miércoles, 18 de marzo de 2009

EL TIRANO OBIANG NGUEMA PREPARA LA GUERRA CIVIL EN GUINEA ECUATORIAL.


“¡…Endureceré su corazón…!” (EXODO, 7, 3)



El aún Presidente de Guinea Ecuatorial, Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, proclamado “dios” de Guinea Ecuatorial por sus medios de comunicación oficiales, convocó una reunión urgente, con especial asistencia de los mayores, los grupos de su apoyo y protección (brujos y marabúes) y otros sectores sociales influyentes. La reunión tuvo lugar el pasado lunes, día 16 de de Marzo y tuvo como asunto particular y único, comunicar a los reunidos la decisión del tirano de obligar a todo el pueblo guineano a “aprender a ser militar”.


Obiang Nguema advirtió a los reunidos sobre los graves problemas de desestabilización, inseguridad y miedo que están afectando no solo a su persona sino especialmente a todo su entorno y apoyos incondicionales. Hizo especial referencia a los ataques que en los últimos meses y días viene sufriendo tanto las instituciones bancarias como sus palacios y residencias; lo cual le ha obligado a abandonar la capital para trasladarse a la Región continental, llevándose a los Ministros más importantes y refugiándose materialmente(al más puro estilo de su antecesor, Macías) en su reducto de Mongomo (Koeté); pueblo pegado a la frontera con la República Gabonesa, y desde donde Obiang Nguema se comunica con su pueblo gabonés de origen (Oyem) a través de un túnel subterráneo.


Fuentes asistentes a la reunión, aseguran que Obiang Nguema ha hecho ver a los reunidos que deben prepararse militarmente para responder a una invasión del país y para defender a Guinea Ecuatorial, advirtiendo, como siempre que “las balas de la guerra no respetan a nadie”.


“Lo que se ve es que nos quiere trasladar el miedo que tiene; y sobre todo, quiere que todos muramos con él”-comentan algunos, llenos de miedo y enfado.


En cualquier momento la población guineana puede verse obligada a realizar ejercicios militares y de entrenamiento o preparación para tomar las armas y luchar “no sabemos contra quién” -dicen algunos asistentes a la reunión-.


Conviene poner a la luz los múltiples rumores, informaciones y noticias más o menos confidenciales que rodean al tirano de Guinea Ecuatorial, Obiang Nguema Mbasogo y que, por más cleptocrático que sea el modelo de dirección y “gobierno” que ha implantado en el país, difícilmente pueden mantenerse en secreto. Entre otras razones, porque ni el entorno más cercano o íntimo del tirano se siente seguro o suficientemente fiel a él; y todos miran, desde el cerco en que se ven atados, hacia afuera del círculo, buscando soluciones de futuro.


Se sabe, desde hace meses, e incluso años, que al igual que el grueso de la población guineana ha vuelto las espaldas al tirano Obiang Nguema y solo viven del miedo que le tienen, también la comunidad internacional se ha cansado de los cuidados, protección y apoyo que (a pesar de conocerlo bien) venían prodigándole. Por más que se quiera hacer a escondidas es de conocimiento de casi todos que algunas potencias importantes del mundo le vienen proponiendo, insinuando y hasta obligando a abandonar el poder. Hasta ha salido a la luz una más de las reiteradas invitaciones de su esposa Constancia, paraqué abandonen el poder y vayan a disfrutar del cúmulo de dinero robado al pueblo guineano a lo largo de 40 años de tiranía (invitaciones que le han costado a Constancia más de una sonora bofetada y alguna separación momentánea)


Obiang Nguema Mbasogo nunca aceptará abandonar el poder tiránico que viene ejerciendo y desarrollando en Guinea Ecuatorial. Por múltiples y sobradas razones obvias.


1.- ¿Cómo abandonar la infecta pocilga de dinero, riquezas, bienes mal adquiridos y posesiones, arrebatados, robados y secuestrados al pueblo guineano? Pocilga en la que se revuelca él en compañía de tantos y tan pintorescos compañeros de dentro y fuera. Obiang Nguema está atrapado en su propia pocilga de corrupción. Abandonar el poder por las buenas, por su propia voluntad, supondría, o abandonar, o llevarse consigo a tantos y tantos “chupópteros” que le rodean como abejas amorradas a un panal de rica miel.


2.- Como militar salido de la Academia Militar de Zaragoza, donde disfrutó, entre otras cosas, de mujeres y juergas , Obiang Nguema cree que como “soldado español” (que se confiesa), tiene la obligación de “morir con las botas puestas”. Los cordones y maromas de corrupción y maldades que, en 40 años ha prodigado en Guinea Ecuatorial, le atan de tal modo que ya no sabría desatarse esas botas.


3.- Obiang Nguema, quien en 40 años de independencia (antes, con su tío Macías; luego, solo) ha tratado al pueblo guineano –desde Mongomo hasta Annobón, en círculo, en vertical y en horizontal- como un pérfido guardia colonial de los peores tiempos de la esclavitud y colonización españolas, sabe perfectamente lo que sucede siempre con ese tipo de guardias coloniales, a la hora de abandonar o ser expulsados de las filas, e intentar luego, encontrar acogida en el pueblo que maltrataron. El pueblo los suele mirar como una peste, como auténticos leprosos y les niegan hasta el saludo.


