleo financian los fastuosos estilos de vida de la pequeña élite que rodea al Presidente, mientras que la mayoría de la población vive en una situación de terrible pobreza. El Gobierno practica regularmente la tortura y la detención arbitraria. También continúan los secuestros en el extranjero de personas consideradas opositoras, a las que mantiene detenidas clandestinamente. Los periodistas, la sociedad civil y los miembros de la oposición política se enfrentan a una dura represión oficial”.

UGT y CCOO manifiestan en dichas cartas que l as condiciones generales en Black Beach continúan siendo “una preocupación para nuestras organizaciones”.

Además, ambos sindicatos expresan su preocupación por la visita a Guinea Ecuatorial de una delegación parlamentaria española encabezada por el Presidente del Congreso de los Diputados, 5, que en el contexto señalado ayuda a encubrir el carácter antidemocrático de las instituciones del régimen de Obiang, y reclaman la implicación del Gobierno Español en la vigilancia y observación continua de las condiciones generales de la citada prisión, el respeto a los derechos humanos y la legalidad internacional en Guinea Ecuatorial.