domingo, 12 de noviembre de 2023

“UNA POLÍTICA DE CONSENSO Y DE ACUERDOS, PARA UNA NUEVA ERA DE LIBERTAD Y DEMOCRACIA EN GUINEA ECUATORIAL”


Por Juan Cuevas 


Ante el panorama de destrucción al que ha sido sometido nuestro pueblo y al conjunto de la sociedad por parte de la dictadura de la Familia Obiang, se hace necesario marcar una meta clara e inequívoca: instaurar la democracia en Guinea Ecuatorial. Para cumplir este objetivo, es por tanto necesario promover una política de unidad entre los partidos, los grupos étnicos  y los del conjunto de la sociedad. 

En la transición a la democracia que nos espera, y que estamos empeñados en llevar a cabo, será necesario reparar las profundas heridas que ha dejado la Dictadura en la sociedad guineana y dar esperanza a nuestro pueblo. Para ello se requerirá una política de consensos y acuerdos, pero siempre desde la firmeza para saber mantener los principios fundamentales, el cumplimiento de la ley, de las normas, la integridad territorial y la unidad nacional, que son irrenunciables.

Esta debe ser la hoja de ruta que nos debemos marcar: el entendimiento entre todos para iniciar una transición exitosa hacia la democracia en Guinea Ecuatorial.  

Después de todo lo que ha sufrido nuestro pueblo, debemos ser lo suficientemente generosos, flexibles y amplios de miras, para recoger ampliamente las aspiraciones de la gente, entendiendo el sufrimiento que a todos los guineanos les ha tocado vivir. 

Mantener un lenguaje democrático y de rescate de nuestro pueblo, es el ambiente que estamos  obligados a conseguir todos los que nos disponemos a dar un giro de 180º a la lamentable situación de falta de libertad, de vulneración de los derechos humanos en nuestro país. 

Todo estos planteamientos deben ser aplicables a los líderes de los partidos políticos verdaderos, pero también es exigencia para todos los que luchamos por llevar la democracia, la dignidad humana y el desarrollo al pueblo de Guinea Ecuatorial. 

Después de tantos años en la oposición sin habernos podido sacudir el yugo de la dictadura de los Obiang, es hasta comprensible que muchos guineanos desconfíen de sus políticos, pero también es comprensible que una dictadura que controla todos los resortes del poder, con una incomprensible legitimación de muchos países, sea muy difícil de combatir y mas todavía de derribar. De aquí el esfuerzo que debemos hacer todos para clarificar nuestras verdaderas intenciones, unos, y para saber confiar en las personas, otros. 

No hay otro camino, o el entendimiento para iniciar una transición a la democracia entre todos, o la continuidad de la dictadura, aunque sea con otras caras. 

Desde hace mucho tiempo he estado trabajando, junto al Partido del progreso, a su Presidente y a sus directivos,  en el  proyecto que se ha convertido ya en una obsesión para todos nosotros, que es el llevar la democracia a Guinea y promover un desarrollo duradero. Para poder conseguirlo debemos poner las condiciones para que se consiga una distribución justa de la riqueza, que se permita el desarrollo de la agricultura, de las pequeñas industrias y que se pongan en marcha todos los servicios básicos para los ciudadanos. En definitiva, mejorar las condiciones de vida y trabajo  de todos los guineanos, sin exclusiones, por etnia, tribu o condición sexual y social.

El destino nos ha puesto en una trascendental disyuntiva, o nos entendemos para culminar la transición a la democracia, o seguiremos durante muchos años en la misma situación.