4.- Obiang Nguema Mbasogo conoce perfectamente el trato que los “grandes amigos” de ahora suelen dispensar a las autoridades “equatorguineanas” en cuanto abandonan sus cargos. La historia se repite y se repetirá. Obiang Nguema Mbasogo será, muy seguro, tirado como una colilla cuando ya no sea Presidente . No creo que la Academia militar de Zaragoza le ofrezca la oportunidad de reciclarse; ni la Salle en cuyo Centro Laboral de Bata repartió coscorrones a mansalva como “Monitor Manding” y estrenó a una y otra virgen de entre las niñas del Colegio de Monjas, se ofrecerán a darle cobijo en España, si decide abandonar el poder.


5.- Armengol Ondo Nguema, todopoderoso hermano de Obiang Nguema, extraído por este de las espesuras de la selva (lanza, perro, machete y puercoespines…) y aupado en el puesto de máximo custodio de la seguridad nacional de Obiang Nguema, mantiene una teoría y una decisión: “Si vienen, ya nos encontrarán aquí; pero nosotros no vamos a ir… ¿A dónde?”. Se refiere a los que van a venir a quitarlos del poder. Y reconoce que ni son capaces de defenderse, ni sabrían a donde ir.


6.- Hay quien dice que la más poderosa razón para que Obiang no abandone el poder, es, más que la imposibilidad de seguir robando y acaparándose de todo en otro lugar del mundo como en Guinea Ecuatorial; es, sobre todo, que nunca encontrará un lugar en el mundo donde pueda usar tan libremente de las mujeres, con su bálano presidencial, como en Guinea Ecuatorial.


7.- Lo que peor le sienta al tirano Obiang Nguema es recibir de un pariente, de un amigo o de un país o potencia mundial, la invitación a abandonar el poder y marcharse, antes de que le ocurra algo peor. Lo que espera de sus parientes, amigos y potencias, es la seguridad de que nadie le va a echar del poder, contando con tantos parientes, amigos y potencias que están “comiendo” de su mano, como presidente. “¿A caso solo yo como? ¿Vosotros no coméis?” “Awuara me queréis dejar solo a mí, ¿no?” Y todo aquel que habiéndose pringado con la peste de la corrupción, pretenda o salvarse solo o aconsejar a Obiang Nguema, queda condenado a la eterna enemistad.


8.- La tragedia se multiplica, cuando un Obiang Nguema herido de muerte, por los múltiples signos de abandono de sus amigos, familiares y de potencias mundiales, se revuelve y decide llevarlos a todos por delante. Nadie que haya mamado de la corrupción y la desviación moral implantada por Obiang Nguema en Guinea Ecuatorial, debería quedar inmune, impune, “vivito y coleando”, después de que haya desparecido el “jefe”. Mejor, o se van todos antes que él, o todos juntos y a la vez se hunden en la desgracia. La invitación que viene haciendo últimamente a los que llama suyos, “oriundos de Mongomo” esparcidos en el exilio y la diáspora, se anuncia con la apariencia de defenderse todos juntos contra “los que van a venir”. La realidad es que Obiang no quiere, ni marcharse, ni morir solo.


9.- El asunto se eleva a niveles de perfidia, de plan inspirado por Satanás y de prueba final del carácter inhumano y cruel que se viene denunciando de Obiang, cuando el tirano ya no se basta con llevarse por delante o morir con “los suyos”; sino que ahora pretende llevarse por delante a todo el pueblo guineano empujándolo a la guerra. La guerra, evidentemente será civil; puesto que en la retaguardia estará Obiang Nguema y “los suyos” (escondidos como siempre. “¡¡¡Los generales no van a la guerra…!!!”) Mientras el resto de la población, incluso con armas (los Ministros van patrullando las calles con AK 47) pero sin balas, serán empujados a ser carne de cañón y barreras humanas, para parar con sus cuerpos reventados las balas de “los suyos”, los verdaderos de Obiang.


10.- Obiang Nguema Mbasogo, Presidente de Guinea Ecuatorial y factótum de las tragedias de ese país africano, no abandonará, (nunca) el poder, por simples insinuaciones, recomendaciones, amenazas, ultimátum y paños tibios o calientes. Muchísimo menos por negociaciones con no se sabe quién...


NOTA: Este comentario se hace a las puertas de la Semana Santa; cuando la Santa Biblia parece proyectar con más esplendor sus eternos mensajes, ejemplos y experiencias. Y, en medio de nuestras lecturas de la Santa Biblia, surge con fuerza la figura del Faraón de Egipto. Y la voz penetrante del Señor, refiriéndose al tirano Faraón: “¡…ENDURECERÉ SU CORAZÓN…!” (Éxodo, 7-3)


El pueblo guineo ecuatoriano, tan cristiano y católico siempre, tiene en el Libro del Éxodo de la Santa Biblia una lectura para esta Semana Santa. Nunca (mejor, siempre) como ahora habría que leer el “Éxodo” como una auténtica ORACION para la LIBERTAD.