Exilio del Partido del Progreso en España 18 de Agosto del 2020.- No es una sorpresa para nosotros que Obiang haya vuelto a nombrar a Pascual Obama como Primer Ministro, y esta es la tercera vez, la sorpresa para nosotros sería que el dictador hubiera hecho las cosas bien. En este sentido os dicto directamente la contestación de un compañero en el interior de Guinea Ecuatorial: Es curioso que alguien se pueda sorprender de este nombramiento, mi sorpresa es vuestra sorpresa. Obiang nunca me sorprende. Sé todo lo que va hacer y la única sorpresa es hacer las cosas bien y a favor de Guinea Ecuatorial.
Para el que no conozca al dictador le sorprendería que habiendo descalificado duramente el día antes la gestión del gobierno saliente, y del que era directamente responsable, el que lo encabeza, lo vuelva nombrar. Si la decisión de destituir a todo el gabinete en pleno, está motivada, según Obiang, a una "posible insolvencia del gobierno frente a sus obligaciones puntales", ¿Qué sentido tiene volver a nombrarlo?. ¿Qué macabra forma es esta?.
La única explicación posible es que Obiang, en expresión popular, está "mareando la perdiz": nos está tomando el pelo. Está jugando con el futuro de Guinea Ecuatorial y con el de nuestros hijos.
Esto pone de manifiesto que en el fondo a Obiang se le han acabado las posibilidades, no cuenta ni con personas para poder llevar adelante una mínima gestión ni los resortes para ella y, lo mas importante, da a entender que le importan muy poco los guineanos.
El comunicado que ha emitido la propia hacienda de Guinea Ecuatorial es esclarecedor de la difícil situación por la que atraviesa nuestro país:<iframe width="560" height="315" src="https://www.youtube.com/embed/MXlIKjsrPvM" frameborder="0" allow="accelerometer; autoplay; encrypted-media; gyroscope; picture-in-picture" allowfullscreen></iframe>
Al final está haciendo en Guinea lo que vino a hacer. Y nos explicamos: Obiang llegó de Gabón con su padre, huyendo de de la justicia francesa, (recordemos que era ladrón de cabras) para seguir haciendo en Guinea lo que sabía; robar.
El dictador ha demostrado en numerosas ocasiones que siente desprecio por nuestro pueblo, un desprecio que le llevó a ridiculizarnos públicamente en una ocasión, utilizando aquel adjetivo descalificativo: "los guineanos son pobres mentales"
La grave situación institucional, social y económica de Guinea Ecuatorial, no merece volver a nombrar como primer ministro a el que fue no fue capaz remediar el desastre.
Esperemos que con el nombramiento de los ministros nos sorprenda.
