martes, 20 de mayo de 2008

Esperando el Dia "D" y la hora "H"


Todo está preparado para el gran día. Durante este fin de semana se ha producido uno de esos encuentros que ponen los pelos de punta, sobre todo a los enemigos de la democracia y la justicia para Guinea Ecuatorial.

A lo largo de dos días se han desarrollado unas jornadas de trabajo que no las emula ni todos los partidos del exilio exterior junto a los del interior sumando hasta los niños, familiares y conocidos. Severo Moto, desde la cárcel, sigue aglutinando un grupo, cada vez más compacto, que es la joya de la corona de la disidencia guineana.

En las jornadas de trabajo, dirigidas con pulcritud y mucho oficio por el Vicepresidente del Gobierno en el exilio y lugarteniente de Moto, Armengol Engonga, se destacó el esfuerzo y el ejemplo que está dando el Presidente Severo moto, con su encarcelamiento político en España. Episodios como este, dijo Engonga, empeñaran las futuras relaciones y tendremos que hacer un esfuerzo muy importante para superar todo el dolor que estos grupos nos han inflingido a lo largo de este tedioso y duro exilio.

Algunos guineanos mostraron su satisfacción con España, no por su clase política, más cerca de la rapiña que de la solidaridad; sino con los voluntarios blancos que están trabajando codo con codo con los exiliados y preparando documentos y protocolos de actuación que serán de extremado valor a la hora de ponerlos en marcha.

Armengol Engonga y Pablo Esema, llevaron con oficio unas jornadas de trabajo en las que faltaba Severo Moto pero en las que su ejemplo se imponía. Los distintos ponentes llamaron la atención sobre el esfuerzo que se está haciendo para llevar al país a una democracia. Armengol Engonga dijo que se ha vertido mucha sangre, hay quién ha pagado con su vida la oposición al sátrapa Obiang; hay familias destrozadas, hijos sin padres y muchos presos e incluso desaparecidos que no son otra cosa que la semilla de la libertad. Engonga dijo que “olvidarlos es escupir en la cara a nuestros hijos”. Todos los presentes tienen muy claro que los exiliados que sufren persecución o que los que han sido victimas de crímenes por parte de la dictadura no serán olvidados. Una de las ponencias, en las que se trabajó junto a expertos extranjeros, versaba sobre la protección social y económica de los que han sufrido la violencia del régimen en cualquiera de sus acepciones.

Entre los dirigentes del exilio existe mucha sensibilidad para con los que resisten en el interior del país los envites del dictador. Armengol Engonga afirmó que sin ellos, sin su sufrimiento, esta lucha sería inútil.

En los corrillos que se producían entre debate y debate, salían nombres de políticos y empresarios españoles y extranjeros… “¿Qué cara pondrá Fernández Marugán cuando gane Moto las elecciones?” y se escuchaban las risas en toda la sala y otro decía “pues la que se le va a poner al pálido de Arístegui” …jajajaja Ya en serio, existe una gran sensibilidad para denunciar todo el mal que se le ha hecho al pueblo de Guinea Ecuatorial en los últimos treinta años y un dirigente juvenil lo explicaba con meridiana claridad: “Son depredadores de seres humanos y hoy lo han hecho con Guinea Ecuatorial pero antes lo hicieron con el Sahara o con el Irak de Sadam Hussein… esta gente no tiene escrúpulos y son lo peor de la raza humana. Ellos alimentan a los dictadores y tiranos y estos les pagan con el dinero que les roban a los niños, a los enfermos del sida o a las mujeres solas y maltratadas… No tienen vergüenza y como los torturadores, maltratadores o violadores tienen que estar en una lista, expuestos públicamente. No por llevar una corbata y un traje de marca se es menos hijo de puta”, decía el joven activista.

El sacrificio de Moto no está siendo en vano y son muchas las acciones políticas que se están desarrollando a la sombra de su cautiverio. Sus correligionarios consideran el encarcelamiento de Moto como el de un preso político en la España democrática. Una vergüenza y una tremenda barbaridad que ha dolido mucho en el exilio guineano.