lunes, 21 de noviembre de 2022

LA OPOSICION Y EL DIA DESPUES


Los actores y las circunstancias que rodean nuestra actividad política tienen mucho que ver con su proceso. Pueden o no condicionar aspectos del mismo, pero la esencia de tu impronta, la dibujas en tu día a día. La preocupación por el qué pasará cuando yo ya no esté, no deja de ser la raíz de un orgullo que orienta hacia el buen hacer, pero otros simplemente se atrincheran en conceptos como que, me da igual lo que digan después, no me importa si total, ya no estaré aquí. Estas y otras frases son en el fondo, las que anidan en mentes no sólo cobardes, sino opacas. Nadie pasa desapercibido en este mundo tan exigente como escrutante

La vida nos hace pagar de manera activa o pasiva, determinados hechos de aquellos que se libran de sus fechorías por cualquier circunstancia o por caerse en desgracia dejando este mundo. Tratar de imitar a la dictadura desde la oposición, es sin duda el presagio del plan que encierra un proyecto político. En el Partido del Progreso estamos instruidos a no imitar a los malos aun cuando los conceptos de su gestión política estuviesen meticulosamente emplazados con eufemismos como maquinaria para el engaño. Creemos que todos los guineanos somos iguales, siquiera cuando algunos se empeñan en repartir carnets de guineanos segregándonos en malos y buenos. En altos y bajos. En mejores y peores. Desde el Partido del Progreso creemos, que nos merecemos el respeto que la dictadura nos ha arrebatado desde hace demasiados años. En estos momentos y ahora más, nos hemos esforzado en construir un camino lo más alejado de cualquier premisa que nos pudiese asemejar a la dictadura. 

Las elecciones se han celebrado como era previsible, con el mismo dinamismo de siempre, para incidir en la tortura, en la flagelación a un pueblo indefenso, con los resultados conocidos de ante mano. No espero que nos den lecciones de ética cuestionando de por si sabíamos ya la mayoría de los guineanos, cuáles serían los resultados; no. Aunque sólo sea por la reiteración evidente, es decir, la repetición constante de un hecho, deducimos que no puede ser fruto de casualidad, sabíamos qué iba a pasar. 


En estas elecciones adulteradas desde el primer momento, el dictador, una vez más, ha querido a abrillantar tras décadas, el verdadero yo que con vileza trata de disimular para seguir ganando los corazones de aquellos que no quieren ver lo existente, aquellos que padecen esa especie de amnesia o simplemente una ceguera invencible. La dictadura ha celebrado las elecciones con nuestros compatriotas aglutinados en las cárceles, con opositores detenidos y otros desaparecidos, con esos antecedentes, se hace patente su personalidad ya conocida por todos, pero, aquellos que, a base de justificar posturas le han acompañado, cuál es su paradigma frente a nuestro pueblo.  

Nuestro sendero político ha sido el cauce que nos ha traído hasta esta parte de la orilla política para efectuar un desembarco con garantías. Los objetivos de nuestro proyecto político están muy bien enmarcados lo cual indica que los años de espera no han sido estériles, hemos sabido calcular los tiempos y estudiar las circunstancias en cada momento. Guinea somos todos, los buenos y los malos. No dejan de ser guineanos los que nos han convertido en desgraciados, en su conciencia está el veredicto aun cuando no sean otros los que se pronuncien a favor o en contra de sus acciones. En el Partido del Progreso hemos sabido esperar con o sin aciertos, pero resistir las embestidas de la dictadura y saber dar la respuesta más oportuna en cada momento.  La dictadura no se ha marchado, nada tampoco certifica que lo vaya a hacer en los próximos días, pero nuestra formación política es consciente del escenario en el que se ha situado ahora la partida y por ello, tenemos las fichas preparadas para el día después. 

Entendemos que la retórica del post Obiang no podría ser el qué hacemos ahora, nuestra constancia, el deber de continuar aun cuando nos hayamos sentido como abandonados por todos, siempre ha sido la esperanza, convencidos de que, en algún momento, estaríamos en disposición de poner en escena el trabajo de todos estos años. Hemos sido como todos, los primeros en fiscalizar y criticar las incomprensibles maneras de gobernar de la dictadura de Guinea que, por otro lado, es fruto de la incompetencia, pero no por eso hemos descuidado el deber de seguir anotando día a día los aspectos negativos que afectan a nuestro pueblo, a fin de estar preparados a la hora de ofrecer una alternativa real a nuestra gente, cuando fuese necesaria. Preparados para entrar en el juego, el tablero en esta “partida de ajedrez” está ya listo, y nosotros entramos en ella porque nos sentimos confiados para aceptar el reto. No podemos perder en esta partida, por entender la diferencia entre el juego y la vida real. Y es que, en la vida real, el juego sigue tras el (HACKE MATE) GAME OVER.  

 

 

Luciano Ndong Esono Oyana. 

Presidente del Consejo Geográfico del Reino Unido. LONDRES.