lunes, 8 de abril de 2024

CONVIVENCIA NO ES CONNIVENCIA


Por Nieves Rosa Gonzalez Sánchez, Responsable del Observatorio de los Derechos Humanos del PPGE

La dictadura de Obiang se ha especializado en el poder de alienación ejercido sobre toda la Nación, ayudado por la inexistente ayuda internacional a una población enajenada, tras cuarenta y cinco años de sometimiento ejercido por la dictadura de Teodoro Obiang Nguema Mbasogo, sobre la indefensa y pacífica población de Guinea Ecuatorial.
Obiang contó con ayuda de regímenes totalitarios desde su golpe de Estado en 1979. La dictadura militar Argentina, dirigida por Rafael Videla, presidente de la junta militar  y dictador, entre 1976 y 1981, viajó a Malabo para firmar el 24 de octubre de 1980, un acuerdo de cooperación científica con el régimen establecido por Obiang; ambos dictadores,  Rafael Videla y Teodoro Obiang, a su vez estrecharon  relaciones comerciales y de cooperación con el dictador brasileño, Castelo Branco, que dirigía  con mano de hierro Brasil desde 1964, y que se perpetuó en el poder hasta 1985. Esta triada atlántica, fue la fuente de inspiración de Obiang; de Argentina copió  la manera de hacer desaparecer opositores por el método del "vuelo de la muerte".  Actualmente, esos vuelos se utilizan en Guinea Ecuatorial para secuestrar y torturar a los opositores pacíficos al régimen, o a los asilados GUINEANOS en cualquier país del mundo, donde Obiang aún tiene tentáculos económicos, y compra la voluntad, incluso, de quienes posteriormente se convertirán en sus víctimas; de Brasil, el sistema fraudulento de partidos opositores pactados, que legitiman a la propia dictadura, asegurándole que jamás será derrotada en las urnas. https://servicios.infoleg.gob.ar/infolegInternet/anexos/20000-24999/22310/norma.htm



Convivir es una condición impuesta a cualquier individuo en sociedad. Nacemos sin haber elegido el lugar ni la familia, y nos desarrollamos dentro de ella. A diferencia de la convivencia, la connivencia es voluntaria; nadie te puede obligar a apoyar en tu fuero interno a quien te maltrata y somete, o maltrata y somete a tu entorno, es decir, familia, amigos, vecinos y conciudadanos.
Todos los opositores al régimen de Obiang en la actualidad hemos asistido a arduos debates;  muchas personas que dicen querer lo mismo que nosotros, es decir, la democratización de Guinea Ecuatorial, y con los que  muchos han tenido que convivir en Guinea Ecuatorial, no entienden que haber convivido con ellos no tiene que ser condición determinante para que connivan con ellos, y con sus métodos de convencimiento, y menos cuando esos personajes, nuevos pretendientes a ser adalides de lucha por el respeto de los DDHH, no han pedido perdón a las víctimas, ni han mostrado arrepentimiento público por los efectos mortíferos que ocasionaron cuando ocupaban sus cargos en Guinea Ecuatorial.
La alienación y enajenación a la que Obiang ha sometido a nuestra Nación es semejante a lo que ahora pretenden sus discípulos en la diáspora, que intentan aglutinar a los más desfavorecidos por el largo exilio, para prometerles las mieles de una Nación que no los quiere, y no quiere que se les imponga. Guinea Ecuatorial quiere libertad y un proceso democratizador que no tenga nada que ver con el régimen anquilosado en el pasado de los Obiang, su prole y acólitos, y fanáticos de su partido político PDGE, de donde han salido los sabiamente orientados por su fundador Obiang, y de donde ahora intentan zafarse para incorporarse a la lucha contra todo lo que ellos han ayudado a crear, que no es ni más ni menos que el infierno en la tierra.