Por Juan Cuevas, Secretario de Formación del Partido del Progreso
Los estudios que hemos llevado a cabo los técnicos del Partido sobre la economía, aseguran que nos aproximamos a una crisis económica sin precedentes, debido a que la dictadura ha tomado un camino equivocado,apostando por una economía basada exclusivamente en la extracción de hidrocarburos y en la construcción de grandes obras e infraestructuras, la mayoría de estas sin ninguna repercusión en el bienestar de la población. Por el contrario, ha abandonado toda la actividad secular -llevada a cabo, dede siempre, por los propios guineanos- como la agricultura, las pesquerías, las pequeñas industrias, la artesanía, etc.
Los estudios que hemos llevado a cabo los técnicos del Partido sobre la economía, aseguran que nos aproximamos a una crisis económica sin precedentes, debido a que la dictadura ha tomado un camino equivocado,apostando por una economía basada exclusivamente en la extracción de hidrocarburos y en la construcción de grandes obras e infraestructuras, la mayoría de estas sin ninguna repercusión en el bienestar de la población. Por el contrario, ha abandonado toda la actividad secular -llevada a cabo, dede siempre, por los propios guineanos- como la agricultura, las pesquerías, las pequeñas industrias, la artesanía, etc.
Durante largo tiempo, en el Partido del Progres hemos estado apuntando un modelo de desarrollo descentralizado y deslocalizado -El Confidencial- que apostara por el aprovechamiento de los recursos locales, mediante iniciativas llevadas a cabo por emprendedores guineanos y apoyadas con la ayuda del estado. Los gobiernos de Obiang Nguema han abandonado a sus gentes y han orientado toda su economía hacia una gran burbuja de construcción, alimentada por los ingresos del petróleo y apoyada mediante préstamos de países, como China y Estados Unidos. Para llevar a cabo estos proyectos millonarios e inútiles, han atraído a multitud de empresas extranjeras y han creado otras empresas -"fantasmas", la mayoría- promovidas exclusivamente por sus familiares y allegados, con el único objetivo de apropiarse de los recursos del estado.
Para Obiang, esta megalomanía -propia de los faraones- tiene dos grandes objetivos: 1º- Servir de tapadera para cobrar cuantiosas comisiones, bien por su participación en las empresas que arribaban a Guinea Ecuatorial, o bien (o ambas cosas a la vez), a través de las "mordidas" que les exige a dichas empresa. (es bueno recordar que debido a los controles de la EPI y de otros organismos de inspección y control, cada vez se le hace mas difícil desviar los barcos de crudo, para venderlos en el mercado negro) y 2º- Alimentar su ego, al presentar Guinea Ecuatorial al resto de gobernantes africanos, como el paradigma de la modernidad y del desarrollo. http://geconfidencial.blogspot.com.es/2012/01/parias-en-el-paraiso.html
La dictadura no ha querido invertir nunca en el desarrollo de su pueblo, incluso ha estado impidiendo toda iniciativa económica que no partiera de sus familiares o de los miembros del PDGE. Imaginemos por un momento, que todo el dinero robado por Obiang y su clan, o el despilfarrado en Sipopo, Oyala y otras obras inútiles, se hubiese destinado a poner en marcha una red sanitaria (atención primaria dispensarios y hospitales) gratuita y universal para todos los guineanos, o un sistema de enseñanza, también gratuita, y de calidad en todos los niveles. Imaginemos un gobierno destinando dinero a apoyar las iniciativas de los emprendedores para promover empleo, o la inversión en proyectos de desarrollo serios. Imaginemos que se hubiera dedicado a poner en marcha unos servicios sociales para todos los guineanos que lo demandasen, o en atender las necesidades de vivienda, de agua potable y alcantarillado de todos de la población. Está claro que Guinea Ecuatorial hubiese sido un país muy diferente al actual. http://geconfidencial.blogspot.com.es/2013/09/guinea-ecuatorial-la-estrella-de-africa_15.html
Hemos estado advirtiendo durante mucho tiempo que este modelo económico, basado solamente en el petróleo, tenía un final desastroso para el país, ya que agotado este recurso, su economía experimentaría una profunda depresión: el denominado síndrome holandés. Debido a la brutal bajada de los precios del crudo, lo que estaba previsto para un futuro mas o menos lejano, se ha precipitado. El desastre económico en Guinea Ecuatorial, es ya un hecho constatado.
El Presupuesto de Guinea Ecuatorial para 2015 presenta un déficit de 22,5 %
Otro factor que ha ayudado a precipitar la crisis, crisis que no ha hecho mas que empezar, ha sido la gran ansia por robar que ha invadido a todos los estamentos ministeriales y que ha cundido entre los familiares y allegados al régimen. Parecía más bien una orden enviada por el propio dictador para que rápidamente se apoderaran de todo el dinero posible y ponerlo a buen recaudo, fuera del país. Unido a esto, ha habido una falta de gestión y de control en todo lo relacionado con el erario publico, por lo que se puede afirmar que la administración de Obiang ha sido un auténtico descontrol y un verdadero desastre.
Ante la situación de bancarrota que se les ha venido encima, el régimen ha reaccionado intentando desbloquear los préstamos con los Estados Unidos, además de tocar a rebato a todos los ministerios y organismos oficiales, para captar remanentes (poco se van a encontrar) con el fin de destinarlos a enjugar la gran deuda que tienen con las empresas extranjeras. Mientras tanto estas se están deslocalizando hacia fuera de Guinea Ecuatorial, circunstancia que va dejando atrás una sangría de paro, imposible de recolocar en un país que ha destruido todo el tejido productivo de la pequeña y mediana empresa.
Las consecuencias finales de esta situación, influirán directamente sobre los más débiles y más desfavorecidos, que de nuevo pagarán las consecuencias de la nefasta gestión de unos gobernantes que solo han pensado en enriquecerse ellos mismos y enriquecer al conglomerado de siglas e intereses (de fuera y dentro del país) dedicados a justificar y a mantener la dictadura.
El Presupuesto de Guinea Ecuatorial para 2015 presenta un déficit de 22,5 %
Otro factor que ha ayudado a precipitar la crisis, crisis que no ha hecho mas que empezar, ha sido la gran ansia por robar que ha invadido a todos los estamentos ministeriales y que ha cundido entre los familiares y allegados al régimen. Parecía más bien una orden enviada por el propio dictador para que rápidamente se apoderaran de todo el dinero posible y ponerlo a buen recaudo, fuera del país. Unido a esto, ha habido una falta de gestión y de control en todo lo relacionado con el erario publico, por lo que se puede afirmar que la administración de Obiang ha sido un auténtico descontrol y un verdadero desastre.
Ante la situación de bancarrota que se les ha venido encima, el régimen ha reaccionado intentando desbloquear los préstamos con los Estados Unidos, además de tocar a rebato a todos los ministerios y organismos oficiales, para captar remanentes (poco se van a encontrar) con el fin de destinarlos a enjugar la gran deuda que tienen con las empresas extranjeras. Mientras tanto estas se están deslocalizando hacia fuera de Guinea Ecuatorial, circunstancia que va dejando atrás una sangría de paro, imposible de recolocar en un país que ha destruido todo el tejido productivo de la pequeña y mediana empresa.
Las consecuencias finales de esta situación, influirán directamente sobre los más débiles y más desfavorecidos, que de nuevo pagarán las consecuencias de la nefasta gestión de unos gobernantes que solo han pensado en enriquecerse ellos mismos y enriquecer al conglomerado de siglas e intereses (de fuera y dentro del país) dedicados a justificar y a mantener la dictadura.