Por Armengol Engonga Ondo. Presidente del Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial
Cuando está a punto de expirar el año 2024, un año intenso y apasionante lleno de acontecimientos, no podemos evitar reflexionar sobre la esperanza que habíamos depositado para el cambio político en Guinea Ecuatorial. Durante este periodo, muchos confiamos en que se daría el tan ansiado desenlace: la abdicación o renuncia del dictador Teodoro Obiang y de toda su extensa familia. Contábamos con información fundada que apuntaba hacia ese destino, lo que alimentó nuestro sueño de regresar en libertad a nuestro querido país, reunirnos con nuestros seres queridos y, junto a otros líderes políticos prodemocráticos, iniciar la necesaria transición política. Sin embargo, ese momento histórico no se ha materializado este año, y aunque se pospone, seguimos firmes en nuestra determinación de alcanzarlo pronto.
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En este año que termina, hemos desplegado una
actividad política extraordinaria desde el seno del equipo directivo del
Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial, un equipo de primer nivel que me
enorgullece dirigir. Hemos trabajado incansablemente en el diseño de programas
políticos, económicos y sociales, así como en las medidas de choque necesarias
para revertir el socavón y el desbarajuste que el régimen de Teodoro Obiang, su
familia y su camarilla dejarán en nuestro país. Este grupo ha saqueado las arcas
del Estado con avaricia desmedida, privando a la población de servicios
esenciales como la sanidad, la educación y las infraestructuras que deberían
ser garantizados por el Estado. A pesar de las dificultades, estoy
profundamente orgulloso de mis compañeros y colaboradores, cuyo compromiso
inquebrantable nos impulsa a seguir adelante.
Este compromiso, que asumí en primera persona
hace ya muchos años, está dirigido a todo el pueblo guineano: hombres, mujeres,
jóvenes y ancianos. Nuestra misión es clara: llevar la democracia, las
libertades individuales y colectivas, la igualdad, el progreso y el Estado de
derecho a Guinea Ecuatorial. Me comprometo públicamente a trabajar
incansablemente por este objetivo, y mi trayectoria personal avala mi palabra.
Aquellos que me conocen, tanto en Guinea Ecuatorial como en España y fuera de
ella, pueden dar fe de que cumplo lo que prometo.
Entre los acontecimientos destacados de este
año, merece especial mención el cambio político en nuestro vecino Gabón, donde
se ha aprobado una nueva Constitución que prohíbe que los hijos del presidente
o su cónyuge puedan sucederle en el cargo. Además, el gobierno de transición,
liderado por Olegui, ha utilizado los fondos incautados a los miembros del
régimen de los Bongo para invertir en infraestructuras como carreteras,
transporte ferroviario y planes de becas. Estos avances nos inspiran y
reafirman nuestra convicción de que un futuro mejor también es posible para
Guinea Ecuatorial.
Asimismo, la reciente caída del dictador sirio
Bashar al-Ásad ha sido un acontecimiento de gran impacto, que ha llenado de
alegría a los defensores de la democracia y ha generado una comprensible
preocupación entre dictadores como Teodoro Obiang. Observamos con interés y
esperanza los cambios en el panorama político internacional, convencidos de que
también se avecinan vientos de cambio para nuestra nación.
En Guinea Ecuatorial, los signos del deterioro
del régimen son cada vez más evidentes. La reciente aparición pública de Obiang
en la última reunión de la CEMAC en Camerún mostró a un anciano con evidentes
dificultades para caminar y mantenerse erguido. Su caída del poder es
inevitable, y el cambio político que todos ansiamos se aproxima con paso firme.
Este año también hemos fortalecido nuestra
colaboración con otras formaciones políticas de la oposición guineana, como
Ciudadanos por la Innovación (CI) y Unión Popular (UP). Además, seguimos
trabajando con gobiernos democráticos e instituciones internacionales, aliados
imprescindibles para lograr el cambio político en nuestro país.
A pesar de los retos, mantenemos viva la
esperanza y renovamos nuestro compromiso con el pueblo guineano. Desde el
Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial, enviamos nuestros mejores deseos
para esta Navidad y para un próspero año 2025. Que el nuevo año nos acerque a
la democracia, la justicia y la libertad que todos merecemos.
¡Feliz Navidad y próspero año nuevo a todos
nuestros paisanos!
