Por fin, ya hacen caso a Obiang Nguema. Tomó el poder por un golpe sangriento de estado, en el que, entre otros, se llevó por delante a su tío MACÍAS NGUEMA, primer dictador de Guinea Ecuatorial. (Ahora los abogados españoles de Obiang Nguema se empeñan en asegurar que lo de “TIO” no es más que una costumbre africana. ¡¡¡La siempre despreciada África!!!
Tan pronto como tomó el poder, sacrificando a su tío Macías Nguema, Obiang Nguema proclamó y viene proclamando siempre que no dejará el poder si no es por un golpe de estado, como lo hizo con su hoy “dudoso” tío Macías Nguema.
Su poder –primero, 11 años a la sombra y protección de su tío Macías, y luego, desde el 3 de agosto de 1.979, tras el golpe de estado, ya en solitario y en posesión del poder absoluto- se ha centrado especialmente en eliminar de su camino a todo rival político, colega militar o intelectual susceptible de oponerse a su régimen y de dificultar o cuestionar intelectualmente su libre juego de dominar a un país atrapado bajo la bota militar, y el miedo a las armas que él protagoniza. (Obiang Nguema Mbasogo, Presidente de la República de Guinea Ecuatorial es, tras sucesivos ascensos por su tío Macías y por sus superiores españoles de Zaragoza, General “español” de Brigada)… Y como Presidente de la República, Comandante en jefe de las Fuerzas Armadas (que, por cierto, a cada nuevo susto, se esconden, todos, como su Comandante, bajo las camas de sus queridas de turno…) dicta y dicta hasta las elecciones presidenciales.
Sin comerlo ni beberlo, Obiang Nguema Mbasogo, al asesinar de un golpe de estado a su tío Macías; habiendo, primero, personalizado, con su familia y allegados, la riqueza de madera, pesca, cacao y otros recursos mineros y naturales del país, abrió paso a la explotación de los yacimientos petrolíferos y gasísticos de Guinea Ecuatorial. (Su tío Macías nunca quiso entrar en ese peligroso, difícil e incontrolable mundo…) se encontró con que le dijeron, y era verdad, que Guinea Ecuatorial podría ser, y era el tercer productor del petróleo de África.
Obiang Nguema Mbasogo, dechado de cicatería económica y avaro profesional, ha hecho de Guinea Ecuatorial, y muy especialmente de su inmensa riqueza de recursos naturales un gueto personal y familiar. Los duchos en el pichinglis guineano suelen preguntar en estos casos “¿EFI NA YÚ?” (¿Y SI FUERAS TÚ?)
De vez en cuando, muy al revés de su tío Macías, que decretó la prohibición de elecciones, durante su presidencia vitalicia, Obiang Nguema juega con Guinea Ecuatorial y con la comunidad internacional, convocando elecciones municipales, legislativas o presidenciales; calificadas, por él, como “Ensayo de democratización a la equatorquineana”. Y muy concretamente, a propósito de las elecciones presidenciales del 29 de Noviembre de 2009, ha aseverado públicamente que se trata de un simpe trámite; pues tenía asegurado, esta vez, el 98% de votos.
Y es que, como siempre, a estas horas del día de reflexión, Obiang Nguema Mbasogo, Presidente de Guinea Ecuatorial, reconocido y presumido dictador, tiene “dictado” a la Junta Electoral Nacional el resultado de estas elecciones presidenciales.
¿Para qué, entonces, tantas televisiones mundiales, periodistas, observadores y tanta parafernalia curiosa.
Hasta el propio Obiang Nguema se ha dado cuenta de que más de un “curioso” va a ver las elecciones para “mentir” luego, y embolsarse unos cuantos miles de Euros o Dólares americanos. Hasta Obiang Nguema Mbasogo se ha cansado de que sigan mintiendo por él, con aquella famosa frase de: “Bueno…No han estado mal las elecciones… Tampoco se puede olvidar que eso es África…” y… ¡a poner el cazo!
Por eso, hasta el propio Obiang Nguema ha negado entradas y visados a periodistas occidentales (españoles) y a viejos observadores de siempre…
Que, como se informa, España no va a enviar observadores a esta pantomima, a esta farsa, a esa burla, a estas fantasmagóricas y fraudulentas “elecciones a la equatorguineana”, empieza a decir mucho, muy mucho de la España democrática. Por fin ya entienden, comprenden y hacen caso a Obiang Nguema, “presumido” dictador. Tambien da la razón a los guineanos que se van a quedar en sus casas sin ir a votar a nada ni a madie. ¡Ánimo! Son pocos y tienen miedo al pueblo en las urnas.
