martes, 10 de agosto de 2021

GUINEA ECUATORIAL: HOMOLOGARSE CON LOS MÁS AVANZADOS

Por Armengol Engonga Ondo. Presidente del Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial

 




Son muchos los años que llevo en política. Esto que parece sencillo, no lo es en absoluto. Estamos trabajando para imprimir al partido todos aquellos elementos que lo homologuen con las formaciones modernas de los países más avanzados y civilizados. 

He seguido de cerca los procesos de democratización de numerosos países y he comprobado que esto no funciona igual para todos. En algunos de los países más importantes que sufren la represión y gobiernos abiertamente despóticos, por razones que en la mayoría de los casos se me escapa, no son capaces de remontar la tragedia del mal gobierno y siguen sumidos en un profundo horror. Me llama la atención como naciones antes ricas, con una clase media trabajadora y emprendedora son ahora sombríos lugares donde no querrías ir ni de turista. Cambiar el curso de la historia no es como seguir un manual de instrucciones. Por esta razón, se inicio el cambio en el Partido del Progreso. Ha llegado la hora de los hechos y en eso estamos.



Nuestra formación política tiene que estar en todos los foros en los que se decida el futuro de nuestro país. Son muchas las generaciones perdidas en estos años de dictadura. Necesitamos recuperar el rumbo hacia un futuro de oportunidades para todos. Conseguir corregir la situación actual implica muchos sacrificios, pero sabemos que nuestro pueblo y que la mayoría de nosotros estamos dispuestos a pelear por alcanzar esa paz y ese progreso que tanto ansiamos y que, no cabe duda, nos merecemos.

No es el tiempo de los discursos ni de las arengas. Nos tenemos que remangar y sentarnos cara a cara para comprometernos en arreglar esta situación. Poco a poco vamos dejando atrás a los que meten palos en las ruedas. Los hay que hablan de democracia, pero piensan todo lo contrario o los que apelan a una militancia que no sabemos donde la guardan con el fin de impedir que las cosas cambien.



Tenemos un compromiso con Guinea Ecuatorial y no con aquellos que solo miran por sus mezquinos intereses particulares. No podemos empujar a nuestro pueblo a una nueva reedición del fracaso. Estamos obligados a entendernos si queremos dejar un país digno a nuestros hijos. Ojalá y cuando se estudie esta etapa de la historia se nos recuerde como personas generosas, sacrificadas y comprometidas con el bien común.



Pasar de las palabras a los hechos es lo que estamos haciendo en esta nueva etapa del Partido del Progreso. Desde hace semanas, la militancia, los cuadros medios y directivos, exponen su visión de las cosas y cómo las estamos enfrentando en el seno de nuestra organización. Tenemos muchas ideas, manuales, estrategias y modelos a seguir. Mantenemos reuniones con técnicos y expertos que nos ayudan a entender los complejos procesos de la reconstrucción de una sociedad muy maltratada. Estamos presentes en reuniones estimuladas por países democráticos e instituciones comprometidas con el fin de las tiranías y gobiernos corruptos.  La verdad, no estamos perdiendo el tiempo y quiero, de paso, felicitar a mis compañeros por el trabajo que están haciendo.

Cuando leo los artículos que publican en esta página, siento orgullo. Me gusta saber que formo parte de un colectivo que lo tiene tan claro. Me gusta el país que vamos a construir entre todos y solo espero que seamos capaces de desenmascarar a los que solo vienen a enredar a no aportar nada positivo o a dinamitar un trabajo tan delicado y sensible como el que estamos haciendo.



Nuestro objetivo está en Guinea Ecuatorial. Evidentemente, queremos que la dirección y el futuro de la formación pase por su militancia. Tenemos el firme compromiso de organizar un gran Congreso Nacional en nuestro país donde estén representados todos los ciudadanos. No vamos a perder un segundo en riñas de taberna. Nos espera un pueblo con ganas de levantar el rostro, de sonreír a la vida, de sentir que pueden mantener a su familia. Queremos que los habitantes de Guinea Ecuatorial se conviertan en ciudadanos, que puedan montar sus negocios y prosperar. Cuando leo los artículos de mis compañeros me adhiero al modelo de sociedad que defienden y por eso marcho con ellos.

El futuro está en nuestras manos. Luchemos por lo que queremos y pasemos de las palabras a los hechos. Es el tiempo para los que entienden que esto va más allá de oropeles, títulos y castas. No estamos aquí para permitir que otra familia se haga con el poder y trate a patadas a todo un pueblo. Menos palabrería y más compromiso.