sábado, 16 de abril de 2022

LA MALA HERENCIA COMUNISTA EN AFRICA.


Por Manuel Bang Mba Okomo, Secretario de Comunicación y de Relaciones Exteriores del Partido del Progreso.

Durante la Conferencia de Argel, los delegados de los países del Bloque del Este con el enviado de Moscú a la cabeza, echaron el resto para seducir a los líderes de los movimientos independentistas Africanos presentes en dicha conferencia, donde el debate de fondo no solo era el de poner fin a sistemas coloniales que entonces regían en casi todo el continente Africano, sino que estaba en juego el modelo social para alcanzar el desarrollo y el progreso de los países Africanos, nada más liberarse de sus antiguas metrópolis. Además, se planteaban en esa conferencia dos opciones para los países aspirantes a alcanzar las independencias, que respondían a dos modelos distintos, el primero de ellos era la ruptura total con la metrópolis para hacerse independientes y soberanos, la segunda, pactar una independencia asociada con las metrópolis.
Esta segunda opción, era la políticamente incorrecta y fueron muy pocos líderes africanos los que tuvieron el coraje de plantear esa opción y con argumentos sólidos, que en el caso de nuestro delegado, 
Don Bonifacio Ondo Edu, tuvo el valor y el coraje de defender esa opción que le costó tener que pasar por uno de los peores momentos que un representante público debe pasar, donde se le tachó de títere del colonialismo y hasta enemigo de la liberación de los pueblos Africanos y a pesar de lo que tuvo que soportar pudo argumentar que lo que le movía era el intereses general de Guinea, que necesitaba tiempo para alcanzar la independencia total, como paso para llegar a la ruptura con la metrópoli. Argumentaba que había que prepararse para formar a sus cuadros técnicos en todas las competencias sociales para que el país no se quedara sin gente capacitada para dirigirle. Esa visión futurista fue muy mal vista y denostada, hasta se la tomó como modelo de lo que no debía hacer ningún país aspirante a conseguir la independencia y todo porque la URSS querían suceder en influencia al vacío que iban a dejar en Africa las metrópolis occidentales. Este cambio de unos por otros fue un auténtico desastre, que causó un baño de sangre innecesario y hasta previsible y una pérdida económica de grandes consecuencias, que no han sido para nada evaluadas hasta el día de hoy. Muchos líderes se precipitaron o los sedujeron a cambiar un modelo por otro y las consecuencias de esas decisiones las estamos pagando todavía en Africa. 
Antes de la conferencia de Argel, los líderes Africanos ya habían empezado a trabajar muy duro para liberar a sus países para  alcanzar sus independencias. Cada país tuvo su historia y su suerte como en el caso del Congo Belga, donde el primer ministro y sus dos estrechos colaboradores corrieron la peor suerte al ser asesinados víctimas de una conspiración internacional cuyo origen estaba en la guerra fría que nació después de la Segunda Guerra Mundial donde el mundo se quedó dividido en dos bloques. Lumumba para demonizarle le tildaron de Comunista, extremo que siempre que tuvo ocasión rechazó, porque lo que sentía de verdad era una profunda admiración y simpatía intelectual con uno de los líderes de la revolución soviética,  Leon Troski, el fundador del ejército rojo. Cuando este fue purgado por Stalin, Lumumba fue ignorado también, pero cayó en desgracia acusado injustamente de simpatizante comunista que cuando le destituyen Moscú le ignoró también a él y a sus dos colaboradores: Upolo y Ukito, que todos corrieron la misma suerte. Nunca se ha rentabilizado la lucha, el valor y el coraje que tuvo Lumumba. 
Desde Moscú practicaron un oportunismo político con muchos líderes africanos independentistas, denostándoles o ensalzando sus figuras cuando les convenía hacerlo. 
Con el modelo rupturista que dejaron caer en la conferencia de Argel,  condicionaron la independencia de Guinea Ecuatorial desde el día 12 de octubre de 1968, que abocaron al país a desaprovechar completamente lo que se denominó los bienes abandonados, porque no había una voluntad política que ayudara a retomar y revertir el uso adecuado de estos bienes. También se perdió todo el capital humano,  como se hizo expulsado de nuestro país a los españoles residentes y nacidos en suelo Guineano. También se perdieron los bienes materiales que estos dejaron atrás. Después  volvimos a meter la pata expulsando a los nigerianos residentes y los nacidos en Guinea.
Dicho esto, concluiré mi comentario diciendo que el cambio de modelo social que los delegados comunistas impusieron a muchos países Africanos, supuso un cambio radical y una total perdida de la estructura productiva de estos países. De hecho el mismo sistema soviético acabó desmoronándose porque llegó a un punto donde colapsó porque ese modelo ha sido inviable y solo ha generado más conflictos. El modelo comunista, ha creado un caldo de cultivo para crear gobiernos dictatoriales en toda Africa.