lunes, 20 de septiembre de 2010

Hipocresía o la política de «tira la piedra y esconde la mano»


Hipocresía o la política de «tira la piedra y esconde la mano»



Samuel Mbá Mombé (20/9/2010)

La reacción del Gobierno español sobre el macabro asesinato político de cuatro ciudadanos inocentes, que el dictador Teodoro Obiang Nguema comete por enésima vez en los más de 30 años que lleva en el poder, llega demasiado tarde tanto para las víctimas, sus familiares, como al Pueblo de Guinea Ecuatorial en su conjunto.

El abominable crimen se pudo evitar si la llamada Comunidad Internacional a la que pertenece España hubiera reaccionado con rigor y responsabilidad a las denuncias de la oposición mocrática sobre el secuestro en Benín de los cuatro refugiados y el temor justificado de que podrían ser eliminados por la dictadura. Esa esperada reacción no se produjo y los hechos nos están dando la razón.

Los gobiernos llamados democráticos con fuertes intereses en nuestro país están emostrando que el sufrimiento del pueblo guineano no es motivo para frenar al dictador, siempre que éste sigua siendo para ellos el garante para seguir esquilmando nuestros recursos naturales. La hipocresía y la política de doble moral que practican esos supuestos demócratas, muestra a todas luces que nuestro pueblo debe asumir la responsabilidad de acabar con el oprobioso régimen.

Esperar de la Comunidad Internacional a que venga a remediar nuestra situación es pura sión.

La política de esos gobiernos supuestamente democráticos es de «tira la piedra y esconde la mano». En los 30 años que el déspota lleva en el poder, ¿cuántas condenas sin efecto ha hecho la Comunidad Internacional? No es la misma Comunidad Internacional que puso fin en 2002 la misión del Relator Especial de la ONU sobre los derechos humanos en Guinea Ecuatorial cuando éstos están siendo todavía violados de manera flagrante y sistemática incluyendo los asesinatos políticos como es el caso que nos ocupa actualmente?

¿Acaso no es España que con su flamante Ministro de Asuntos Exteriores está dando el espaldarazo al régimen dictatorial a sabiendas de que Obiang es campeón en e cumplimiento de los acuerdos y compromisos contraídos tanto con la oposición que con la Comunidad Internacional? ¿Cómo un gobierno que se dice democrático como el español puede apoyar a un dictador que sigue ganando las elecciones con el récord de 100% como ocurría en los regímenes comunistas de triste memoria, amén de las demás fechorías que comete a diario y que están grabadas en la memoria de todos y que dejan perplejos a propios y extraños? ¿Cuáles son las garantías que ofrece el régimen para que una oposición organizada y bulliciosa pueda desarrollar libremente sus actividades en el país?

¿Tales garantías existen, Señor Moratinos? La respuesta es un rotundo NO. La verdadera oposición no está dispuesta a participar en este espectáculo circense porque sería reforzar el régimen dictatorial y acompañarlo en la ejecución de sus planes maquiavélicos contra nuestro pueblo. España debe abolir el Decreto Ley franquista de ”Guinea Ecuatorial, Materia eservada” al parecer todavía vigente en la España «democrática» para romper el muro de silencio y de desinformación sobre los asuntos relacionados a nuestro país. Si la referida Ley no está en vigor, ¿cómo se explica pues, la desinformación sobre los temas de Guinea
Ecuatorial?

La persecución a la disidencia guineoecuatoriana en España, empieza con el cierre manu militari del Programa de Radio Exterior de España en su Emisión para Guinea Ecuatorial que dirigía la periodista Rafaela de la Torre. Este programa ue una oportunidad insólita para los guineoecuatorianos de dentro y de fuera de poder expresarse libremente y emitir sus opiniones sin previa censura al no haber en el país medios de comunicación libres y los existentes se encuentran controlados por la dictadura. Actualmente los opositores al régimen de Obiang residentes en España andan con piel de plomo, sin protección alguna, ni política, ni económica e incluso me atrevería a decir ni jurídica, todo gracias a la colaboración y tubernio del Gobierno español con la dictadura de Obiang Nguema y si me equivoco, la situación de nuestro compatriota y líder de la oposición, Severo Moto Nsa, viene a confirmar los hechos expuestos.

Lo que exigimos del Gobierno español no son condenas sin seguimiento, papeles mojados sin acciones concretas como el aislamiento diplomático del régimen y una postura clara y contundente por los hechos acaecidos recientemente en nuestro país. España debería distanciarse del régimen dictatorial y al que debe enviar un mensaje claro que no va a tolerar acciones tan deplorables como inadmisibles como el reciente asesinato político de cuatro ciudadanos inocentes.

moratinos1España debe asumir el compromiso de apoyar a la oposición democrática de Guinea Ecuatorial en su desigual lucha por la instauración por vía de las urnas de un gobierno emocrático así como velar por su seguridad en el territorio español.

El Gobierno español debe facilitar el acceso de los opositores políticos a los medios de comunicación escritos y audiovisuales así como crear espacios que permitan la difusión libre de informaciones relacionadas con Guinea Ecuatorial como lo fue en su día la emisión de Radio Exterior de España.

El compromiso del Gobierno español de poner en marcha algunas de estas recomendaciones podría bajar el tono y la temperatura de la oposición, de lo contrario, España no será más que cómplice del terror y la barbarie del régimen de Teodoro Obiang Nguema.

N. de la R.
Samuel Mbá Mombé, es doctor en Medicina y “Opositor Independiente”, como él mismo se califica


Fuente: http://espacioseuropeos.com/?p=20599