martes, 29 de junio de 2010

Teodoro Obiang, el demócrata incomprendido



Teodoro Obiang, el demócrata incomprendido


Por Eduardo de la Fuente





El dictador Teodoro Obiang ha vuelto a protagonizar una de sus rocambolescas cacicadas al anunciar un plan de cinco puntos con el que poner al día Guinea Ecuatorial, país que dirige desde 1979 y que ha convertido en coto de caza particular, burdel privado y empresa familiar, todo al tiempo gracias a la tiranía y a la corrupción generalizada. Obiang se ha dejado ver en Ciudad del Cabo, Sudáfrica, para dejar boquiabierto a todo el mundo con sus declaraciones: “No vamos a pedir a los grupos de defensa global que nos critican que miren hacia otro lado, pero pedimos a la comunidad internacional que nos ayuden a ayudarnos a nosotros mismos y a poner en práctica este programa de reformas para que podamos convertirnos en socios de las democracias del mundo”. Traducido al román paladino: “a veces matamos y torturamos pero es que aún somos inexpertos en esto de gobernar un país”. De las numerosas excusas que uno ha leído para justificar una dictadura es ésta una de las más absurdas conocidas.

Los cinco puntos que Obiang dice va a seguir para modernizar y democratizar el país son los siguientes según informa la agencia Afrol News:

“Primero, el gobierno tratará de "garantizar la transparencia y la rendición de cuentas" en el sector petrolero. Guinea Ecuatorial intensificará los esfuerzos para ser socio de la Iniciativa para la Transparencia de las Industrias Extractivas (EITI)*, garantizando así la llegada de inversores en el sector.

En segundo lugar, el gobierno impulsará el actual Fondo de Desarrollo Social, invirtiendo recursos sustanciales de los ingresos de exploración de petróleo y otros recursos naturales en ""nuestros hijos, nuestras escuelas, nuestros maestros, salud, turismo, vivienda, abastecimiento de agua potable, infraestructura, telecomunicaciones, el desarrollo de las ciencias naturales, la creación de empleo y el desarrollo de las instituciones democráticas".

En tercer lugar, una "reforma jurídica integral" con el objetivo de promover los derechos humanos y civiles debía ser ejecutada con la ayuda de la Unión Africana, según anunció el presidente Obiang. El Gobierno también "adoptará medidas de apoyo a la asociación de la prensa libre en Guinea Ecuatorial (ASOPGE) para que pueda actuar con independencia y libertad".

Además, se va a invitar a la Cruz Roja Internacional a "instalar su sede en Guinea Ecuatorial y colaborar en la asistencia en la revisión y evaluación de todas las denuncias de violaciones de derechos humanos en el país. También vamos a solicitar su colaboración en el control de nuestros sistema de justicia penal y en las cárceles para garantizar el trato humano y apropiado para los condenados por delitos", según anunció el presidente.

Por último, el programa de reformas buscará aumentar la protección del medio ambiente. "Seguiremos poniendo en práctica otras medidas de protección ya existentes," dijo el presidente Obiang "tales como la prohibición de la caza de monos en nuestros parques nacionales y bosques"”.

Obiang ha hecho guineano aquello de ganar las elecciones “a la búlgara”, ha expoliado los recursos naturales de Guinea, ha pulverizado todo resto de oposición democrática, ha reprimido a su pueblo y lo que es peor, lo ha hecho con el beneplácito de los países democráticos del norte, sí, nosotros que nos llamamos con orgullo occidentales. La repentina vena democrática de Obiang no es más que otra de sus milongas para embaucar a estúpidos ministros de Asuntos Exteriores y lavar conciencias de los estados ricos que le compran el petróleo y la madera. Fingiendo encabezar una transición democrática conseguirá algunos años más de cobarde crédito en la comunidad internacional que permitirá de forma impune que masacre a los suyos, “¿qué más da si sólo son un puñado de negritos que quieren votar en lugar de cultivar cacao?”, mientras no nos falte combustible barato y buena madera exótica a precio de derribo para la mesa de la cocina. Y lo peor de todo es que aún habrá quien se lo quiera creer. Cómplices somos de mantener en el poder a dictadores como Obiang, seres que en otras circunstancias resultarían ridículos pero que aterran a un país al que deberíamos considerar hermano.


*Guinea Ecuatorial fue expulsada de EITI en abril de 2010 ante la evidente corrupción generalizada en torno a la explotación petrolífera en el país.



Fuente: http://elfarobalear.blogspot.com/2010/06/teodoro-obiang-el-democrata.html